De Ensidesa al calcet¨ªn del pastor
PP y PSOE se enzarzan en una campa?a gris que abarca desde la empresa p¨²blica hasta el sector rural
Dicen las encuestas que, por primera vez en la historia, la derecha puede ganar en Asturias. De ello est¨¢ totalmente seguro Sergio Marqu¨¦s, candidato del Partido Popular (PP) a la presidencia del Principado, y algo menos convencido Antonio Trev¨ªn, presidente en funciones y candidato del PSOE, "porque tambi¨¦n dicen que Asturias se siente de izquierdas". Es precisamente en esa contraposici¨®n entre derecha e izquierda -"entre pol¨ªticas liberales y de solidaridad"- en lo que Trev¨ªn est¨¢ basando su campa?a, mientras Marqu¨¦s afirma que son conceptos superados. "Los ciudadanos asturianos", dice, "ahora prefieren hablar de eficacia e ineficacia", cualidad esta ¨²ltima que atribuye "con sobresaliente" a la legislatura socialista en la regi¨®n.Trev¨ªn y Marqu¨¦s tienen poco que ver. Pero hay un denominador com¨²n que les une. Ninguno de ellos se ha medido antes en una contienda electoral al cargo. El presidente en funciones accedi¨® a ¨¦l hace dos a?os cuando dimiti¨® Juan Luis Rodr¨ªguez-Vigil a ra¨ªz de una millonaria inversi¨®n anunciada para el Principado y que no exist¨ªa en realidad: el petromocho. Trev¨ªn, cercano a los renovadores, lleg¨® a la presidencia con el apoyo de los guerristas que, sin embargo, se lo retiraron al votar en su contra como candidato en las elecciones. "Navega entre dos aguas", dicen en Asturias, donde en alg¨²n c¨ªrculo le llaman Trep¨ªn por su capacidad de sobrevivir a las marejadas de la Federaci¨®n Socialista de Asturias, la potente FSA. Otros medios vinculan esa capacidad a la facilidad que tiene para la negociaci¨®n y la interlocuci¨®n. "La prueba", dicen "es que en Asturias se han acabado los conflictos".
Los vericuetos que le llevaron hasta la presidencia, primero, y luego hasta la candidatura, han debido dejar huella en este hombre de car¨¢cter campechano que dice que lo que m¨¢s le ha dolido en su trayectoria es "el haber confiado en alguna gente". "Descubrir un enga?o", dice, "es terriblemente doloroso. Y eso se da infinitamente m¨¢s veces en el plano pol¨ªtico que en el personal". Con todo, la pol¨ªtica tambi¨¦n le ha tra¨ªdo buenas relaciones. Entre paisanos y veraneantes en Asturias, Trev¨ªn cuenta con un buen ramillete de amigos ministros, o que lo han sido, (Virgilio Zapatero, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, ?ngeles Amador, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba o Gustavo Su¨¢rez Pertierra). Pero en el partido est¨¢ descolocado.
Su rival para aceder a la presidenta, Sergio Marqu¨¦s, cuenta en este sentido con el apoyo del baluarte popular en el Principado, Francisco ?lvarez-Cascos, con quien se lleva muy bien. Marqu¨¦s achaca a Trev¨ªn no haber hecho "absolutamente nada nuevo durante su presidencia". "Su primer defecto", dice, "es que no est¨¢ a la altura de las circunstancias. Su administraci¨®n ha carecido de ideas. "Su segundo defecto", contin¨²a, "es que no es el presidente de Asturias, sino el c¨®nsul del PSOE en Madrid y el vicec¨®nsul del SOMA-UGT en Asturias".
Para Trev¨ªn, Marqu¨¦s cojea del mismo pie que su partido: "la intransigencia y la falta de tolerancia, que en el PP se subrayan como virtudes, lo que me parece muy peligroso". A?ade a eso "la falta de experiencia" del candidato popular. Sergio Marqu¨¦s, consciente de que se ten¨ªa que dar a conocer, lleva desde noviembre recorriendo el Principado, algo en lo que Trev¨ªn le lleva ventaja porque comenz¨® a viajar por los concejos al ser nombrado presidente.
Trev¨ªn se desenvuelve mejor con los paisanos que Marqu¨¦s pero ¨¦ste, sin embargo, le da m¨¢s aire a los m¨ªtines. En ellos, tanto en los del PSOE, como en los del PP, los candidatos declaran un objetivo principal: la lucha contra el paro fomentando la creaci¨®n de pe quenas y medianas empresas. ?C¨®mo?. Mar qu¨¦s apunta una receta :"recuperando la credilidad de las administraciones. Consiguiendo que no pongan obst¨¢culos al crecimiento". "En Gij¨®n", dice, "explotar un simple bosque de eucalipto puede requerir hasta seis tramitaciones". Trev¨ªn alude al acuerdo alcanzado con los sindicatos y la patronal para ¨ªncentivar las peque?as y medianas empresas durante el periodo 1994-1996 insiste, hasta la machaconer¨ªa, en incentivar la activiad privada relacionada con el mediambiente y con s explotaciones agrarias. Trev¨ªn quiere hacer m¨¢s popular el lema Asturias, para¨ªso natural y exhibe orgulloso la declaraci¨®n le los Picos de Europa como parque nacional. Algo que irrita profundamente en las filas el Partido Popular. Los pastores", ice Marqu¨¦s, "ni s?quiera van a poder lavar sus calcetines en los arroyos".
A ninguno de los candidatos le gusta la imagen de la Asturias subvencionada, pero ninguno puede escapar a ese debate, aunque lo llevan de forma distinta. El candidato del PSOE, parafraseando el lema de su partido, dice que "Precisamente ahora que la empresa p¨²blica en Asturias est¨¢ estabilizada", es el turno de fomentar otras iniciativas privadas. Marqu¨¦s en lugar de estabilidad, habla de decadencia industrial y acu?a lema propio: "Programa, frente a panorama".
Y todo ello en medio de una campana que refleja el tono que el cielo tiene muchas veces en Asturias: gris. Una campa?a en la que, a falta de seguro vencedor para gobernar, subyace una inc¨®gnita: ?A qui¨¦n apoyar¨¢ Izquierda Unida"?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.