En 1994 se segu¨ªa utilizando el malet¨ªn para el dinero del colegio de hu¨¦rfanos
En 1994, cuando ya Luis Rold¨¢n no era director general, se segu¨ªa utilizando el m¨¦todo del malet¨ªn para llevar fuertes cantidades de dinero en met¨¢lico a la Imprenta de Hu¨¦rfanos. En la declaraci¨®n de uno de los agentes que trabaj¨® en la Secretar¨ªa General, ¨¦ste relata que en una ocasi¨®n se recogi¨® un malet¨ªn con dinero de la Imprenta de Hu¨¦rfanos. El guardia civil se?ala que "no sabe qu¨¦ pasaba con el dinero, si se contabilizaba o no".Pero la ausencia de control sobre estos fondos debi¨® continuar meses despu¨¦s, porque en su declaraci¨®n, realizada el 15 de junio de 1994, el agente explica un hecho que parece demostrarlo as¨ª. El guardia civil dice que "hace unos d¨ªas" -est¨¢ hablando del mes de junio de 1994- el capit¨¢n Fabi¨¢n, en esta ocasi¨®n, le envi¨® a llevar en un malet¨ªn siete millones de pesetas a la Imprenta de Hu¨¦rfanos. No sabe de donde sali¨® el dinero, que iba en billetes de 10.000 pesetas, y supone que esta decisi¨®n ser¨ªa del Director". Tambi¨¦n aclara que el capit¨¢n Fabi¨¢n, que manejaba los fondos -tanto las asignaciones de protocolo, como los fondos reservados- nunca despachaba directamente con Rold¨¢n. Siempre se hac¨ªa a trav¨¦s del Jefe de la Secretar¨ªa.
Los guardias civiles que trabajaron en la Direcci¨®n General en la ¨¦poca de Luis Rold¨¢n declararon ante la juez Ana Ferrer que era frecuente que les enviaran a ingresar dinero a nombre del director general. Y no muestran demasiada sorpresa por los trabajados realizados para el director.
En sus declaraciones, alguno de los agentes asegura que "no dio mayor importancia al hecho de ingresar esta cantidad"-en esta ocasi¨®n se trataba de 500.000 pesetas- que "cree que se lo dieron en inet¨¢lico". En el sumario, y acompa?ando las declaraciones de los agentes, se incluyen justificantes de ingresos, transferencias y talones por un importe superior a los 20 millones de pesetas.
Libros separados
La contabilidad de los fondos, seg¨²n la declaraci¨®n de uno de los agentes, la llevaba en la Secretar¨ªa General el capit¨¢n Fabi¨¢n. Las cuentas se llevaban en libros separados. En su declaraci¨®n, un agente dice que ignora si a final de mes se destru¨ªan los libros de los fondos reservados. Y narra c¨®mo en una ocasi¨®n fue llamado para destruir documentos y, creyendo que eran gastos reservados, los meti¨® en la trituradora.
Los agentes coinciden en que ignoraban de d¨®nde sal¨ªa el dinero que ingresaban en las cuentas de Luis Rold¨¢n y que, casi siempre, era dinero en met¨¢lico.
En otra de las declaraciones se habla de la correspondencia del director. Y se aclara que se divid¨ªa en cartas personales y oficiales. Las, primeras no se abr¨ªan y se le remit¨ªan directamente a Luis Rold¨¢n. Tambi¨¦n la persona encargada de la correspondencia hac¨ªa ingresos y operaciones en las cuentas privadas, "para evitar que bajase el director".
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