M¨¦xico roza el colapso financiero tras hundirse el peso ayer otro 7,5% frente al d¨®lar
El Gobierno de Ernesto Zedillo cumple hoy 100 d¨ªas amargos en el poder. M¨¦xico se encuentra al borde del colapso despu¨¦s de que el peso, insensible a las medidas del banco central, se hundiese ayer otro- 7,5%, con lo que la p¨¦rdida frente al d¨®lar desde el estallido de la crisis supera ya el 120%. Por primera vez, el Banco de M¨¦xico se vio forzado a desmentir que el pa¨ªs vaya a suspender pagos. La Administraci¨®n mexicana ten¨ªa previsto anunciar anoche un estricto plan de ajuste, con "dur¨ªsimas" consecuencias para la poblaci¨®n, mientras los analistas advert¨ªan que "si M¨¦xico cae, no ser¨¢ el ¨²nico".
El retraso en la presentaci¨®n del programa econ¨®mico de emergencia, que ya acumula dos semanas, es uno de los detonantes de la renovada crisis del peso mexicano. Faltos de orientaci¨®n y de confianza, los inversores extranjeros ya no reaccionan a las decisiones de las autoridades monetarias. Sin ir m¨¢s lejos, el Banco de M¨¦xico aplic¨® el mi¨¦rcoles una pol¨ªtica de manual: subir ocho puntos el precio del dinero (hasta el 58%) para sostener el peso. La respuesta del mercado les dej¨® desconcertados. La divisa cay¨® un 3% el mismo d¨ªa y un 7,5% ayer (cerr¨® a 7,55 pesos por d¨®lar).La huida de capitales extranjeros ha vuelto a poner al Gobierno contra las cuerdas. En un gesto que revela la gravedad de la situaci¨®n, el Banco de M¨¦xico y la Secretar¨ªa (Ministerio) de Hacienda desmintieron ayer, en un comunicado conjunto, que el pa¨ªs vaya a suspender pagos. Nunca, en las dos veces en las que ahora se reconoce oficialmente que M¨¦xico estuvo al borde de la quiebra (en diciembre, antes de la devaluaci¨®n, y a finales de enero, justo antes del anuncio de la ayuda estadounidense de 20.000 millones de d¨®lares), las autoridades se vieron obligadas a ir tan lejos.
"Suspender el pago de la deuda externa o introducir cualquier tipo de control de cambios", advierte Jorge Su¨¢rez, un analista de la casa de Bolsa Af¨ªn en Nueva York, "ser¨ªa suicida".
La situaci¨®n es ahora mucho peor que tras la devaluaci¨®n inicial del pasado 20 de diciembre, que lanz¨® a M¨¦xico cuesta abajo y al mismo tiempo puso en aprietos al d¨®lar en los mercados internacionales de divisas de todo el mundo, por la estrecha relaci¨®n de la econom¨ªa de EE U.U con M¨¦xico. A pesar del paquete internacional de ayuda de m¨¢s de 50.000 millones de d¨®lares reunido por la Casa Blanca, los inversores extranjeros han dejado de creer, por el momento, en la viabilidad del proyecto econ¨®mico mexicano.
La culpa la tienen, en parte, los elevados tipos de inter¨¦s que aplica el Banco de M¨¦xico en su intento de atraer capitales. El 58% del precio oficial del dinero se convierte en casi el 80% para particulares y empresas, lo que est¨¢ provocando una cadena de quiebras que no s¨®lo amenaza con destrozar el tejido empresarial mexicano, sino tambi¨¦n con provocar una crisis bancaria de consecuencias imprevisibles. Los bancos mexicanos, que apenas llevan cinco a?os en manos privadas, padecen una mala gesti¨®n y elevadas carteras de impagados. Pero bajar los tipos, tal como est¨¢n las cosas, ser¨ªa una invitaci¨®n al capital for¨¢neo a irse a otros mercados, lo que abocar¨ªa a M¨¦xico a la suspensi¨®n de pagos. -
La debilidad pol¨ªtica de Zedillo complica las cosas. El presidente lleva ya dos semanas intentando convencer a empresarios y sindicatos de que acepten el programa de emergencia econ¨®mica que tanto necesita el pa¨ªs. A los primeros les pide que acepten subidas de impuestos y a los segundos, brutales p¨¦rdidas de poder adquisitivo. Ambos se resisten. Se trata de una resistencia impensable en el M¨¦xico anterior a Ernesto Zedillo.
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