"Es asombroso lo que hemos conseguido desde 1975"

Cristina Alberdi (sevillana, 46 a?os) es optimista respecto al inmediato futuro de la lucha por la igualdad, aunque el presente, a nivel mundial lo ve "vergonzoso". La ministra de Asuntos Sociales cree que las espa?olas han conseguido ya los instrumentos b¨¢sicos y que ahora lo importante es cambiar la imagen de la mujer. Lleg¨® ayer a Pek¨ªn, donde va a ser la portavoz de la UE y donde defender¨¢ la igualdad de participaci¨®n de la mujer en la pol¨ªtica.Pregunta. ?No es parad¨®jico defender la paridad en Pek¨ªn y que el partido del Gobierno aprobara en 1988 la cuota del 25% y no haya sido capaz de cumplirla todav¨ªa?

Respuesta. Cuando no tienes una realidad es cuando planteas, precisamente, un objetivo a conseguir. A m¨ª me parece que la participaci¨®n equilibrada es una condici¨®n esencial de la democracia.

P. Seg¨²n el ¨²ltimo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Espa?a ocupa un buen lugar a nivel general en ¨ªndice de desarrollo (el noveno del mundo), pero no tan bueno es el relacionado con las mujeres (el 34?).

R. Esa bajada se debe a la situaci¨®n econ¨®mica, porque s¨®lo contribuimos a los ingresos totales en el 18,6%, porque estamos en los puestos peor remunerados. En cambio, en el ¨ªndice de potenciaci¨®n de la mujer estamos en el lugar 26.

P. Esa descompensada situaci¨®n tambi¨¦n podr¨ªa demostrar el fracaso de los institutos de la mujer.

R. Al rev¨¦s. Es un ¨¦xito. Espa?a ha recorrido en 20 a?os lo que otros pa¨ªses han hecho en 60. Es asombroso lo que se ha conseguido desde 1975, cuando la mujer no pod¨ªa abrir una cuenta corriente ni administrar sus bienes. Los dos instrumentos b¨¢sicos -educaci¨®n y salud- ya se han conseguido, por lo que el avance se va a notar en los pr¨®ximos a?os.

P. ?Cu¨¢l es el siguiente paso?

R. La imagen. Porque la imagen cambia la conciencia y las expectativas. Sin entrar ya en la imagen de la mujer como objeto sexual, esa imagen tradicional y sutil de la mujer que ofrece a veces la publicidad, por ejemplo, hace mucho da?o porque desmotiva a las mujeres.

P. Algunos hombres dicen que las mujeres en los pa¨ªses desarrollados no est¨¢n discriminadas; que, sencillamente, la mujer es m¨¢s acomodaticia y reh¨²ye los puestos de responsabilidad.

R. Son resistencias. Si la mujer se conforma con menos es tambi¨¦n un problema de expectativa social. Hay m¨¢s expectativa con respecto a los hombres; se les pide m¨¢s. A las mujeres qu¨¦ poco se nos ha pedido siempre. Con que estuvi¨¦ramos calladitas en casa bastaba. Hay desmotivaci¨®n y muchas veces falta de est¨ªmulo.

P. ?No cree que puede ser una torpeza volver al tema del aborto en Pek¨ªn, que puede polarizar el debate como pas¨® en El Cairo?

R. A mi juicio, esta vez no va a ser el eje del conflicto. De hecho, no se han centrado en ¨¦l las discusiones, sino en los derechos humanos.