La polic¨ªa cierra la plaza Letten de Z¨²rich, el gran supermercado de la droga
Los toxic¨®manos desalojados quedan sin protecci¨®n de ninguna instituci¨®n
La plaza Letten, la estaci¨®n abandonada, de Z¨²rich, considerada el gran supermercado europeo de las drogas duras, fue cerrada a medianoche de ayer por la polic¨ªa suiza, ante una nube de c¨¢maras de televisi¨®n. Los toxic¨®manos, que desde el pasado oto?o empezaron a ser enviados a sus cantones de origen, quedan ahora en su mayor¨ªa sin protecci¨®n, puesto que muchas de las entidades locales declaran carecer de medios para brindarles apoyo. Las autoridades de Z¨²rich ya han manifestado que los drogadictos del cant¨®n tendr¨¢n que apa?¨¢rselas solos.
Tras la operaci¨®n de desalojo, desarrollada bajo la lluvia, 300 polic¨ªas se han apostado en Letten, tras barrotes y alambradas, para impedir el regreso de los toxic¨®manos. Se estima que la estaci¨®n, de 40 hect¨¢reas, lleg¨® a albergar el pasado verano hasta 5.000 drogadictos. Ayer por la ma?ana equipos de limpieza recog¨ªan jeringuillas, preservativos y todo tipo de desechos.Seis horas antes del cierre definitivo del lugar que acogi¨® el mercado abierto de la droga, desde que en febrero de 1992 fuera desalojada la cercana Platzspitz, unas 300 personas, principalmente miembros de asociaciones de emigrantes y trabajadores sociales, se manifestaban contra la pol¨ªtica represiva con la droga que desarrollan las autoridades de Z¨²rich.
"La pr¨¢ctica del reenv¨ªo que ejerce la polic¨ªa de Z¨²rich est¨¢ en contradicci¨®n con dos principios fundamentales de nuestro Estado de derecho: la libertad de circulaci¨®n y de establecimiento de confederados y extranjeros titulares de un permiso de residencia", afirm¨® el consejero cantonal ginebrino Guy Olivier Segond.
Consumismo
Seg¨²n uno de los manifestantes, "las autoridades har¨ªan mejor, en lugar de ocuparse del peque?o traficante, dedicarse a controlar la mafia y el blanqueo de dinero de la droga que contin¨²a efectu¨¢ndose en la Paradeplatz, donde tienen su sede central los principales bancos suizos". Los defensores de una pol¨ªtica social de lucha contra la droga destacan la importancia de que las autoridades adopten medidas de otro tipo y no s¨®lo de represi¨®n, en un pa¨ªs con ¨ªndices de suicidios de adolescentes entre los m¨¢s elevados del mundo e importante estr¨¦s juvenil en busca de novedades, en medio de la m¨¢s rica sociedad de consumo.
El barrio se ha llenado de carteles policiales pidiendo a los ciudadanos que denuncien todo comercio sospechoso que vean. La polic¨ªa tiene ¨®rdenes de patrullar especialmente la zona durante los tres pr¨®ximos meses. Traficantes liberianos, nigerianos y angole?os ya atienden a la clientela en los patios interiores de los bloques de edificios, sin ocultarse, pero no formulan las ofertas de coca¨ªna en alta voz, como lleg¨® a suceder en Letten y en Platzspitz.
Numerosos revendedores libaneses, de Kosovo, palestinos u otros, continuar¨¢n vendiendo drogas sin llevarlas encima, y preferir¨¢n conducir a los compradores a lugares determinados, informan los expertos. Para los responsables de la operaci¨®n, se trata de evitar en Z¨²rich un nuevo centro de drogadicci¨®n que, sustituya a la plaza Letten, conocida popularmente como Parque Aguja o Toxicolandia.
Frente a esta acci¨®n, una asociaci¨®n suiza est¨¢ lanzando una gran campa?a pidiendo la "nacionalizaci¨®n" de la venta de droga, de forma que sea controlada por el Gobierno federal y evite que surjan mafias.
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