"La Ley de Sociedades An¨®nimas Deportivas est¨¢ muy verde"

El f¨²tbol espa?ol vive este mes de agosto uno de los conflictos m¨¢s enconados de toda su historia. La Liga Profesional, que preside Antonio Bar¨®, abri¨® la brecha, Con la ley en la mano, al aplicar el decreto de Sociedades An¨®nimas Deportivas y bajar al Sevilla y al Celta de Vigo a Segunda B por no presentar el aval del 5% de su presupuesto. Bar¨® reconoce que el decreto "est¨¢ todav¨ªa verde" y niega que se haya sentido presionado despu¨¦s de que la Liga haya readmitido a esos dos equipos en Primera Divisi¨®n.

La guerra del f¨²tbol no ha encontrado a¨²n una soluci¨®n completa cuando apenas restan dos semanas para el inicio de la Liga. La Federaci¨®n ha pedido a los clubes, que revoquen el acuerdo de mantener una Liga tambi¨¦n de 22 equipos la pr¨®xima tempoirada, Los clubes se resisten.Pregunta. Primer cap¨ªtulo. ?La Liga no hizo una interpretaci¨®n muy dura de la ley con Sevilla y Celta, diciendo que no pod¨ªan jugar en una categor¨ªa profesional porque no presentaron un: aval de 85 y 45 millones, respectivamente, cifras rid¨ªculas en el f¨²tbol?

Respuesta. Yo todav¨ªa no entiendo c¨®mo el Sevilla y el Celta no depositaron los 85 y 45 millones correspondientes. Es extra?o, dado que la cantidad era peque?a y que la Liga hizo un esfuerzo enorme para no tener que tomar la decisi¨®n que adopt¨®. Pero todos conoc¨ªan la ley.

P. Hay quien se pregunta por qu¨¦, al mismo tiempo que no se inscribi¨® al Sevilla y al Celta, se invit¨® al Valladolid y al Albacete.

R. Porque es una cuesti¨®n autom¨¢tica. De acuerdo a los estatutos y reglamentos de La Liga y al propio decreto. No se puede esperar unos d¨ªas a ver qu¨¦ pasa. El plazo es preclusivo. No pod¨ªamos hacer otra cosa, porque si yo el d¨ªa 1 de agosto, cuando se tom¨® la decisi¨®n, hubiera aconsejado otro camino, quiz¨¢ hubi¨¦ramos incurrido en un delito.

P. Segundo cap¨ªtulo. Tras la decisi¨®n de la Liga interviene el Consejo Superior de Deportes. ?C¨®mo juzga su actitud o eval¨²a su resoluci¨®n?

R. No s¨¦ si calificar su resoluci¨®n de h¨ªbrida, pero a la Liga le ha dado muchas m¨¢s prerrogativas de las que ten¨ªa y, adem¨¢s, dice que los comit¨¦s de finanzas y deportivo actuaron correctamente, de acuerdo a la ley.

P. Tercer cap¨ªtulo. La asamblea de la Liga. Hay la sensaci¨®n de que se aceptar¨¢ por un a?o una Liga de 22 si hay contrapartidas, como la de reducirla a 18. Pero los clubes, tras una reuni¨®n esperp¨¦ntica, toman la decisi¨®n extravagante de dos Ligas con 22 equipos y una tercera con 20.

R. La Liga propuso un primer campeonato de 22, luego de 20 y m¨¢s tarde de 18. Pero en la ya c¨¦lebre asamblea se produjo un desbarajuste de si bajan m¨¢s o suben menos... Cuando las cosas no son impuestas, no son aceptadas. Veinte equipos son bastantes; 22, muchos, y 18, un n¨²mero m¨¢s adecuado. Todo el mundo quer¨ªa que los afectados estuvieran en Primera, todo el mundo era solidario..., pero luego cada uno piensa en ¨¦l.

P. Tanto el desarrollo como el final de la asamblea emborronan la actuaci¨®n. de la Liga en el proceso...

R. La situaci¨®n fue que el exterior percibi¨® un aspecto de solidaridad: somos solidarios. Pero resulta que si ingresamos 10 millones queremos 12 y si tenemos 10 peligros no queremos 12. Es f¨¢cil ser solidario de esta forma. Todos eran solidarios con la medida pero no tanto con las consecuencias.

