Tambi¨¦n para los 'peques'

El n¨²mero de horas semanales y de a?os dedicados a la impartici¨®n del idioma extranjero en la primaria y la secundaria var¨ªa de unos pa¨ªses a otros. En general, la primera y la segunda lengua se llevan una dedicaci¨®n de tres a cuatro horas en las edades que van de los 12 a los 18 a?os. Con la reforma educativa espa?ola (LOGSE), la oferta obligatoria de un primer idioma se produce a partir de los 8 a?os (hasta ahora, a los 11) y del segundo, optativo, a los 12 a?os, hasta finalizar la secundaria (16 a?os), y en los dos a?os de bachillerato.Y como novedad de la reforma, los colegios pueden ofertar un contacto con las lenguas extranjeras a los cuatro a?os a trav¨¦s de la narraci¨®n oral, el juego y los balbuceos de conversaci¨®n, en manos de un especialista. "En tres a?os", afirma un, portavoz ministerial, "todos los centros podr¨¢n hacerlo optativo".

El proyecto ministerial incluye un acuerdo entre el Reino Unido y Espa?a, en colabora ci¨®n con el British Council, para multiplicar los intercambios en ambas direcciones de alumnos y profesores. Una manera de pasar de la teor¨ªa a la pr¨¢ctica. Si la re forma se desarrolla con el viento a favor, ser¨¢ posible elegir como segunda lengua, optativa, el ale m¨¢n o el griego moderno. "Va mos a reforzar la oferta", comen tan en el ministerio. In¨²til decir que en esa segunda, lengua dominar¨¢ la oferta del franc¨¦s o del ingl¨¦s y que la opcionalidad implicar¨¢ renunciar a otras asignaturas como m¨²sica o deportes.

Pero el optimismo ministerial no es tan aplaudido por los profesores de idiomas y por los centros privados, asustados por la oferta de la LOGSE. Uno de los se?uelos que ha aplicado siempre la escuela privada ha sido precisamente ¨¦se: "Idioma extranjero a,nivel biling¨¹e".

Los sindicatos ven con buenos ojos la expansi¨®n de los pro gramas de idiomas pero tambi¨¦n coinciden en que "de nada sirven los programas si no hay dinero para cumplir", afirma Palmira Garc¨ªa de STEC. "No hay finan ciaci¨®n", a?ade, "esta especie de venta de servicios es agradable pqro no tiene que ver con la realidad, sobre todo, cuando, se est¨¢ procediendo a la reducci¨®n de plantillas".