Un milagro a prueba de esc¨¢ner

Girolamo Grillo, obispo d¨¦ Civitavecchia (Italia), hombre con fama de reservado y de haber sido el primer esc¨¦ptico ante las noticias de que lloraba sangre una estatuilla de la Virgen comprada en Bosnia por uno de sus diocesanos, ha sorprendido a los italianos al declarar en la televisi¨®n estatal que "la Virgencita ha vuelto a llorar el pasado 15 de marzo mientras la ten¨ªa en mis propias mano! y en presenc¨ªa de cuatro o cinco testigos".Una prueba de esc¨¢ner acaba de demostrar que la estatuilla no esconde ning¨²n truco. "El Papa est¨¢ muy interesado por el tema", se dice en el Vaticano, mientras se espera la declaraci¨®n del milagro. Los sucesivos an¨¢lisis han revelado, por otra parte, que las l¨¢grimas que descienden de los ojos de la estatua, al parecer junto a una dosis generosa de aceite y siguiendo un camino bastante distinto del que la gravedad impone, son de sangre humana y probablemente de var¨®n.

Alg¨²n parapsic¨®logo ha pedido que se compruebe si el fluido es id¨¦ntico a la sangre de Fabio di Gregori, el propietario de la estatua, y ha avanzado la sospecha de que pueda haber un fen¨®meno de identificaci¨®n y trasvase. Varios magos dicen estar a punto de descubrir el enga?o que piensan que sustenta el caso. Editorialistas laicos muestran, en cambio, su desagrado, frente a un suceso que tambi¨¦n tiene su carga pol¨ªtica, ya que las v¨ªrgenes lacrimantes proliferaron a finales de los a?os cuarenta, cuando la derecha centraba su campa?a electoral en la amenaza del comunismo, y hoy hay al menos 11 v¨ªrgenes que se han puesto a llorar en Italia.

Pero el pronunciamiento del obispo y su decisi¨®n de informar en directo y sin reservas al p¨²blico representan un paso casi definitivo para convertir el puerto situado a unos, sesenta kil¨®metros de Roma en un centro de peregrinaci¨®n como F¨¢tima o Lourdes.

El obispo Grillo quiere llevar solemnemente en procesi¨®n la estatua, el pr¨®ximo Viernes Santo a las tres en punto de la tarde, a una capilla que est¨¢ siendo construida en una parroquia vecina a la casa de Di Gregori. El Ayuntamiento ha dado casi un mill¨®n de pesetas para la obra, y el alcalde, de izquierdas, ha expresado la esperanza de que esto mejore el nivel de vida de los ciudadanos.

Es muy probable que, tras los muros vaticanos, exista un ambiente favorable a este presunto milagro, ya que la guerra de Bosnia es una de las grandes obsesiones del actual Pont¨ªfice, Juan Pablo II. Y de Bosnia -concretamente de la zona croata y cat¨®lica de Herzegov¨ªria- trajo Fabio di Gregori su imagen, una reproducci¨®n de la de Medjugorje, donde se erige hoy un gran santuario conmemorativo de la aparici¨®n de la "Virgen en la pasada d¨¦cada.

Cuando sobre el rostro de la Virgen de Civitavecchia surgieron, hace algunas semanas, rastros de llanto rojo, comenzaron las peregrinaciones locales hasta el nicho del jard¨ªn de Di Gregori, donde ¨¦ste hab¨ªa instalado su imagen. Su p¨¢rroco, Pablo Mart¨ªn, que casualmente es espa?ol, le apoy¨® desde el primer momento. La jerarqu¨ªa decidi¨®, sin embargo, cortar las manifestaciones populares hasta que hubiera m¨¢s pruebas. El obispo tom¨® en dep¨®sito la imagen y la llev¨® a su propio domicilio.

"Mi hermana tuvo m¨¢s valor que yo, toc¨® y se manch¨® el dedo de sangre", ha dicho ahora Grillo, que confiesa que el nuevo llanto se produjo tras recibir ¨¦l un mensaje m¨ªstico cuyo contenido se calla, "porque es muy dram¨¢tico".