Una ¡®app¡¯ para que las madres hagan ¡®match¡¯ y puedan compartir el cuidado de los hijos con otras mujeres para poder conciliar

Toni Rodr¨ªguez, funcionaria de 32 a?os, tiene una visi¨®n de por qu¨¦ cada vez se apuesta m¨¢s por modelos de crianza individualistas: ¡°Nos han impuesto un horario r¨ªgido de trabajo, ?qui¨¦n tiene tiempo de socializar a las nueve de la ma?ana en la puerta del colegio para conocer a otros padres? En la sociedad de hoy nos cuesta pedir ayuda, hemos retrocedido, y hasta nos da apuro pedir una patata al vecino¡±. Desde que fue madre ¡ªsu hijo va a cumplir un a?o y ella es la principal cuidadora¡ª, ha tenido que abandonar actividades como las dos horas a la semana que dedicaba a nataci¨®n o la plataforma de v¨ªdeos con la que hac¨ªa gimnasia en casa. ¡°No me daba la vida¡±, cuenta desde su sal¨®n en M¨®stoles (Madrid). Ella es una de las 35 mujeres que han probado una nueva aplicaci¨®n ¡ªest¨¢ en fase beta¡ª que pone en contacto a madres con hijos en funci¨®n de su c¨®digo postal, por cercan¨ªa geogr¨¢fica, para que se conozcan y puedan establecer un v¨ªnculo que les permita el intercambio de cuidados.

La plataforma que est¨¢ detr¨¢s del dise?o de esta app es el Club de Malasmadres, una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro que desde 2015 lucha por visibilizar la falta de conciliaci¨®n en Espa?a, la penalizaci¨®n de la mujer en el mercado laboral, y que ha participado con 11 medidas en la mesa asesora de la ley de familias ¡ªpendiente de su tr¨¢mite en el Congreso de los Diputados¡ª y ha impulsado una ponencia sobre esta cuesti¨®n en el Senado para hacer un diagn¨®stico en 2025. Seg¨²n diferentes encuestas elaboradas por esta plataforma, el 85% de las mujeres tiene menos de una hora al d¨ªa o no tiene tiempo para su autocuidado; el 60% tendr¨ªa m¨¢s hijos si contara con mayor acompa?amiento, como apoyo econ¨®mico o personas o servicios de apoyo a la crianza; y el 50% ha perdido salario por su maternidad por acogerse a una reducci¨®n de jornada o una excedencia.

¡°Hemos centrado la app ¡ªque estar¨¢ disponible en febrero¡ª en mujeres porque son m¨¢s del 80% de los cuidadores en Espa?a, la falta de conciliaci¨®n supone un modelo sin futuro para las que son madres, el desbordamiento y la falta de sostenibilidad personal y profesional las empuja a renunciar a diferentes aspectos de su vida¡±, indica Maite Egoscoz¨¢bal, fundadora de Malasmadres y autora de su estudio m¨¢s reciente, Red yo cuido, nosotras cuidamos, del que se desprende que m¨¢s del 60% de las mujeres renuncian a su carrera profesional al ser madres. ¡°Solo disponemos, de media, de 54 minutos de tiempo libre despu¨¦s de realizar la doble jornada laboral, un aspecto que impacta en el cansancio f¨ªsico y psicol¨®gico¡±, a?ade.

En ese ¨²ltimo estudio, para que el que han encuestado a 7.477 mujeres, han explorado la necesidad de tejer redes de apoyo informales. El 85% de ellas aseguraron sentirse solas desde que fueron madres por no contar con los apoyos para poder conciliar. En uno de los grupos de trabajo, donde participaron 25 mujeres, definieron la soledad como no tener una pareja corresponsable y ¡°tener que encargarse de todo¡± a la hora de afrontar los cuidados y las tareas del hogar, no poder contar con los abuelos por su avanzada edad, por estar enfermos o simplemente por no confiar en que puedan atender las necesidades de los peque?os. Solo el 13% de las encuestadas puede pagar a una persona cuidadora y el 10% se organizan con amigos.

Dos de cada cinco mujeres aseguraron que no pueden asumir el coste de cuidados puntuales y no les compensa pagar servicios o escuelas infantiles. En Espa?a, contratar a una persona cuidadora tres horas al d¨ªa de lunes a viernes asciende a unos 460 euros al mes, m¨¢s otros 160 de cuota de la Seguridad Social, de acuerdo con el salario m¨ªnimo interprofesional. Adem¨¢s, el coste promedio mensual de criar a un ni?o en Espa?a asciende a 758 euros, un 13% m¨¢s que en 2022, seg¨²n datos de la ONG Save the Children. Otro de los datos muestra que el 22% de ellas refiri¨® haber rechazado puestos de responsabilidad o haber cambiado de empleo en busca de horarios m¨¢s flexibles. Otras, optaron por hacerse aut¨®nomas.

Ana S¨¢nchez, de 37, sigui¨® es ese camino tras el nacimiento de su hijo (ahora tiene casi un a?o y medio), se dio de alta como aut¨®noma y cre¨® su marca Anknadmade, donde personaliza prendas de ropa. Su chico, cuenta, viaja mucho por trabajo, y ella se encarga del ni?o. ¡°De pronto me met¨ª en casa, sin familia cerca (ella es de Ja¨¦n y vive en Madrid), sin compa?eros de trabajo, me empez¨® a afectar y me un¨ª a un grupo de mujeres que conoc¨ª en el centro de salud en las clases de preparaci¨®n al parto¡±. Ese grupo le dio la ¡°evasi¨®n¡± que necesitaba, le serv¨ªa para desahogarse, y estrech¨® lazos con una de las chicas, con la que ahora intercambia cuidados de los peque?os.

