El genral Pinochet llama asesinos a los derrotados de su asonada militar

En el 22? aniversario del golpe militar, el general Augusto Pinochet llam¨® asesinos a los derrotados de su asonada. En la calle, donde hubo duros enfrentamientos con la polic¨ªa, la izquierda record¨® al asesinado Salvador Allende. Su viuda, Hortensia, dijo que hab¨ªa una deuda pendiente con ¨¦l. Pese a la restauraci¨®n democr¨¢tica, hace seis a?os, la cuesti¨®n de los derechos humanos y de los desaparecidos sigue abierta.

Un a?o m¨¢s, los chilenos conmemoraron la fecha separados y de muy diferente manera. En los cuarteles, se festej¨® la efem¨¦rides con actos diversos. A la casa del general Pinochet, que a¨²n conserva el mando de las Fuerzas Armadas por un precepto constitucional por ¨¦l introducido antes de ceder el poder, lleg¨® una delegaci¨®n de altos mandos para honrrarle en tan singular fecha. El ex dictador se despach¨® sin recato: "Ellos [los derrotados] fueron los causantes, ellos fueron los asesinos". El general se declar¨® "ofendido por las groser¨ªas que hoy le lanzan aquellos que fueron derrotados".En la calle miles de manifestantes no compartieron su lectura de la historia. Se dirigieron al cementerio para homenajear al presidente Salvador Allende, derrocado y asesinado en el golpe militar del 11 de septiembre de 11973. La marcha termin¨® en choques con la polic¨ªa. No hubo heridos ni detenidos.

En el trasfondo de la conmemoraci¨®n, est¨¢n los desaparecidos. En los tribunales se mantienen a¨²n 180 juicios que afectan a ex agentes de la polic¨ªa secreta del r¨¦gimen, y, seg¨²n datos de la Fundaci¨®n de Ayuda Social de Iglesias Cristianas abarcan a 555 v¨ªctimas, de un total de 3.200.

El 'caso Contreras'

La pol¨¦mica se desat¨® tras el fallo de la Corte Suprema que conden¨® a los dos m¨¢s altos jefes de la ex polic¨ªa secreta, el general Manuel Contreras y el brigadier Pedro Espinoza, a siete y seis a?os de prisi¨®n por el asesinato del ex canciller Orlando Letelier.Tras el fallo, que no se cumple en su totalidad, pues Contreras permanece hospitalizado en un recinto militar, la derecha pol¨ªtica ligada a los militares propuso una ley de punto final para acabar con viejas heridas y supuestas afrentas a las Fuerzas Armadas. Tras un arduo debate, plagado de incidentes y acusaciones, el pasado 22 de agosto, el presidente Eduardo Frei decidi¨® asumir el principal asunto pol¨ªtico de la transici¨®n democr¨¢tica en sus manos y envi¨® al Senado un proyecto para zanjar los porfiados puntos pendientes del camino a la democracia plena.

El proyecto, junto a una propuesta sobre derechos humanos, contiene varias medidas para perfeccionar el sistema democr¨¢tico chileno; entre ¨¦stas, la restituci¨®n al Ejecutivo de la facultad de remover y designar a los jefes militares.