Reminiscencias del pasado

A pesar de sus mejoras en muchos aspectos, la Segunda Divisi¨®n sigue empa?ada por algunos atributos de su pasado m¨¢s oscuro.Calidad. En Primera se juega much¨ªsimo m¨¢s a gusto. Las distancias de marcaje y de posicionamiento son mayores y la calidad de los futbolistas permite un juego mucho m¨¢s fluido Los cracks son pocos en el f¨²tbol y todos est¨¢n en Primera. En Segunda los futbolistas son m¨¢s parejos. Por eso, la diferencia d¨¦ puntos es m¨ªnima.

Pensionistas. Contratar veteranos tiene mucho de marketing. Es lo f¨¢cil. Los presidentes prefieren a un futbolista experto, conocido por su etapa en Primera. Luego est¨¢n los intermediarios. Es m¨¢s f¨¢cil colocar un viejo conocido, que una joven promesa. Tener un buen representante es m¨¢s importante en Segunda que en Primera. Los fichajes est¨¢n muy mediatizados por los intermediarios.

Arbitrajes. El problema arbitral se multiplica en Segunda. El nivel es bajo y los colegiados respetan m¨¢s a los futbolistas con nombre. En Segunda hay pocos.

Intimidaci¨®n. Uno de los recursos de los veteranos es la intimidaci¨®n sobre los j¨®venes mediante la violencia. Como no existe tanta televisi¨®n, sus acciones no trascienden. As¨ª, los filiales tienen desventaja. Eso le pas¨® hace unos a?os al Atl¨¦tico Madrile?o. Ganaba 0-1 en Huelva, los veteranos del Recreativo ense?aron los dientes y los madrile?os empezaron a regatear hacia su campo. Perdieron 2-1 con un gol en propia meta.

Tierra. Mientras en Primera un mal campo siempre es noticia, en Segunda, lo raro es encontrarse un buen terreno. La hierba no siempre existe y algunos estadios son cajas de cerillas. En M¨¦rida se han derrumbado las vallas dos veces.

Poca salud. Los futbolistas de Segunda tambi¨¦n son enfermos de segunda. Los clubes ofrecen servicios m¨¦dicos, pero de dudosa calidad.