Asuntos Sociales y asociaciones de ayuda a la infancia discrepan en cifras sobre malos tratos a ni?os
La violencia y el consumo de drogas amenazan a los menores espa?oles
Las cifras del Ministerio de Asuntos Sociales y las de asociaciones de ayuda a la infancia no casan en el tema de los malos tratos a ni?os. El Informe sobre la Situaci¨®n de la Familia publicado por Asuntos Sociales da resultados de un estudio de 1988 el que cuatro de cada mil ni?os sufren maltrato familiar. La fundaci¨®n de ayuda a la infancia Filium estima que en Espa?a m¨¢s de un mill¨®n y medio de ni?os tienen padres violentos. El desajuste de datos puede deberse a que muchos casos no se denuncian. Malos tratos y drogas son las grandes amenazas para los menores. Ma?ana se celebra el D¨ªa del Ni?o.
Los padres que maltratan a sus hijos suelen tener en com¨²n una serie de caracter¨ªsticas ps¨ªquicas y sociol¨®gicas. Es frecuente que tengan conflictos de pareja, depresi¨®n o adicci¨®n al alcohol, falta de experiencia sobre la educaci¨®n del ni?o, adem¨¢s de haber padecido ellos mismos una infancia infeliz y de una situaci¨®n econ¨®mica y cultural precaria.El caso de la madre que tir¨® a sus cuatro hijos peque?os por un acantilado es ilustrativo: una mujer depresiva, con problemas econ¨®micos y que acababa de tener una pelea con su marido.
Tambi¨¦n hay ni?os que son m¨¢s proclives al maltrato que otros. Los hijos no deseados, los beb¨¦s con problemas digestivos -que lloran sin parar- los ap¨¢t¨ªcos y los hiperactivos suelen ser los m¨¢s castigados.
En muchos casos. el maltrato no es f¨ªsico, sino ps¨ªquico, lo que a¨²n resulta m¨¢s dif¨ªcil de demostrar en una denuncia. Es el caso, por ejemplo, de Luis M' Alonso de Gulias, que lleva tres a?os tratando de que los tribunales reconozcan. que existe un delito de maltrato ps¨ªquico hacia sus hijas, que . se ven obligadas por su madre a asistir a un colegio y a los actos religiosos de una presunta secta evang¨¦lica, a pesar de que han sido bautizadas en la religi¨®n cat¨®lica.
Respecto a las drogas, el ¨²ltimo informe de la Direcci¨®n General de Protecci¨®n Jur¨ªdica de Menores> basado en datos del tercer trimestre de 1994, revela que entre julio y septiembre del a?o pasado fueron detenidos en total 2.633 menores por consumo de alcohol o drogas. A veces con los propios padres quienes suministran estupefacientes a sus hijos. El a?o pasado, la polic¨ªa detuvo en Madrid a una, mujer que daba cerveza a su beb¨¦ para que dejara de llorar.
Seg¨²n Asuntos Sociales, la mayor¨ªa de los menores detenidos estaban bebiendo alcohol, pero en julio hubo 21 detenciones de menores de 14 a?os por consumo de hero¨ªna, 21 por consumo de c¨¢nnabis y 10 por otros estupefacientes. A estas edades, es mucho m¨¢s frecuente que tomen drogas los chicos que las chicas. As¨ª, de los 2.633 detenidos en los que se centra el estudio, 2.460 eran varones y s¨®lo 173 eran ni?as.
En cuanto a las caracter¨ªsticas de los consumidores precoces de alcohol. y drogas, un estudio del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas) sobre los escolares espa?oles publicado en 1994, afirma que el alcohol y otras drogas suelen ir unido! en la infancia y adolescencia. Los hijos. de padres con un nivel social y profesional bajo tienden m¨¢s al consumo precoz de estupefacientes que los que gozan de una posici¨®n desahogada.
El tipo de ayuda que se presta a- los ni?os con estos problemas ha cambiado mucho en muy pocos a?os. La tendencia anterior era internar largo tiempo a los menores en centros especiales. La actual, favorecida por la Ley de Acogimiento y Adopci¨®n de 1987, es mantener a los menores el m¨ªnimo indispensable alejados de un n¨²cleo familiar. Los Centros de Acogida de Menores se consideran una, soluci¨®n provisional. La soluci¨®n despu¨¦s es devolverlos a la familia, si ¨¦sta se rehabilita, o tratar de facilitar su adopci¨®n.
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