La fiebre del oro electr¨®nica

?Est¨¢ el paraiso prometido de Internet al alcance de una mayor¨ªa de espa?oles? La respuesta podr¨ªa ser que s¨ª, pero siempre y cuando no se considere muy costoso pagar como m¨ªnimo cinco mil pesetas al mes (incluidos los gastos telef¨®nicos) y se disponga de un ordenador personal, un m¨®dem y una l¨ªnea telef¨®nica- Por este precio se puede disfrutar al menos de tres horas de "navegaci¨®n" al mes -por los mares de la llamada "red de redes" que ofrece posibilidades ilimitadas, desde entrar, por ejemplo, en informaciones de la Casa Blanca, conectar con el comandante Marcos en Chiapas, obtener fotos de la boda de la infanta Elena, o perseguir, como lo est¨¢ haciendo el FBI, a un sospechoso del atentado de Oklahoma.

Hasta hace poco tiempo Internet parec¨ªa cosa de fan¨¢ticos. Ahora se sabe que adem¨¢s puede ser un buen negocio. El acceso desde Espa?a se lo reparten algunas empresas extranjeras como las que ofrecen el servicio Bix y Compu Serve, una red (RedIris) subvencionada por el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas y un n¨²mero creciente de compa?¨ªas que operan desde Espa?a, entre las que pueden citarse Goya Servicios Telem¨¢ticos, Servi com, IBM Encomix, Spritel, Skios o- Ran Internet, entre otras. Estas empresas suelen prestar dos tipos de servicios:, conectan a la red a los clientes y ponen en circulaci¨®n dentro de la red determinados bancos de datos (nombres, fotograf¨ªas, etc¨¦tera) a disposici¨®n de los usuarios nacionales e internacionales. Por todo ello, naturalmente, cobran unas cuotas que oscilan, seg¨²n el tipo de servicios, desde un m¨ªnimo de 700 pesetas hasta m¨¢ximos que pueden superar las 300.000 pesetas mensuales.

Al margen del coste econ¨®mico, tanto para las empresas interesadas como para los particulares, resulta todav¨ªa muy complicado entrar en la red y acceder a la informaci¨®n que interese. Por eso el negocio consiste en facilitar estas conexiones, seleccionar algunos de los miles de servicios e introducir informaci¨®n.

"Se trata de un terreno virgen y muy abierto en especial a la peque?a y mediana empresa, pero tambi¨¦n hay que pensar en el usuario residencial; a todos ellos hay que ayudarles a navega, dice Marcos Guill¨¦n, un ex estudiante de Ingenier¨ªa de Telecomunicaciones, de 23 a?os, quien, de la mano de un grupo de j¨®venes empresarios, ha creado Ran Internet, una de las ¨²ltimas empresas que se han incorporado a la guerra por el mercado de la "gran red". Esta empresa cobra 1.900 pesetas al mes por cuatro horas de conexi¨®n y 300 pesetas por cada hora adicional.

Las primeras conexiones a Internet las ofreci¨® la RedIris, que funcion¨® en la ¨®rbita de Fundesco y que actualmente pertenece al Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas. La mayor parte de los costos de acceso por este sistema los paga el plan nacional I+D que aporta 600 millones de peses al a?o para que la comunidad cient¨ªfica y universitaria pueda usar Internet sobre todo para correo electr¨®nico. Seg¨²n fuentes de la RedIris ya se han superado los 150.000 usuarios a trav¨¦s de unos 33.000 terminales de ordenador a los que tienen acceso profesores, investigadores y alumnos universitarios,

La guerra comercial comenz¨® Goya Servios Telem¨¢ticos, SA, presa que naci¨® en 85 como proyecto universitario, pero que desde 1992 opera como sociedad an¨®nima. adem¨¢s de una cuota e conexi¨®n inicial de 0.000 pesetas, por el acceso b¨¢sico a Internet (correo electr¨®nico y grupos de discusi¨®n), cobra al usuario 2.000 pesetas al mes, por una hora de conexi¨®n. Por hora adicional se recarga 1.800 pesetas.

?Est¨¢n dando las empresas dedicadas al acceso a Intemet un pelotazo econ¨®mico? Juan Antonio Esteban, director de Goya Servicios Telem¨¢ticos, dice que todos quieren aprovechar el gran momento publicitario sobre la red. Las escasas cifras que se, conocen no son, sin embargo, muy 1 significativas. No existen cifras globales comparativas. Goya Servicios Telem¨¢ticos, por ejemplo, logr¨® el a?o pasado cinco millones de pesetas de beneficios, seg¨²n explica su director, y factur¨® unas ventas de 74 millones.

Servicom, otra de las empresas m¨¢s conocidas en este joven sector, constituida hace dos a?os, todav¨ªa se encuentra en se de inversiones. Eudald Dom¨¦nech, consejero delegado de esta compa?¨ªa que ha destina o 1.250 millones de pesetas a versiones en 1995, dice que estamos ante un negocio pare ritin n1 d¨¦-1 f2y "Tn??n el muntinque monta ahora una oficina incorpora ya el n¨²mero del correo electr¨®nido". Servicom cobra 6.790 pesetas (alta m¨¢s kit de conexi¨®n) por abonarse al servicio, m¨¢s una cuota de 1.200 pesetas mensuales. Con el fin de no quedarse desconectada en la carrera por Internet, IBM Espa?a ha lanzado tambi¨¦n su propia ofensiva. Juan Bez¨®n, de IBM Global Network, empresa que comercializa este servicio, destaca que una de las ventajas de IBM es que ofrece acceso a Internet desde 17 puntos distribuidos por todas las comunidades aut¨®nomas, "lo que abarata las conexiones telef¨®nicas".