El cuarto juicio de Tous despega entre el des¨¢nimo de todos sus protagonistas

La presa de Tous funcionaba antes de concluir las obras, la zona presentaba riesgo de se¨ªsmos, y las compuertas no se abrieron el d¨ªa de la cat¨¢strofe, seg¨²n qued¨® de manifiesto ayer en la primera sesi¨®n del cuarto juicio. Estos datos ya afloraron en 1987, en 1989 y en 1993. Faltaba que se confirmaran en 1995. As¨ª es que ayer, en la Audiencia de Valencia, el primero de los tres ingenieros procesados, Salvador Madrigal, fue interrogado.

Durante meses, si una de las sorpresas habituales del caso Tous no lo impide, juristas e ingenieros discutir¨¢n sobre las causas de una cat¨¢strofe que asol¨® la comarca valenciana de La Ribera.El cuarto juicio por la rotura de la presa, un hecho acaecido hace 12 a?os y medio, cont¨® con la asistencia de m¨¢s de 100 damnificados. "A ver si se les cae la cara de verg¨¹enza y pagan ya", exclam¨® Alfredo, uno de ellos.

Las cosas no han ido mucho mejor para los tres ingenieros procesados. "Esto me ha marcado la vida", se?al¨® Salvador Madrigal, autor del proyecto de la obra. "Mi sensaci¨®n es de cansancio", seg¨²n Jes¨²s Gonz¨¢lez Mar¨ªn, ingeniero a pie de presa.

"Estoy bastante fastidiado e inc¨®modo", en palabras de Juan Sancho-Tollo, comisario de Aguas del J¨²car en 1981.

El fiscal acusa a Madrigal y Gonz¨¢lez de una imprudencia temeraria con resultado de nueve muertos y da?os por valor de 40.000 millones de pesetas. Unas 35.000 personas resultaron perjudicadas por las inundaciones.

Curisosamente, estos dos ingenieros fueron absueltos tras el segundo juicio, el ¨²nico que lleg¨® hasta el final. El ministerio p¨²blico, en cambio, exculpa a Sancho-Tello, quien result¨® condenado en aquella sentencia, que despu¨¦s ser¨ªa anulada por el Tribunal Supremo.

Las defensas mantienen que durante los d¨ªas previos a la rotura de la presa llovi¨® torrencialmente y se produjo una riada superior a los 7.000 metros c¨²bicos por segundo, una avalancha mayor a la m¨¢xima prevista para un per¨ªodo de 500 a?os. Por este motivo, defienden que las inundaciones fueron causadas por una fuerza mayor no atribuible a los seres humanos.

"?Tiene usted -relaci¨®n laboral con el Ministerio (de Obras P¨²blicas) y, en su caso, desde cu¨¢ndo?" Con esta primera pregunta, repetida por distintos fiscales a lo largo de los a?os, se abrieron los interrogatorios a Salvador Madrigal, director de la construcci¨®n de la obra.

Antes, el fiscal Enrique Beltr¨¢n aport¨® una nueva prueba, 12 a?os y medio despu¨¦s, consistente en el anuario de 1957 de un peri¨®dico local. Madrigal insisti¨® en su l¨ªnea de defensa ya conocida por el resto de protagonistas de esta historia, aunque no por los magistrados, que son nuevos como consecuencia de la desacreditaci¨®n de los primeros por parte del Tribunal Supremo y la renuncia de los segundos, tras sentirse desautorizados por el Constitucional.

Salvador Madrigal reiter¨¦ que es funcionario. Por esa raz¨®n, los proyectos de Tous que firm¨® fueron realizados tambi¨¦n por otros t¨¦cnicos y, finalmente, revisados por sus superiores, que los aprobaron. En su opini¨®n, la presa era "segura".

Gastos de peritos

Amadeo P¨¦rez, en representaci¨®n de los damnificados, insisti¨® durante sus preguntas en la falta de un ensayo a escala adecuado, cuyos dict¨¢menes oficiales no llegaron hasta despu¨¦s del desmoronamiento de Tous.

P¨¦rez pregunt¨® por qu¨¦ se dise?o una presa de compuertas, cuando el proyecto inicial -el denominado proyecto Corb¨ª- preve¨ªa un sistema de aliviadero a trav¨¦s de un labio fijo.

Una de las pol¨¦micas espec¨ªficas de este cuarto juicio es qui¨¦n debe pagar los gastos de los peritos extranjeros, ya que las arcas de las asociaciones de afectados est¨¢n vac¨ªas tras las vistas anteriores. Xavier Sierra, presidente de Afiva, la asociaci¨®n que re¨²ne a m¨¢s damnificados, se?al¨® al respecto: "Como dice un refr¨¢n valenciano, el dinero y los cojones son para las ocasiones. Hemos demostrado que tenemos dinero y lo otro".