Una cl¨ªnica deber¨¢ mantener a una ni?a que naci¨® tras una esterilizaci¨®n

La Audiencia de Alicante acaba de hacer p¨²blica una sentencia que condena a la cl¨ªnica GINETEC a mantener hasta su mayor¨ªa de edad a una ni?a que naci¨® despu¨¦s de haber sometido a esterilizaci¨®n a la madre. La sentencia se fundamenta en que la cl¨ªnica no ofreci¨® suficiente informaci¨®n sobre las posibilidades de ¨¦xito o fracaso de la intervenci¨®n quir¨²rgica. Los hechos ocurrieron en marzo de 1989 cuando Virginia Lizcano decidi¨® someterse a una ligadura de trompas para evitar m¨¢s embarazos. La familia no atravesaba un buen momento econ¨®mico y daban por suficientes las dos hijas que ya ten¨ªan. La sorpresa salt¨® un a?o despu¨¦s de la intervenci¨®n. La posibilidad era m¨ªnima, un cinco por mil, pero fue suficiente para que Virginia volviese a concebir un hijo.

Ante la imposibilidad de conseguir que los propietarios de la cl¨ªnica GINETEC asumieran las responsabilidades que, a su juicio, ten¨ªan en el embarazo sorpresa, Virginia Lizcano decidi¨® iniciar la v¨ªa judicial.

Tras cuatro a?os de pleitos, el argumento de la Audiencia es que Virginia Lizcano no fue avisada de la posibilidad de concebir hijos. "La Audiencia Provincial ha estimado que mi cliente no fue bien informada y desconoc¨ªa que exist¨ªa una m¨ªnima posibilidad de quedar nuevamente embarazada", dice el abogado defensor, David Mart¨ªn Lafoz.

La sentencia implica el pago de una indemnizaci¨®n suficiente para que, puesta a plazo fijo en alguna entidad bancaria, produzca una renta de entre 20.000 y 30.000 pesetas mensuales hasta que la peque?a Virginia cumpla los 18 a?os.