P. Hay coincidencia en, que la s¨ªntesis de la asamblea fue una frase suya: "Aprobado de una pu?etera vez".

R. Me sabe mal. No digo nunca esa expresi¨®n. Pero tras cinco horas discutiendo un tema parec¨ªa que se pon¨ªan de acuerdo. En este contexto quiz¨¢ la expresi¨®n no est¨¢ tan fuera de lugar.. P. Dijo Gil que a usted se le escap¨® la asamblea de las manos.

R. No creo que se me escapara. La asamblea pod¨ªa haber discurrido por otros cauces, pero las personas que ten¨ªan que decidir s¨ª o no era lo s* representantes de las 38 entidades all¨ª representadas. Yo intent¨¦ cortar las alusiones ajenas al mundo -del f¨²tbol, pero tampoco hay que olvidar que cada uno tiene derecho a hablar. Y, referente a la propuesta, puedo asegurar que, excepto el c¨®mputo de 22-20-18 y el 22-22-20 [equipos], las medidas no ten¨ªan incidencia negativa. Si todo hubiera sido una cuesti¨®n de 22-20-18, la asamblea se hubiera acabado enseguida. Hubieran dicho no.

P. La frase:, "Est¨¢n a punto de invadirnos", refiri¨¦ndose a los aficionados del Celta que estaban en la calle, -?no cree que no fue muy afortunada?

R. Me transmitieron una nota de la polic¨ªa diciendo que no sab¨ªan si podr¨ªan controlar a los aficionados que estaban en la calle. Yo ten¨ªa la obligaci¨®n de constatar un hecho. No fue ninguna presi¨®n. Puedo asegurar que si un d¨ªa me sintiera presionado a la hora de tomar una decisi¨®n, me ir¨ªa.

P. ?No previ¨® la Liga que su decisi¨®n de no inscribir al Sevilla y al Celta pod¨ªa desenc¨¢denar la alarma social que desencaden¨®?

R. La alarma social se produjo a posteriori. No se pueden reproducir ciertas declaraciones que unos y otros dijeron.

P. Parece que la Ley de Sociedades An¨®nimas no ha solucionado algunas cuestiones.

R. Est¨¢ muy verde todav¨ªa. Hubo primero, en 1992, la Liga de la conversi¨®n y luego la llamada Liga de la transformaci¨®n. Yo dije que faltaba la del asentamiento. Lo que se olvid¨® es que el socio no necesariamente tiene que ser accionista. El capital se concentra en pocas manos y ello provoca que la afici¨®n sea una cosa y el que manda otra. Ese es el problema y hay que encontrar una soluci¨®n. Tenemos a un grupo de 15 juristas, ajenos a la Liga, estudiando alternativas ( ... ). Me sorprende una cosa: la gente critica cuando pasa algo, pero cuando no ocurre nada, todo el mundo asume.

P. Cuarto cap¨ªtulo. La Federaci¨®n aparece, propone calendario y dice que s¨®lo permitir¨¢ 22 equipos este a?o. ?Ha practicado absentismo interesado?

R. Desde que conocimos la resoluci¨®n, la Liga intent¨® contactar con la Federaci¨®n, pero no obtuvimos respuesta. En cuanto al calendario y de acuerdo con la ley, cuando se discute la composici¨®n de la Liga es ella quien debe decidir. La opci¨®n de 22 viene sugerida por el CSD.

P. ?No cree que se ha dado una imagen de improvisaci¨®n?R. No. Nosotros tomamos una decisi¨®n el 1 de agosto y, seg¨²n la resoluci¨®n del CSD, el plazo era preclusivo. Pero hasta el d¨ªa 10 no pudimos empezar. Hemos sido diligentes.

La LFP debe decidir la composici¨®n de la Liga, no la Federaci¨®n

La alarma social fue posterior. No se pueden reproducir ciertas declaraciones