La pol¨ªtica agr¨ªcola de la UE acelera la desertificaci¨®n espa?ola, seg¨²n los expertos

La pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n (PAC) de la Uni¨®n Europea, que incentiva a los agricultores espa?oles para que abandonen los cultivos de productos excedentarios, agrava el proceso de desertificaci¨®n en Espa?a, seg¨²n los expertos. La modificaci¨®n de esta pol¨ªtica es una de las propuestas esenciales del futuro Plan Nacional contra la Desertificaci¨®n, cuyo borrador ha ultimado la Secretar¨ªa General del Medio Ambiente. Los especialistas reunidos ayer en Santander expusieron este problema, las l¨ªneas general de plan nacional y la impunidad de los que provocan los incendios.

Jos¨¦ Luis Rubio, director del Centro de Investigaciones sobre Desertizaci¨®n del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas y asesor para Espa?a del Convenio de la ONU contra la desertificaci¨®n (ambos t¨¦rminos son equivalentes, seg¨²n Rubio, aunque este segundo, m¨¢s largo, se impone a nivel internacional), mantiene que la pol¨ªtica agr¨ªcola europea debe modificarse para adaptarse a las necesidades espa?olas.Muchas tierras de secano contienen cultivos marginales, situados en laderas o suelos no ¨®ptimos como consecuencia de la expansi¨®n agr¨ªcola de los a?os 40 y 50 y su abandono causa graves problemas de degradaci¨®n y erosi¨®n por lluvias torrenciales, que acaban por desertificar la zona, seg¨²n Rubio.Adem¨¢s de plantear la modificaci¨®n de dicha pol¨ªtica, el Plan Nacional contra la Desertificaci¨®n contemplar¨¢ medidas de prevenci¨®n y de sensibilizaci¨®n ciudadana. Rubio asegura que las actitudes personales contribuyen decisivamente a la degradaci¨®n ambiental: el consumismo, la producci¨®n excesiva de desechos y residuos, el creciente consumo personal de energ¨ªa y recursos o la predilecci¨®n por estilos de jard¨ªner¨ªa inadecuados a las zonas secas.

Rubio dirige esta semana el seminario Desertificaci¨®n y cambio clim¨¢tico. El ¨¢rea mediterr¨¢nea en la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo (UIMP) de Santander. Varios de los ponentes que han intervenido en el curso han apuntado a los incendios forestales como un factor alarmante de la degradaci¨®n del paisaje. "Las causas de la mitad de los incendios quedan sin descubrir", dice Rubio, para quien la impunidad que ampara a los provocadores de incendios debe considerarse como un verdaderoriesgo medioambiental. "Es necesario saber qui¨¦n se beneficia econ¨®micamente de los incendios", se?ala.

El factor humano

Seg¨²n las ¨²ltimas estimaciones, dos tercios del territorio espa?ol est¨¢n afectados por procesos m¨¢s o menos moderados de desertificaci¨®n. Las regiones m¨¢s afectadas son Murcia, Andaluc¨ªa, Canarias y la Comunidad Valenciana, pero otras peque?as zonas forman un mosaico de degradaci¨®n que salpica toda Espa?a. El proceso hace m¨¢s ¨¢rido el paisaje y reduce su variedad de especies biol¨®gicas.Un aspecto pol¨¦mico es si la desertizaci¨®n est¨¢ relacionada con procesos globales de cambio clim¨¢tico, o es m¨¢s bien un efecto nocivo de la intervenci¨®n humana. Si lo primero es una preocupaci¨®n por el posible calentamiento global en el futuro, lo segundo viene apoyado por ciertas evidencias llegadas del pasado. Seg¨²n Juan Jos¨¦ Ib¨¢?ez, colaborador del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, la desertificaci¨®n acompa?¨® a los primeros pueblos agr¨ªcolas en su expansi¨®n por Europa desde Oriente.El avance de estas civilizaciones sedentarias, que se inici¨® hace unos 8.000 a?os, ha podido correlacionarse con un aumento de las tasas de erosi¨®n y la sustituci¨®n de la vegetaci¨®n de hoja caduca-propia de climas h¨²medos- por otra de hoja perenne, como la encina, caracter¨ªstica de las zonas ¨¢ridas. Seg¨²n Ib¨¢?ez, durante el mismo periodo hubo tambi¨¦n cambios clim¨¢ticos que, sin embargo, no produjeron procesos de aridizaci¨®n. La sustituci¨®n de vegetaci¨®ncaducifolia por perennifolia puede llegar a ser tambi¨¦n una de las consecuencias del efecto invernadero predicho como resultado de las crecientes emisiones de CO2, a la atm¨®sfera. Seg¨²n algunos modelos recientes, un calentamiento global promedio de un grado cent¨ªga do provocar¨ªa un "incremento espectacular" del arbolado de hoja perenne, seg¨²n Ib¨¢?ez, aun en el caso de que el r¨¦gimen de lluvias permaneciera constante. Los cient¨ªficos, sin embargo, insisten en la dificultad de probar que ese calentamiento sea un fen¨®meno real.