El Cesid dice que la cinta de Su¨¢rez se entreg¨® a Cortina
El Centro Superior de Investigaci¨®n de la Defensa (Cesid) ha realizado una informaci¨®n interna sobre la cinta magnetof¨®nica que el 9 de octubre de 1978 se grab¨® de una reuni¨®n entre el entonces presidente Adolfo Su¨¢rez y responsables del servicio secreto en la que se concluye que la grabaci¨®n, que ha sido parcialmente reproducida ahora por el diario El Mundo, se entreg¨® al comandante Jos¨¦ Luis Cortina y no fue guardada nunca en los archivos del centro.Esta versi¨®n es negada por el propio Cortina, quien afirma que la documentaci¨®n se guard¨® en el archivo de La Agrupaci¨®n, la unidad operativa del servicio secreto que ¨¦l mismo dirig¨ªa, ya que el Cesid no contaba con archivos centrales.
Seg¨²n el resultado de la informaci¨®n interna del Cesid, que ha ordenado el director del centro, Emilio Alonso Manglano, para aclarar lo que ocurri¨® con dicha grabaci¨®n, en aquella fecha se celebr¨® una reuni¨®n en el chal¨¦ que el grupo operativo n¨²mero 1 del servicio secreto ten¨ªa en la zona de la Dehesa de la Villa, en el noroeste de Madrid.
A la misma asistieron, adem¨¢s de Su¨¢rez y del vicepresidente Guti¨¦rrez Mellado, el director del Cesid, general Bourg¨®n L¨®pez-Doriga (Manglano se incorpor¨® en mayo de 1981); el subdirector Manuel Vallesp¨ªn; el jefe de la divisi¨®n de Interior, general Ollero; su n¨²mero dos, Jos¨¦ Faura (actual jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito); el jefe del departamento de Investigaci¨®n, Gonz¨¢lez Torres; el comandante Jos¨¦ Luis Cortina; y el jefe del grupo n¨²mero 1, Garc¨ªa Armenta.
Durante la primera parte de la reuni¨®n, se expuso a los visitantes, con ayuda de diapositivas, los m¨¦todos de actuaci¨®n y entrenamiento del grupo operativo dependiente de Cortina. La sesi¨®n se grab¨® de manera abierta y p¨²blica, como se hac¨ªa habitualmente con este tipo de conferencias, e incluso se entreg¨® a los hu¨¦spedes varias fotograf¨ªas que les hab¨ªan realizado durante la sesi¨®n sin que se dieran cuenta, para demostrarles las capacidades del servicio.
Sin embargo, la noticia de un atentado (aquel d¨ªa fueron asesinados dos guardias civiles en el Pa¨ªs Vasco) interrumpi¨® abruptamente la visita y Su¨¢rez pidi¨® un tel¨¦fono, por lo que pas¨® al despacho de Cortina para realizar una llamada.
Posteriormente, se produjo una conversaci¨®n privada entre el presidente Su¨¢rez y algunos de presentes, bajo los efectos del atentado, que tambi¨¦n fue grabada, si bien de forma subrepticia, seg¨²n la informaci¨®n del Cesid. El servicio secreto concluye que s¨®lo se ha determinado que las grabaciones se entregaron posteriormente a Cortina, sin que haya constancia de que se guardaran en los archivos del centro en ning¨²n momento.
Cortina sostiene, por su parte, que "todo lo que se hizo en aquella reuni¨®n, incluidas las posibles grabaciones, fue en cumplimiento estricto de las instrucciones del director del centro".
El entonces comandante niega que su despacho estuviera en aquel chal¨¦ y explica que era habitual grabar este tipo de reuniones, para luego realizar el correspondiente acta, por lo que no cree que el general Bourg¨®n traicionara la confianza de sus hu¨¦spedes al grabarles.
"Toda la documentaci¨®n que se produjo en aquella visita se decidi¨®, por la direcci¨®n del Cesid, que fuese guardada en el archivo de La Agrupaci¨®n, ya que el centro carec¨ªa de archivos centrales"; afirma Cortina. "Ni cuando me march¨¦ del Cesid ni antes me llev¨¦ ning¨²n material ni documento".
Cortina dej¨® el Cesid en 1981, despu¨¦s de que fuera procesado y finalmente absuelto en el Consejo de Guerra por el 23-F.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.