Term¨®metros y anticicl¨®n de las Azores
Los term¨®metros instalado en las calles indican a menudo temperaturas muy superiores a las que oficialmente dan los partes meteorol¨®gicos, y mientras se lee 44 grados en un panel la radio dice que la m¨¢xima es de 39 grados. No es que el term¨®metro a la vista est¨¦ estropeado. El desfase se debe a que un sensor instalado a pleno sol, cerca del asfalto, en un recipiente met¨¢lico o sin ventilaci¨®n, arroja unas medidas significativamente superiores a las registradas por las casetas meteorol¨®gicas.Estas instalaciones, seg¨²n recomienda la Organizaci¨®n Mundial de Meteorolog¨ªa (OMM), tienen que ser de madera, con rendijas de ventilaci¨®n. Dentro est¨¢n instalados, entre otros aparatos, un term¨®metro y un higr¨®metro para medir la humedad. Los equipos tiene que estar a un metro y medio del suelo, y ¨¦ste debe ser de un material que refleje poco la radiaci¨®n solar, como c¨¦sped (desde luego, no puede ser asfalto).
En Madrid, por ejemplo, s¨®lo hay cuatro casetas de este tipo (Ciudad Universitaria, parque del Retiro, Cuatro Vientos y Barajas). Las temperaturas registradas en estas condiciones son las que se proporcionan diariamente a los ciudadanos en la informaci¨®n meteorol¨®gica a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n. Esta estandarizaci¨®n de las condiciones de medida de la temperatura permite hacer comparaciones entre registros tanto hist¨®ricos como entre diferentes lugares en el mismo d¨ªa.
Otra cosa es el llamado ¨ªndice de calor, una medida de la sensaci¨®n de calor que combina la temperatura con la humedad del aire y con la velocidad del viento. Con unas tablas y ecuaciones se calculan los valores, tambi¨¦n estandarizados por la OMM.
A igual temperatura pero con mayor humedad y menor velocidad del viento, la sensaci¨®n de calor es superior, mientras que si corre el aire y hay un ambiente seco, el calor es m¨¢s soportable. Con 38 grados cent¨ªgrados de term¨®metro, el ¨ªndice de calor supera ampliamente los 40 grados si la humedad es alta y la velocidad del viento es pr¨¢cticamete nula.
La actual situaci¨®n de altas temperaturas en la pen¨ªnsula Ib¨¦rica se debe al desplazamiento hacia el este del anticicl¨®n de las Azores. En un anticicl¨®n, el r¨¦gimen de vientos circula en el sentido horario (al contrario que en las borrascas). Cuando el anticicl¨®n est¨¢ centrado en las Azores trae a Espa?a vientos atl¨¢nticos de componente norte, mientras que si est¨¢ situado justo encima de la Pen¨ªnsula, por Extremadura y Andaluc¨ªa occidental entra aire procedente de ?frica. La ola de calor remite cuando el anticicl¨®n se desplaza de nuevo hacia el oeste.
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