El probable instructor del 'caso GAL' ser¨¢ Montero, Mart¨ªn Pall¨ªn, Puerta o De Vega
Ram¨®n Montero, Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Pall¨ªn, Luis Rom¨¢n Puerta y Jos¨¦ Augusto de Vega son los cuatro magistrados del Tribunal Supremo con m¨¢s probabilidades de ser designados hoy instructor del caso GAL. Fuentes de la Sala Segunda del alto tribunal aseguraron que ser¨¢ designado, uno de ellos, seg¨²n la interpretaci¨®n que prospere sobre los criterios que vienen siendo aplicados para turnar los asuntos entre los magistrados. La importancia de la funci¨®n del instructor para la investigaci¨®n de los casos penales y la necesidad de respetar la exigencia legal del "turno preestablecido" hace que los miembros de la sala se esfuercen por obtener un consenso sobre el sistema a aplicar en este asunto, ya que el turno no es autom¨¢tico.
La ausencia de automatismo impide conocer con seguridad a qui¨¦n le corresponde. Miembros de la sala aseguran que tanto los turnos de ponentes como los de instructores han sido hasta ahora consensuados y la voluntad de la sala es que siga si¨¦ndolo en lo que se refiere al caso GAL. En la pr¨¢ctica de tales turnos no s¨®lo se ha tenido en cuenta el orden cronol¨®gico de entrada, sino tambi¨¦n la complejidad del caso y el adecuado reparto entre los magistrados de asuntos de mayor y de menor complejidad.El acuerdo de 30 de noviembre de 1994 sobre los turnos de la Sala Segunda para 1995 en las causas contra aforados prev¨¦ tres turnos para la asignaci¨®n de ponencias "a fin de asegurar, en lo posible, una distribuci¨®n igualitaria de los asuntos muy complejos, con una m¨ªnima connotaci¨®n de complejidad o desprovistos en principio de la misma". Tal sistema trata de equilibrar el trabajo a repartir entre los magistrados y, hasta ahora, su aplicaci¨®n no ha suscitado problemas ni quejas en lo que se refiere a supuesta vulneraci¨®n del "turno preestablecido".
Convulsi¨®n en el Supremo
La llegada del caso GAL al supremo ha supuesto una convulsi¨®n, dadas sus elevadas connotaciones pol¨ªticas, mucho m¨¢s acentuadas que las del resto de los casos contra parlamentarios o magistrados. Hasta el punto de que la "especial trascendencia" de este asunto, apreciada por el presidente Fernando Cotta, le indujo a proponer y formar una Sala de Admisi¨®n distinta a la existente desde el 1 de julio, que integraba Cotta, Joaqu¨ªn Delgado y Luis Rom¨¢n Puerta.
Con el argumento de una mayor garant¨ªa, se form¨® la Sala de Admisi¨®n del caso GAL, integrada por Cotta, Jos¨¦ Augusto de Vega y Francisco Soto, los tres magistrados m¨¢s antiguos. Aunque ning¨²n magistrado protest¨®, entonces, desde posiciones que no vinculan necesariamente la profesionalidad con la antig¨¹edad, algunos miembros de la sala han objetado posteriormente que aquella sala no se integrara, como la ley prev¨¦ en muchos casos, por el presidente, el magistrado m¨¢s antiguo (De Vega) y el m¨¢s moderno (C¨¢ndido Conde-Pumpido Tour¨®n).
A partir de este cambio de criterio, motivado por la importancia del caso GAL, fuentes de la Sala Segunda insisten en que el sistema a aplicar para la designaci¨®n de instructor de este asunto no debe ser rutinario. De ah¨ª que la existencia, cronol¨®gicamente anterior, de seis asuntos contra aforados, de much¨ªsima menor entidad que el caso GAL, no tiene por qu¨¦ obligar a dotar de instructor a todos ellos antes de nombrar al de este asunto. En definitiva, proponen que el caso GAL, que ha provocado un cambio de sala de admisi¨®n, una interrupci¨®n de las vacaciones de tres magistrados y un gran impacto p¨²blico, "pase por delante de los otros seis casos".
De aceptarse este criterio, dado que el ¨²ltimo magistrado designado instructor fue Joaqu¨ªn, Delgado, ser¨ªa nombrado el inmediatamente siguiente por antig¨¹edad, esto es, Mart¨ªn Pall¨ªn. Las fuentes se?aladas insistieron en que el orden cronol¨®gico de entrada en la sala no siempre prevalece, ya que, a veces, cuando un asunto, aunque sea posterior, est¨¢ m¨¢s maduro que otro ingresado antes, se le designa instructor. "El orden no es el de ingreso, sino el de la tramitaci¨®n adecuada para designar instructor", explic¨® la fuente.
"Hay mucho loco suelto"
La raz¨®n de que muchas denuncias o querellas contra aforados no lleguen a la designaci¨®n de instructor es que "hay mucho loco suelto que plantea querellas contra jueces, magistrados, parlamentarios o el presidente del Gobierno que, tras un an¨¢lisis racional, suelen caerse". Las mismas fuentes indicaron que, para el supuesto de que el caso GAL no se coloque, por su mayor entidad y madurez, por delante de los otros seis asuntos ingresados antes en la sala, "es muy probable que dos se caigan".
Si es as¨ª, las otras cuatro podr¨ªan preceder al caso GAL. Para ellas ser¨ªan sucesivamente designados Mart¨ªn Pall¨ªn, Jos¨¦ Manuel Mart¨ªnez-Pereda, Joaqu¨ªn Mart¨ªn-Canivell y Conde-Pumpido. Nombrados esos cuatro instructores, habr¨ªa que designar al instructor del caso GAL, para lo que habr¨ªa que volver a la cabeza de la lista. Si el criterio es excluir s¨®lo al presidente de la sala, el designado ser¨ªa De vega. Si, en cambio, se excluye a De Vega y Francisco Soto -por haber formado parte ambos de la Sala de Admisi¨®n-, el designado ser¨ªa el magistrado inmediatamente siguiente por el turno de antig¨¹edad: Montero.
Cabe tambi¨¦n la posibilidad de que se decida designar instructor para los seis casos pendientes anteriores al caso GAL. Si, adem¨¢s de tomar esta decisi¨®n, se excluye de la instrucci¨®n s¨®lo al presidente de la sala, el designado ser¨ªa tambi¨¦n Montero, tras resultar designados los cuatro ¨²ltimos de la lista y De Vega y Soto. En el supuesto de que, adem¨¢s de designar instructor para los seis asuntos ingresados antes del de los GAL, se excluyera de la instrucci¨®n a De Vega y Soto, por integrar a ambos magistrados en una sala permanente de admisi¨®n, el designado podr¨ªa ser Puerta.
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