Dos ex profesores musulmanes dicen que no se les deja ir a la mezquita

Dos ex profesores musulmanes del centro isl¨¢mico de la M-30, que alberga la principal mezquita madrile?a, junto al Tanatorio, denunciaron este fin de semana en la comisar¨ªa de Ventas que les fue prohibida arbitrariamente la entrada al templo durante la oraci¨®n del pasado viernes, hecho sin precedentes entre la comunidad isl¨¢mica de Madrid, seg¨²n aseguran. Los denunciantes -Nazaredin Belaaz y Karim Idri- ambos de nacionalidad argelina, aseguran que la prohibici¨®n de entrar al templo fue ordenada por Abdul Aziz Serhane, saud¨ª, de 45 a?os, director del centro isl¨¢mico y que fue confirmada por una patrulla policial que presenci¨® los hechos.En conversaci¨®n con EL PA?S, Nazer, de 38 a?os, asegura que el veto de entrada a la mezquita obedeci¨® a su despido laboral como docente de la escuela contigua al templo, hace m¨¢s de un a?o, por desavenencias contractuales con el director, tambi¨¦n responsable de su expulsi¨®n del recinto sagrado isl¨¢mico. Seg¨²n ellos, Sarhane fue condenado por la Magistratura de Trabajo a readmitir en sus tareas docentes a los profesores expulsados o bien a indemnizarles, hecho que ya ha sido materilizado.

El director del centro isl¨¢mico, por su parte, dijo ayer a EL PA?S que cuando ocurrieron los hechos se hallaba ausente, si bien admiti¨® que hab¨ªa ordenado a los vigilantes que impidieran el acceso a los ex contratados "para evitar disturbios a la numerosa colonia isl¨¢mica que frecuenta la mezquita".

En el centro estudian unos 160 ni?os y adolescentes de todos los cursos. Los profesores expulsados aseguran que el director Sarhane se negaba a renovar los contratos laborales a 13 docentes, con lo cual el cuadro de ense?antes fue despedido semanas antes de finalizar el curso 1994-95, rompiendo de esta forma la continuidad en la docencia. Los profesores que recurrieron ante la Magistratura de Trabajo ganaron el pleito, pero contra ellos, dicen, se ciernen las prohibiciones del director sobre sus pr¨¢cticas religiosas, "en las las cuales no tiene autoridad".