Alt¨ªsima fiebre creativa

Kenny Garrett QuartetLos inolvidables Woody Shaw y Art Blakey fueron, por este orden, los primeros en advertir las nada usuales hechuras del talento de Kenny Garrett (Detroit, 1960). Poco despu¨¦s, Miles Davis corroborar¨ªa tan certeras intuiciones y le incluir¨ªa en la que a la postre resultar¨ªa ser su ¨²ltima banda. Los titubeantes pasos iniciales de Garrett como responsable de un grupo propio acusaban la p¨¦rdida macabramente simult¨¢nea de sus mentores, pero el saxofonista ha sabido rehacerse y ahora se expresa con el gesto decidido de quien, ha personalizado las ense?anzas de sus maestros, y los a?ora, aunque ya no necesita su protecci¨®n.Lo escuchado durante la primera hora del pase de noche de su presentaci¨®n madrile?a merece figurar en la selecta n¨®mina de lo memorable. Torrencial y enf¨¢tico, intenso hasta l¨ªmites casi sobrenaturales, Garrett liber¨® todas las espitas de su inmensa reserva de ideas y sopl¨® como Pose¨ªdo por una alt¨ªsima fiebre creativa.

Fuera cual fuese la densidad, la textura o el volumen, la emoci¨®n, en su sentido m¨¢s visceral y primitivo, lo, impregnaba todo. Tras la apoteosis anticipada, la primera balada son¨® como el mism¨ªsimo silencio. El depurad¨ªsimo sonido de su saxo soprano se relaj¨® despu¨¦s sobre el difuso encanto del hip bop.