Las universidades no pueden planificar el curso pr¨®ximo mientras no se apruebe la nueva LRU

Siempre que se acerca la fecha de vencimiento de un contrato de trabajo, las sonrisas empiezan a languidecer, los nervios se levantan y los murmullos llenan los pasillos. A veces, aparece la marejadilla y, despu¨¦s, el temporal. Con esa sonrisa est¨¢n los profesores asociados de Universidad: su contrato vence el 30 de septiembre pr¨®ximo y todav¨ªa no se divisa la perspectiva de soluci¨®n. Los sindicatos est¨¢n pasando a la acci¨®n.De los 60.000 docentes que hay en todas las universidades del Estado espa?ol, la mitad son contratados y, de ellos, 15.000 de la categor¨ªa de asociados. Asociados a tiempo completo., asociados a. tiempo parcial... Son datos de los sindicatos de profesores. Los asociados a tiempo completo, representan la mayor¨ªa, ganan entre las 120.000 y 150.000 pesetas netas al mes y son ellos principalmente los que se encuentran en el movimiento que ya ha organizado asambleas, reuniones y proyectos de movilizaciones.

Todo empez¨® a ra¨ªz de la promulgaci¨®n de la LRU (Ley de Reforma Universitaria) en 1983 que convert¨ªa en funcionarios a todos los docentes y dejaba una peque?a ventana abierta a la contrataci¨®n creando la figura de asociados definida como un experto de reconocido prestigio que acudiera a la Universidad a tiempo parcial para dar seminarios, conferencias, etc¨¦tera. Poco a poco, las universidades, necesitadas de profesores, comenzaron a agrandar la apertura de esa ventana contratando asociados que poco ten¨ªan que ver con el

sujeto de reconocido prestigio y mucho con el profesor titular, funcionario de Universidad.El peque?o monstruo

El fen¨®meno fue creciendo hasta convertirse en un peque?o monstruo que oblig¨® a que, desde 1991, el Ministerio tomara cartas en el asunto. Primero, arbitrando medidas para que los asociados pudieran mantenerse en las universidades aunque hubieran cubierto el m¨¢ximo de tres a?os de contrataci¨®n permitido. Despu¨¦s, en 1994, llevando al Congreso de los Diputados un proyecto de reforma del t¨ªtulo 5o de la LRU sobre el profesorado que mantiene la figura del asociado s¨®lo para los expertos de reconocido prestigio y crea la de colaborador, una f¨®rmula de contrataci¨®n a tiempo completo.

La reforma inclu¨ªa, adem¨¢s, el retraso de la jubilaci¨®n obligatoria del profesorado universitario de los 65 a?os a los 70. Este punto pas¨® a tr¨¢mite de urgencia, mientras quedaba relegada a procedimiento ordinario la cuesti¨®n del profesorado contratado.

El ¨²ltimo real decreto, de 1993, permit¨ªa una prolongaci¨®n de la fecha de los contratos de asociados por dos a?os, es decir, hasta finales de septiembre de 1995. No hay nuevo decreto por el momento, y el proyecto de modificaci¨®n de la Ley est¨¢ en las Cortes desde hace un a?o, en fase de discusi¨®n de enmiendas en la Comisi¨®n de Educaci¨®n, para despu¨¦s pasar a aprobaci¨®n en el pleno del Congreso y, posteriormente, al Senado, seg¨²n informaci¨®n de la Secretar¨ªa de Estado de Universidades.

Los tiempos apremian y los asociados no s¨®lo est¨¢n nerviosos por cuestiones de fechas. Adem¨¢s, se quejan de que ganan menos que los titulares y de que sus aspiraciones a convertirse en titulares concursando como los titulares interinos de Univesidad se est¨¢n limitando cada vez m¨¢s. "Ahora es mucho m¨¢s dif¨ªcil el acceso a titular que hace unos anos porque las plantillas est¨¢n m¨¢s cargadas. Nos podemos eternizar como estamos, contando con que hemos pasado por una congelaci¨®n de salarios como los funcionarios y que, no tenemos derechos adquiridos porque nuestros contratos son de tipo administrativo", dice Esther S¨¢ez, asociada de Filosof¨ªa en la Universidad Aut¨®noma de Madrid, lugar donde ya se han celebrado diversas asambleas para preparar un plan de formulaci¨®n de protestas.

"Como Universidad, hemos ido renovando los contratos curso a curso por la propuesta de los departamentos, pero, ahora, nos encontramos en una situaci¨®n sin salida. No podemos, por ley, actuar hasta ver que dice la Modificaci¨®n de la LRU o si sale un nuevo decreto", explica Rafael Pujol, vicerrector de Ordenaci¨®n Acad¨¦mica de la Universidad Complutense de Madrid.

Sin alternativa

Por el momento, no hay alternativa para ellos y los sindicatos ya est¨¢n en acci¨®n: asambleas, documentos..., "nos preocupa el absentismo de la, Secretar¨ªa de Estado de Universidades. en cuanto a negociaciones", protesta Antonio Camarero, responsable. del ¨¢rea de Universidad en CC 00 que recuerda: "el PSOE aplaz¨® en marzo la reuni¨®n de la ponencia en el Congreso de los Diputados y esto nos coloca en una posici¨®n que hace inviable que el proyecto salga antes de septiembre" se?ala Antonio Camarero, responsable del ¨¢rea de Univesidad de CC OO. "Los han convertido en mano de obra barata", a?ade Teresa Mu?oz, de FETE-UGT, sindicato que propone una alternativa de Actualizaci¨®n global de la LRU que rompa con "la tradicional separaci¨®n de profesores entre las escuelas universitarias y las facultades y escuelas superiores", organizando un cuerpo de profesores de Universidad a trav¨¦s de pruebas de habilitaci¨®n.

Los sindicatos piden la estabilizaci¨®n del profesorado y una, negociaci¨®n con la Secretar¨ªa de Estado de Universidades que permita la adaptaci¨®n de las plantillas. "Si se anulan los contratos actuales", asegura Antonio Camarero, "hay que cerrar todas las universidades".

Un portavoz de la Secretar¨ªa de Estado de Universidades asegura que la reforma del t¨ªtulo 50 de la LRU se encuentra en discusi¨®n de enmiendas y "calculamos que todo salga antes del verano". ?Y si la ley no se aprueba para esas fechas? "S¨®lo contamos con que se apruebe" responde el portavoz ministerial. "Si surgen otros supuestos ya lo estudiaremos".

Sin embargo, Jer¨®nimo Nieto, portavoz de Educaci¨®n por el PSOE en el Congreso de los Diputados habla de que la tramitaci¨®n de la ley est¨¢ siendo bastante lenta y que "dif¨ªcilmente puede ser aprobada antes de octubre. Si esto ocurre", a?ade, "habr¨¢ que hacer algo. Habr¨¢ que prorrogar los contratos al menos por un a?o. ?sta ser¨ªa la salida m¨¢s razonable".