El jugador florero
El jugador florero es el currorromero del f¨²tbol, el que casi siempre est¨¢ de adorno, diluido en el partido, sin entrar en el esfuerzo colectivo de su equipo. Son esos deportistas generalmente fr¨ªos, ap¨¢ticos, pero capaces una tarde de crear el toque de bal¨®n genial, la r¨¢faga de calidad inmediata y mortal, que devuelve a las gradas el v¨¦rtigo del f¨²tbol bien hecho. Helenio Herrera dec¨ªa que se juega mejor con 10 que con 11, pero el jugador florero reivindica el -derecho a disputar los partidos con 12 -el equipo m¨¢s ¨¦l, que habitualmente no sirve para nada-.La filosof¨ªa, vital de esos jugadores se resuelve en lo que escribi¨® alguien: "Puesto que no somos profundos, seamos al menos confusos". Hay algunos ejemplos en el f¨²tbol espa?ol. El de mayor actualidad, Tren Valencia, el jugador colombiano del Atl¨¦tico de Madrid -extraordinario en su partido de Copa en Barcelona-. Hace a?os fue Salcedo, tambi¨¦n del Atl¨¦tico.
Pero la denominaci¨®n de jugador n¨²mero 12 siempre ser¨¢ para la afici¨®n. El M¨¦rida acaricia el ascenso directo a Primera Divisi¨®n y el club extreme?o, en medio de la euforia general, reparti¨® ayer 5.000 banderas blancas y negras con la leyenda: "Apoya a tu equipo; ahora o nunca; s¨¦ el jugador n¨²mero l2". El ?ibar, otro conjunto modesto en momentos felices, gan¨® ayer a domicilio al Getafe y se aproxima a la promoci¨®n para la m¨¢xima categor¨ªa. La Liga corre ya hacia el final. Algunos equipos viven unos tiempos de ataques de nervios y taquicardias, en las zonas alta y baja de la clasificaci¨®n, pero la mayor¨ªa tienen ya definida la posici¨®n y se trata de aguantar, "de cumplir", como dicen los entrenadores. El campeonato ha perdido motivaci¨®n para esos clubes y para sus aficiones. El f¨²tbol hay que vivirlo al borde del precipicio para que tenga sabor total.
El Marbella saca la cabeza del agua tras el triunfo frente al Barcelona. Los filiales del Bar?a han terminado sumidos en el mismo desconcierto que el primer equipo, debido a los cambios continuos de alineaci¨®n. Johan Cruyff ascendi¨® esta semana a cinco jugadores del filial. En el Bar?a B salieron varios ne¨®fitos y el equipo ha perdido la identidad.
La sorpresa de la jornada fue el triunfo del Athletic en Vallecas. El Rayo cede terreno en su intento de ser la alternativa sure?a al f¨²tbol capitalino en Primera.
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