Un acusado de matar a dos transexuales culpa a su otro 'yo'
A 66 a?os de c¨¢rcel se enfrenta Joaqu¨ªn Villal¨®n, el hombre de los dos rostros, seg¨²n le defini¨® ayer su abogado: el de un asesino capaz de descuartizar a su novia o de matar, presuntamente, a dos transexuales; y el de un seductor. Villal¨®n, de 39 a?os, fue condenado hace 11 a?os por matar a su compa?era; y ahora puede ser condenado otra vez. Ayer empez¨® a ser juzgado como supuesto asesino -en 1992- de los transexuales Dar¨ªo Jos¨¦ L, autoapodado Carmen, y Juan Manuel M., Joanna.
Villal¨®n, anta?o empleado de un comercio de carnicer¨ªa, rehus¨® declarar ayer ante el tribunal de la Secci¨®n Tercera de la Audiencia -integrada por los magistrados F¨¦lix Alfonso G¨¹evara, Pilar Abad y Carlos Ollero- Se deslig¨® de ambos cr¨ªmenes esgrimiendo que el autor no fue ¨¦l, sino su otro yo. Su abogado, Marcos Garc¨ªa Montes, advirti¨® que su cliente es un enfermo cuya doble personalidad reviste un gran peligro. En un descanso del juicio, familiares de las v¨ªctimas le increparon con gritos de "asesino".El primer crimen que le atribuyen el fiscal y la Asociaci¨®n de Transexuales de Espa?a ocurri¨® el 27 de septiembre de 1992 en un lujoso apartamento del paseo de La Habana que Dar¨ªo Jos¨¦, Carmen, utilizaba para satisfacer los deseos sexuales de sus clientes. Tras originarse una discusi¨®n entre ambos, seg¨²n el fiscal, Villal¨®n le roci¨® en la cara con un aerosol, le rode¨® el cuello con una cadena de las que se utilizan para las pr¨¢cticas sadomasoquistas y, una vez en el suelo, cubri¨® sus piernas con telas y las prendi¨® fuego. Uno de los bomberos que particip¨® en la extinci¨®n del fuego coment¨® ayer al tribunal que hall¨® a Carmen con vida. Se mov¨ªa ligeramente intentando deshacerse de las telas que abrasaban sus piernas. Dar¨ªo Jos¨¦, Carmen, falleci¨® semanas despu¨¦s en La Paz, tras serle amputadas su calcinadas extremidades.
La segunda v¨ªctima fue, seg¨²n el fiscal, Juan Manuel M., Joanna, otro transexual que comerciaba con su cuerpo. El crimen ocurri¨® el 9 de octubre de 1992 en la vivienda que Joanna pose¨ªa en Lavapi¨¦s.
Tras una discusi¨®n con V¨ªllal¨®n, ¨¦ste le propin¨® un fuerte golpe en la cabeza. Una vez inconsciente, llev¨® a Joanna al cuarto de ba?o y le introdujo la cabeza en la ba?era llena de agua.
Luego le rob¨® las tarjetas de cr¨¦dito, con las que consigui¨® m¨¢s de dos millones de pesetas. El uso de las tarjetas del asesinado ayud¨® a su detenci¨®n.
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