45 j¨®venes artistas muestran en Cuba su obra m¨¢s cr¨ªtica
La Habana Vieja se cae y si no te apartas un cascote te puede matar. La propaganda oficial te machaca cada ma?ana con consignas de acero. No tenemos jab¨®n, pero tenemos dignidad. Estados Unidos est¨¢ a 90 millas, y miles de personas se lanzaron el verano pasado al estrecho de la Florida para llegar a Miami. En la Cuba actual tambi¨¦n existe Chang¨® y hay estatuas de Lenin, travestidos y los primeros mendigos, y de toda esta materia prima se nutre una nueva generaci¨®n de artistas que hoy realizan una gran muestra de su obra en La Habana.Son 45 j¨®venes cubanos, casi todos menores de 30 a?os, que, bajo el auspicio de la Fundaci¨®n Ludwig, presentan nueve exposiciones individuales y tres colectivas en diferentes museos y centros de la capital. Su arte es producto de una realidad que todo lo absorbe y lo condiciona, y quiz¨¢ por ello la materia con que trabajan tambi¨¦n forma parte de la vida cotidiana; hierros oxidados, maderas ajadas de los muelles chatarra, ladrillos desnudo! para fabricar, agua, arena, adornos kitsch que los cubanos atesoran en sus casas como un espejismo cutre de una sociedad a la que algunos quieren llegar.
El primer claustro del antiguo convento de Santa Clara es un buen ejemplo del trabajo de estos artistas. All¨ª, en el centro de la sala, la instalaci¨®n La oveja negra, de Saidel Brito, grita al cerebro del p¨²blico, que al pasar ve desde la altura una gran oruga blanca rodeada de cabezas de borrego. A su lado, otra obra de L¨¢zaro Saavedra juega con un Sagrado Coraz¨®n de Jes¨²s que tiene alma cubana, habla en ruso y piensa en Estados Unidos, y Carlos Marx, con cierta veta humana, est¨¢ sobre un mapa antiguo donde ha desaparecido el campo socialista y Cuba es del tama?o de Am¨¦rica.
Sandra Ramos presenta la exposici¨®n Cruzar las aguas, que de nuevo llama la atenci¨®n sobre el fen¨®meno de la migraci¨®n con gran desgarro. Sandra crea una colecci¨®n de maletas de viaje, que son ata¨²des, aviones o mapas de Cuba con remos que encierran el drama de las balsas.
'Mundo so?ado'
Antonio Eligio Hern¨¢ndez, Tonel, quiere llamar la atenci¨®n sobre la megaloman¨ªa del discurso pol¨ªtico cubano en su obra Mundo so?ado, una instalaci¨®n en la que el mapa del mundo est¨¢ hecho de infinitas islas de Cuba.
El presidente de la Fundaci¨®n Ludwig, Helmo Hern¨¢ndez, cree que la obra de estos j¨®venes artistas cubanos no es disidente, aunque s¨ª cr¨ªtica con una propaganda oficial que es demasiado formal. "Lo verdaderamente disidente es que en este pa¨ªs nadie trabaja. Hern¨¢ndez piensa que la cr¨ªtica es algo bueno y necesario, y que "la ¨²nica forma de sobrevivir es no s¨®lo tolerar las diferencias, sino tambi¨¦n aprender y disfrutar de ellas". La Fundaci¨®n Ludwig tiene financiaci¨®n del coleccionista alem¨¢n Peter Ludwig y su objetivo es promocionar el arte cubano en la isla y en todo el mundo.
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