"EI s¨ªndrome del ensayista es que no te lee nadie"
?l la define como un ensayo de ficci¨®n. Prisa por tardar, reci¨¦n editada por Taurus, es la primera novela del profesor de Ciencias Pol¨ªticas y Sociologia Enrique Gil Calvo, en la que investiga el crimen de la corrupci¨®n observado desde el punto de vista sociol¨®gico. Su libro anterior, Futuro incierto, trataba del mismo tema, pero desde el punto de vista pol¨ªtico, "y no le hizo caso nadie. Por eso, en vez de un ensayo, que a la gente le resbala, he escrito una novela con el efecto especial de la intriga narrativa". Gil Calvo analiza en esta obra, en la que aparecen desde Mario Conde hasta el rey Juan Carlos, a la generaci¨®n de los sesenta, a la que ¨¦l mismo pertenece, que alcanz¨® la cima a mediados de los ochenta y que hoy ve declinar su ciclo entre acusaciones de corrupci¨®n.El pasado 1 de agosto, como es habitual cuando inicia las vacaciones, Gil Calvo empez¨® a escribir el primer cap¨ªtulo de Prisa por tardar. "El s¨ªndrome del ensayista es que no te lee nadie. Mi intenci¨®n al pasarme a la novela fue por vocaci¨®n personal, quer¨ªa dar testimonio de que la sociolog¨ªa y la literatura son dos caras de la misma moneda", asegura el autor.
En los siete meses que le llev¨® acabarla, Gil Calvo (Huesca, 1946) confiesa que ha disfrutado "como un enano". "Aprend¨ª muchas cosas sobre la marcha. Es una especie de autoconfesi¨®n moral m¨ªa que tambi¨¦n puede servir para mi propia generaci¨®n. As¨ª podemos evaluar el camino recorrido y preguntarnos por qu¨¦ hemos hecho lo que hemos hecho y en qu¨¦ medida podemos poner remedio".
El relato comienza cuando los protagonistas se plantean la realizaci¨®n de un programa televisivo centrado en la americanizaci¨®n de Espa?a, al hilo de los fastos del 92. El descubrimiento del esc¨¢ndalo de Filesa da un giro radical a la narraci¨®n, que pasar¨¢ a centrarse en las causas de la corrupci¨®n. Los argumentos contrapuestos que en el libro se discuten son protagonizados por Profesores. La universidad, la familia, la prensa y la monarqu¨ªa, entr¨® otras instituciones, son revisadas en Prisa por tardar.
"Yo no me he inventado nada. Todo est¨¢ en las hemerotecas. He utilizado peque?as an¨¦cdotas narrativas, probablemente arquet¨ªpicas, para interesar al lector y que siguiera leyendo", dice Gil Calvo, al tiempo que reconoce que la obra est¨¢ llena de gui?os. En uno de los cap¨ªtulos, por ejemplo, se juntan polancos (periodistas de EL PAIS) y mundos (periodistas de El Mundo) para buscar soluciones a la corrupci¨®n. "La mayor parte de las bromas son privadas, es lo que en el cine se llama un homenaje. El 90% de los homenajes que se hacen en el libro son para enterados, el p¨²blico en general se quedar¨¢ con el fondo de la novela, que es c¨®mo nos hemos hecho adultos y c¨®mo podemos cambiar en un sentido cultural amplio que incluye el compromiso pol¨ªtico".
Uno de los cap¨ªtulos m¨¢s pol¨¦micos puede ser el referido a la monarqu¨ªa. La Corona en la arena es una buena muestra de la opini¨®n de su autor: "El Jefe del Estado no debe ser intocable. La Constituci¨®n dice que es impune, y yo soy contrario a cualquier tipo de impunidad. Me opongo, por tanto, a que en las redacciones de los diarios haya material delicado sobre la Corona que no se publica".
Gil Calvo, que estuvo a punto de parar la difusi¨®n de la novela cuando estaba siendo impresa y aplazar su publicaci¨®n hasta despu¨¦s de las elecciones municipales para no interferir en el proceso, cree que la monarqu¨ªa es un tema tab¨². "Puedes hablar de ello en los peri¨®dicos, escribirlo, pero no en la tele. La televisi¨®n es piedra de esc¨¢ndalo. La cosa esc¨¦nica, en un pa¨ªs calderoniano como el nuestro, es como decir algo en p¨²blico; la escritura es una cosa privada, y la oralidad es lo p¨²blico".
Gil Calvo confiesa que ¨¦l es el narrador de Prisa por tardar, pero que tambi¨¦n se identifica con los tres personajes claves de la novela -un izquierdista, un renovador y un guerrista- "Cada uno responde a un arquetipo, van vestidos con elementos caleidosc¨®picos, y el narrador hace de testigo".
El profesor aclara que Prisa por tardar tiene cuatro claves b¨¢sicas: "La primera, que no se trata de un juicio al PSOE, las causas sociol¨®gicas son generales a Europa y Estados Unidos; la segunda es la precocidad de una generaci¨®n que empez¨® muy pronto pol¨ªticamente y que, por culpa de ese compromiso precoz, confundi¨® sus intereses personales con los pol¨ªticos; el tercer elemento ser¨ªa el desclasamiento provocado por el veloc¨ªsimo desarrollo del capitalismo de los a?os sesenta, y, el cuarto, que se trata de una generaci¨®n educada en el desprecio a la legalidad, sobre todo aqu¨ª que crecimos con Franco".
A juicio del autor, lo m¨¢s positivo de este ensayo novelado es que tiene un final feliz. "El futuro est¨¢ abierto y se puede recuperar el tiempo perdido. Somos la primera generaci¨®n de la historia que puede rehacer lo andado". Gil Calvo, que dedica estos d¨ªas a la correcci¨®n de ex¨¢menes, ya tiene t¨ªtulo para su pr¨®xima obra. Medio miradas versar¨¢ sobre las relaciones entre varones y mujeres. "Ya tengo los argumentos sociol¨®gicos; ahora queda darle un formato narrativo".
"Prisa por tardar" es una especie de autoconfesi¨®n moral y no un juici¨® al PSOE"
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