"Sevilla hasta la muerte..."
Miles de aficionados sevillistas se concentraron en el club para pedir una explicaci¨®n
Indignaci¨®n, llanto, c¨®lera y conatos de violencia. As¨ª reaccion¨® la afici¨®n sevillista ante la noticia del descenso burocr¨¢tico de su equipo. Los hinchas propusieron concentraciones ante el ayuntamiento. Los m¨¢s ultras dieron consignas para enardecer a la masa e ir a causar destrozos en los negocios del hombre m¨¢s buscado y vituperado ayer en Sevilla: el presidente del club Luis Cuervas. La polic¨ªa, que control¨® la situaci¨®n, desplaz¨® efectivos a los establecimientos del directivo sevillista. Cerca de un millar de aficionados se concentraron en los soportales del S¨¢nchez Pizju¨¢n para pedir, enojados una explicaci¨®n de lo ocurrido en Madrid a los responsables del club. Pasadas las once de la noche, all¨ª segu¨ªan. Nadie en el Sevilla fue capaz de dar la cara.En un primer momento, los aficionados no daban veracidad a la noticia de que su equipo, que este a?o jugar¨¢ en Europa la Copa de la UEFA, tendr¨ªa que hacerlo en Espa?a en una categor¨ªa no profesional. Hacia las cinco de la tarde se formaron colas en las taquillas del estadio, que en un principio se nutrieron de socios dispuestos a renovar sus carn¨¦s -entre 130.000 y 27.000 pesetas- ajenos o exc¨¦pticos ante lo que se dec¨ªa por la radio. M¨¢s tarde, la confirmaci¨®n de la noticia sobre la desclasificaci¨®n del club hizo cambiar el ¨¢nimo de quienes se dispon¨ªan a pagar por algo que ya parec¨ªa m¨¢s que incierto: ver a su equipo jugar en Primera.
A las ocho de la tarde los aficionados ya se hab¨ªan organizado. Bajo el himno de la Pe?a Biri Biri, los aficionados comenzaron a corear consignas e insultos contra Luis Cuervas, a quien responsabilizaban de todo lo ocurrido, Y quien hab¨ªa anunciado, desde su oficina profesional, que comparecer¨ªa a las nueve en el estadio ante los medios para dar una versi¨®n oficial. Los ¨¢nimos se encresparon a¨²n m¨¢s cuando se acercaba la hora de la anunciada conferencia de prensa y esta no se produc¨ªa.Aficionados y periodistas supieron a la vez, y por boca de un portavoz muy especial, que Luis Cuervas no aparecer¨ªa por el club. El agente al mando de los antidisturbios as¨ª lo comunic¨® por la megafon¨ªa de su veh¨ªculo policial: "Me han informado que la persona que esperan no va a venir. Los directivos est¨¢n haciendo gestiones en las oficinas y en Madrid y hasta ma?ana no van a decir nada". La afici¨®n contest¨® a coro: "Pues no nos mover¨¢n"; "Sevilla hasta la muerte..." "el Sevilla es nuestra droga...".
A partir de ah¨ª hubo de todo. Grupos de 20 o 30 aficionados se dirigieron hacia los comercios de juguetes de Luis Cuervas, que para entonces ya estaban custodiados por la polic¨ªa. Otros siguieron cantanto y coreando insultos hacia el hombre m¨¢s odiado ayer en Sevilla: "Cuervas vete ya", le cantaban a coro. Entre la masa de aficionados los rumores corr¨ªan como la p¨®lvora. "?Es verdad que han dado un plazo para arreglar esto con un nuevo aval hasta las doce de la noche?". "Dicen que Suker y Unzu¨¦ se van al Barcelona. ?Eso es posible?".
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