La canci¨®n del verano
Oropesa, en Castell¨®n, puede convertirse a partir de ahora en un centro internacional de veraneo de fuste capaz de opacar, si no de hundir, otros mundialmente reconocidos lugares de recreo, tales como Palma de Mallorca, Marbella, Capri, la costa Azul, y un corto etc¨¦tera. Oropesa, como los agudos lectores deben ya saber, es el privilegiado refugio do mora, por estas fechas, el presidente del Partido Popular. Como se trata, posiblemente, del ¨²ltimo agosto que los Aznar pasan en Oropesa como primera familia de la oposici¨®n, siendo que, de ganar en marzo, el a?o que viene lo har¨ªan ya como familia presidencial del Gobierno, resulta significativo que hayan convocado a los periodistas gr¨¢ficos para el pr¨®ximo jueves por la tarde en un hotel de la urbanizaci¨®n La Playeta. Es decir, que quieren hacerse la foto p¨®stuma de este estado transitorio, el recuerdo para toda una vida, el tal como ¨¦ramos antes de qu¨¦ ser¨¢, ser¨¢.Hablando de canciones, si yo fuera el alcalde de Oropesa, me apresurar¨ªa a luchar por todos los medios -tipo cruzada Bono por las ag¨¹itas del Tajo- para arrebatarle a Benidorm su famoso festival, entre otras cosas porque, gracias a ello, dadas las simpat¨ªas de Julio Iglesias por don Jos¨¦ Mar¨ªa, f¨¢cilmente lo tendr¨ªa todos los a?os cantando gratis en la clausura. En fin: si carecen de sentido comercial, all¨¢ ellos.
Pensando en estas cosichuelas iba ayer yo por un Madrid s¨®lo apto para m¨¢rtires cristianos de los que se dejaban, cocer por la pagan¨ªa, en donde, adem¨¢s de todo lo dem¨¢s, los taxistas se han puesto el bermudas antilujuria obtenido por su se?ora cortando unos pantalones de tergal de hace diez a?os, a juego con los calcetines hasta media patorra y las sandalias del doctor Mengele. Probo y decente atuendo que contrasta con la ¨²ltima moda del verano para cachorros de la derecha: el polo Lacoste azul oscuro o negro, con el cuello finamente ribeteado por la bandera espa?ola.
Iba yo, dec¨ªa, pensando, y apenas distray¨¦ndome con la visi¨®n de los trabajadores de obras p¨²blicas que, torso desnudo, el alcalde ha tenido la bondad de poner a asfaltar calles. Y no se me ocurri¨® otra cosa que entrar en la sede del PSOE, con el doble objetivo de encontrar refrigeraci¨®n y disfrutar de un recital del famoso rapsoda Cipri¨¤ Ciscar, al final de la reuni¨®n de la ejecutiva ejecutora.
C¨®mo que aire acondicionado, mis cuates. Aquello es un microclima; de hecho, nada m¨¢s entrar not¨¦ que la realidad no me segu¨ªa, lo cual es raro porque no suele abandonarme. Y en cuanto al recital: un tango, aunque seg¨²n como se mire tambi¨¦n podr¨ªamos llamarlo una milonga. Si mis notas no mienten, porque reconozco que, en alg¨²n momento, me traspuse, la letra b¨¢sica de la canci¨®n del verano dice as¨ª: "Unidad y unanimidad en torno al liderazgo del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Felipe Gonz¨¢lez. En un clima de serenidad y de trabajo se ha valorado el mantenimiento de esa serenidad desde la clara convicci¨®n...". Sigue la letra por una eternidad, s¨®lo alterada por la modulaci¨®n del estribillo: serenidad, unidad, unanimidad, como palabras b¨¢sicas, con leves quiebros abolerados tipo: "No hemos entrado en valoraciones" o "No quiero entrar en hip¨®tesis".
Fue entonces cuando envidi¨¦ desde lo m¨¢s profundo a Divine Brown, que tuvo la fortuna de hallarse en el momento justo en el lugar preciso, y trabaj¨¢ndole el ego inferior a la persona adecuada, y que gracias a todo ello ha podido abandonar la prostituci¨®n y ahora mismo se encuentra en Brasil, posando para una importante marca de ropa interior y con una vida decente por delante. Por envidiar, hasta envidi¨¦ a Elena Ochoa, que ha enloquecido al arquitecto Norman Foster, que le manda su avi¨®n cada dos por tres para poder verla, porque sin ella no es capaz de dibujar un plano.
Cualquier cosa antes que seguir en esta profesi¨®n.
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