Santo Ni?o
La cola doblaba la esquina de la calle de los Donados y sub¨ªa por la del Arenal. Pregunt¨¦ a unas se?oras que all¨ª estaban a qu¨¦ se deb¨ªa aquella concentraci¨®n. "Es que los d¨ªas 13 bajan al Ni?o", me dijo una de ellas. Tard¨¦ un momento en darme cuenta del significado de la frase y pens¨¦ que me hab¨ªa topado con una de esas escenas que abonan la existencia de un "surrealismo matritense". Pero me acord¨¦ enseguida de la capilla del Ni?o del Remedio, que hab¨ªa visitado otras veces y, poni¨¦ndome en cola, fui informado de que el d¨ªa 13 de cada mes bajan la imagen del Ni?o Jes¨²s de su hornacina y los devotos pasan a besarle los pi¨¦s."Yo ven¨ªa siempre con mi padre, de peque?a, y sigo viniendo", me dijo una se?ora ya entrada en a?os. Y un caballero subray¨®: "Son muchos en Madrid los que deben favores al Ni?o del Remedio". Yo recordaba haber visto la capilla, con su interior totalmente revestido de l¨¢pidas de m¨¢rmol en las que los devotos daban las gracias por las mercedes recibidas. Muchas de ellas llevaban fechas de finales del siglo XIX y principios del XX. Mi asombro fue comprobar que estas l¨¢pidas han sido retiradas al restaurar la capilla. Era una interesante colecci¨®n de exvotos que ha estado all¨ª hasta hace muy poco tiempo y que se menciona en todas las gu¨ªas de Madrid.
Not¨¦ que la gente de la cola estaba disgustada por la decisi¨®n de los curas o del obispado de retirar de la capilla estas muestras de la antigua devoci¨®n al Ni?o del Remedio. "Antes era m¨¢s bonita". "Viendo las l¨¢pidas, parece que ten¨ªa m¨¢s fe". "El lugar era, ?c¨®mo le dir¨ªa yo?, m¨¢s impactoso ".
Esta devoci¨®n se remonta cien a?os atr¨¢s, cuando un encuadernador, seg¨²n cuentan, compr¨® la imagen a una se?ora que marchaba a Cuba y en el taller donde la coloc¨® empezaron a producirse milagrosas curaciones, que continuaron cuando se traslad¨® a la capilla de los Donados. El Santo Ni?o, vestido seg¨²n la liturgia, tiene una expresi¨®n trist¨ªsima en el rostro y se lleva una mano al pecho mientras sostiene una cruz con la otra. La gente pasa para besar el pie de la imagen, que un sacrist¨¢n limpia con un pa?o a cada beso.
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