¡°Cuando lo necesito acudo a ella para que se quede un par de horas con el beb¨¦, son ocasiones muy puntuales, pero te da un respiro y una seguridad importante¡±. Ana cuenta que a su pareja no le ha cambiado tanto la vida, no ha dejado el deporte ni sus rutinas. Ella ahora ha podido recuperar una hora a la semana para ir a teatro. ¡°La maternidad me ha costado perder la independencia que ten¨ªa, creo que una app como esa puede ayudar mucho, aunque hay que conocerse muy bien antes, nunca dejar¨ªa a mi hijo con una desconocida¡±.

El problema de la inmediatez

Preguntadas por cu¨¢les son los frenos o barreras para delegar los cuidados puntuales de los hijos en otras personas cuando no supone un coste, el 34% afirmaron que es la dificultad para encontrar ¡°personas de confianza¡± disponibles, ya que la inmediatez con la que muchas veces se necesita esa ayuda y la falta de flexibilidad de esas personas act¨²an como principales barreras, as¨ª como la distancia y el tiempo de desplazamiento. Otro de los argumentos reportados fue el sentimiento de culpa (58% de ellas). A¨²n as¨ª, el 45% afirm¨® que compartir¨ªa o intercambiar¨ªa los cuidados sin problema a trav¨¦s de la app ¡ªfinanciada con los fondos Next Generation de la Uni¨®n Europea a trav¨¦s del Ministerio de Trabajo y Econom¨ªa Social¡ª, y un 11% rechaz¨® la idea.

Sobre el tipo de ayuda que solicitar¨ªan, el 42% dijo que el cuidado de sus hijos por unas horas; el 41% ayuda con las comidas; el 37% compartir actividades con otras madres; el 33% compartir actividades en familia, y el 31% recoger o llevar a sus hijos al colegio. Un 37% de mujeres indic¨® que recurrir¨ªa a estos cuidados puntualmente, un 36% varias veces por semana y un 5% de ellas lo usar¨ªa a diario.

En la app, que se llamar¨¢ Red Yo Cuido y ser¨¢ gratuita, cada usuaria podr¨¢ crear su perfil, subir fotos e indicar qu¨¦ cuidados desea intercambiar, de forma que la herramienta mostrar¨¢ otras madres afines bas¨¢ndose en tres criterios principales: tipo de madre, cercan¨ªa geogr¨¢fica e intereses en com¨²n, lo que les permitir¨¢ hacer match (como sucede en la aplicaci¨®n de citas Tinder).

En su estudio Sin madres no hay futuro, la plataforma Malasmadres constat¨® que las mujeres sienten que no cuentan con el apoyo suficiente para tener m¨¢s hijos. En Espa?a nacen 1,16 hijos por mujer, la tasa m¨¢s baja de la Uni¨®n Europea. Sin embargo, existe una brecha de fecundidad deseada y efectiva (una de las mayores de la UE): el 20% de mujeres de m¨¢s de 40 a?os con hijos habr¨ªa querido tener m¨¢s; y, de las que no ten¨ªan, la mitad hubiese querido tener.

¡°En nuestros informes, siempre urgimos a las administraciones a aprobar nuevas medidas en materia de conciliaci¨®n, y mientras llegan vamos poniendo en marcha proyectos como esta aplicaci¨®n para mejorar un poco el d¨ªa a d¨ªa de las madres¡±, explica Maite Egoscoz¨¢bal.

En el plano pol¨ªtico, la ley de familias insta a que en el plazo de un a?o tras la aprobaci¨®n de la ley las administraciones aprueben una estrategia de apoyo en los mil primeros d¨ªas de vida de los ni?os, y las comunidades aut¨®nomas deber¨¢n elaborar junto al ministerio un cat¨¢logo de prestaciones y servicios a las familias, com¨²n a todo el pa¨ªs. La Comisi¨®n Europea ha reclamado reiteradamente a Espa?a que mejore su protecci¨®n social en familia e infancia. El pa¨ªs destin¨® en 2021 a esta partida el 1,5% del PIB, frente al 2,4% de la media europea.

Adem¨¢s, desde junio del a?o pasado, los padres y madres pueden disponer de ocho semanas hasta que sus hijos cumplan ocho a?os para cuidarles, que se pueden disfrutar seguidas o de manera discontinua. De momento, eso s¨ª, sin percibir ni un euro. Esa retribuci¨®n sigue pendiente de aprobaci¨®n, tal y como exige la directiva europea de conciliaci¨®n.

Seg¨²n avanzas en la maternidad, apunta Patricia L¨®pez (de 46 y un hijo de ocho), ¡°ves que lo que has hecho no son elecciones¡±. Ella pidi¨® primero una excedencia, luego una reducci¨®n de jornada, por la que est¨¢ perdiendo 200 euros al mes. ¡°Socialmente, es la madre la que cuida, a m¨ª me sali¨® de forma innata, mi marido ni se lo plante¨®¡±. Su ocio y autocuidado los resume en una cita, la que tiene cada tres meses ¡°sin falta¡± con su grupo de amigas.