Amor

Si este hombre no existiera habr¨ªa que encargarlo a alg¨²n laboratorio de biogen¨¦tica. Anguita me sorprende cada medio a?o y es muchoorprender a un gal¨¢pago como el que suscribe, contradictorio militante de la IS (Incapacidad de Sorpresa).

Que Anguita haya proclamado que rechaza el voto a Izquierda Unida dictado por la venganza o el despecho contra el PSOE, me hace pensar en una pureza estrat¨¦gica paleocristiana, caracter¨ªstica de tiempos de gran libertad de imaginarios, entre la obsolescencia de los demasiado usados y la b¨²squeda de los nuevos. A prop¨®sito de los imaginarios recomiendo la lectura de un Cuaderno de Fe y Secularidad, firmado por Juan Luis Pintos y titulado precisamente Los imaginarios sociales. Si no fuera por esta gente de Fe y Secularidad, yo, francamente, no sabr¨ªa qu¨¦ pensar.

Y me ocurre lo mismo con Anguita, que ha dejado a la fauna pol¨ªtica con las fauces abiertas, sin poder cerrarlas por no pegar bocado desde la venganza o el despecho, y mal asunto es el canibalismo sin rencor. Me parece que Anguita se arriesga a perder muchos votos y a estas horas no salen de la carcajada, es que se desternillan, en las c¨²pulas socialistas, donde jam¨¢s creyeron en el bolero y lo que Anguita ha dicho es de bolero: "?mame por m¨ª mismo, / no tolero ¨¦l,despecho / ni tampoco el rencor, / lo que quiero es amor. / No te quiero desnuda / del abrazo del odio, / yo te quiero vestida / con la piel del temblor. / Del temblor de mis ojos / que te miran y miran / como si fueras patria / de un necesario amor".

Comprendo que el bolero no est¨¢ demasiado elaborado. Se me acaba de ocurrir, pero se lo dedico,a los cazadores de imaginarios electorales y lo he hecho como Avecrem sol¨ªa decir hacia las sopas preparadascon amor.