El mana tur¨ªstico

LA voz de alerta se ha disparado este verano en algunos sectores tur¨ªsticos. La ocupaci¨®n a lo largo de julio y en los primeros d¨ªas de agosto es inferior a lo esperado. La. ca¨ªda es especialmente apreciable en la Costa Brava, la Costa del Sol, la Comunidad Valenciana y Canarias, seg¨²n el ministro del ramo, Javier G¨®mez-Navarro. Pero la menor ocupaci¨®n parece mas el fruto de un optimismo previo excesivo que de un retraimiento alarmante del turismo. Ocupaciones de entre el 75% y el 80% no son ¨®ptimas, pero tampoco malas. Y, por una vez, se borra el fantasma del overbooking. La temporada es menos buena de lo esperado en las zonas citadas, pero ha alcanzado los niveles previstos en Baleares y se baten r¨¦cords en el turismo urbano, especialmente en Barcelona y, en menor medida, en Madrid.La menor afluencia en las zonas de turismo masivo parece m¨¢s producto de la aton¨ªa del consumo que vive la econom¨ªa espa?ola que de una reducci¨®n significativa de los visitantes extranjeros. El ministerio apenas ha, rebajado su previsi¨®n inicial de que el a?o se cerrar¨¢ con la entrada de 63,1 millones de visitantes (un 70% de ellos, turistas), frente a los 61,4 millones del a?o, anterior. Los ingresos por turismo han crecido, casi un 10% en el primer semestre del a?o, alcanzando 1,35 billones de pesetas. Al mismo tiempo, el gasto de los espa?oles en el exterior s¨®lo ha aumentado un 2,9%, lo que permite elevar el saldo tur¨ªstico a 1,1 billones de pesetas, con un crecimiento del 1 1,6%.

La grave crisis tur¨ªstica vivida por Espa?a a principios de los a?os noventa oblig¨® al sector a iniciar una reconversi¨®n hacia un turismo menos masivo -sin que, por sus dimensiones, pueda jam¨¢s abandonar la ambici¨®n de las grandes cifras- y con mayor capacidad adquisitiva. Las cifras de este a?o parecen confirmar que esa es la senda por la que camina la primera industria nacional, Es una buena senda. La ca¨ªda de la cotizaci¨®n de la peseta ofrece un buen margen para que las subidas en pesetas no se hayan traducido en un inconveniente para atraer al turista extranjero. El conflicto en los Balcanes y la inestabilidad en el norte de ?frica benefician a Espa?a como. destino de millones de europeos. S¨®lo Grecia y Turqu¨ªa se mantienen como serios competidores, con una oferta similar a la espa?ola y precios m¨¢s bajos; la baza frente a ellos es la calidad.

El incumplimiento, de las expectativas ante todo refleja la situaci¨®n de aton¨ªa del consumo interno. Los espa?oles siguen sin confiar en el futuro. La carest¨ªa de las divisas ha retra¨ªdo los viajes al exterior sin compensar los interiores. Los que en a?os anteriores dejaban su caga dos o tres semanas, este verano han optado por recortar su. estancia en las zonas tur¨ªsticas y apenas pasan fuera una semana o 10 d¨ªas.