Jalabert culmina la Vuelta del ONCE

Ante el pr¨ªncipe Felipe, el ministro franc¨¦s de Deportes y 11.000 ciegos llegados de toda Espa?a, ocho corredores del ONCE, todo el equipo menos Alex Z¨¹lle que, iba despistado, cruzaron agarrados de la mano la ¨²ltima meta de la Vuelta, la del paseo de la Castellana en Madrid. Al director del equipo, Manolo S¨¢iz, le gusta recalcar el valor colectivo del conjunto y esa forma de festejar el triunfo final del franc¨¦s Laurent Jalabert era una manera de decir que sin Mauri, Bruyneel, Stephens, Leanizbarrutia, Herminio, Rinc¨®n, Sierra y Z¨¹lle, nada. Era tambi¨¦n una forma de hacer aun m¨¢s expl¨ªcito que la edici¨®n de la Vuelta hab¨ªa sido la Vuelta del ONCE. Fue tambi¨¦n una forma de que pasara casi inadvertido el triunfo en el sprint final del alem¨¢n Marcel Wust, su tercero en la ronda.Jalabert, ha ganado la Vuelta porque dentro de la lucha interna dentro del equipo de S¨¢iz por hacerse con el liderato fue el m¨¢s inteligente, valiente y decidido. Cuando con la ca¨ªda de Zamora quedaban eliminados Ugrumov y Z¨¹lle; cuando otra ca¨ªda dejaba, fuera de combate a Riis en la contrarreloj de Salamanca, la unica pregunta que quedaba sin respuesta era qui¨¦n del ONCE tomar¨ªa el cuchillo para apuntillar al solitario Olano. Jalabert no lo dud¨® ante la oportunidad hist¨®rica de Serranillos. Larg¨¢ndose dej¨® a sus compa?eros con la tarea de frenar a Olano. Mauri y Bruyneel tendr¨ªan que pegarse entre ellos por el podio.

Pero el cimiento del edificio Jalabert no fueron ni Mauri ni Bruyneel, ni siquiera Z¨¹lle. Los tres m¨¢s famosos s¨®lo actuaron a pleno rendimiento en momentos contados. Jalabert se bas¨®, en el trabajo descorazonador para todos los rivales de gente an¨®nima que ha corrido como nunca. Leanizbarrutia subi¨® el Tourmalet con los elegidos; Stephens sprintaba en la monta?a; Sierra y Herminio machacaban en, el llano. S¨®lo el ONCE pudo permitirse el lujo de cambiar de l¨ªder a mitad de carrera.