Indur¨¢in baja su desarrollo y tratar¨¢ de dejar el record de la hora en 56,200 kil¨®metros

Las teor¨ªas chocaron contra el viento. Las fuerzas de Miguel Indur¨¢in, tambi¨¦n. Indur¨¢in no batir¨¢ el r¨¦cord de la hora con el mayor desarrollo de la historia. Despu¨¦s de tres d¨ªas de entrenamiento, en el vel¨®dromo de Bogot¨¢, el corredor navarro ha decidido utilizar en su intento de batir el r¨¦cord de la hora un desarrollo menor al inicial mente previsto. Indur¨¢in tambi¨¦n decidi¨® la hora del asalto a los 55,291 kil¨®metros de Tony Rominger. Ser¨¢ lo m¨¢s temprano posible, a las seis de la ma?ana del domingo (doce del mediod¨ªa en Espa?a). Antes a¨²n es de noche en Bogot¨¢.

El 63/14 con el que avanzaba 9,36 metros por pedalada [f¨®rmula para hallar los metros por pedalada: dividir el n¨²mero de dientes del plato entre los del pi?¨®n y multiplicar por la longitud de la circunferencia de la rueda trajera] se quedar¨¢ en el almac¨¦n y en su lugar acoplar¨¢ a la Espada un 62 / 14 -simplemente baja un diente del plato-, que le proporcionar¨¢ 9,21 metros de avance por pedalada. Con ese desarrollo deber¨¢ incrementar la frecuencia de pedalada para lograr su objetivo, pasar la barrera de los 56 kil¨®metros.Indur¨¢in hizo ayer -sol y poco viento, por fin, desde que amaneci¨®, ni siquiera el roc¨ªo empapaba la pista- tres pruebas, cada una con un desarrollo diferente. Se trataba de la b¨²squeda de la cadencia ideal, aquella en que su coraz¨®n no se dispara y puede gastar con regularidad su dep¨®sito de energ¨ªa durante 60 minutos. La primera fue decepcionante aunque rodara en velocidad r¨¦cord, a casi 56 kil¨®metros por hora. Llevaba el desarrollo exagerado. Ten¨ªa, previsto. recorrer seis kil¨®metros y se qued¨® en cuatro.

Qued¨® claro que el 63/14, el plato gigantesco que tanto le asust¨® cuando lo vio, no era el desarrollo que podr¨ªa mover durante una hora a la cadencia prevista, 100 pedaladas por minuto. "Cuando hab¨ªa aire me atrancaba", declar¨®. "Pero sin obst¨¢culos, con el mismo esfuerzo me disparaba".

La segunda prueba dio con la clave. La hizo con el 61/14, el m¨¢s peque?o de los desarrollos que ha probado. La pesadez y la falta de ritmo se convirti¨® en pura fluidez. A Indur¨¢in, incluso, le faltaba plato. Se dispar¨® su velocidad -corri¨® dos kil¨®metros con salida lanzada -a m¨¢s de 56 kil¨®metros por hora- y la cadencia de pedalada, que casi alcanza las 104 por minuto. A partir de ah¨ª, ya se pod¨ªa hablar en serio. Tanto que media hora despu¨¦s son¨® el ?eureka! Con el 62/14 se dio en el clavo.

Mejor no puede estar

Miguel Indur¨¢in est¨¢ de forma igual, que en el Tour, o sea, en su pico de la temporada. Sus pr¨®ximos opinan que nunca le hab¨ªan visto tan fuerte como el d¨ªa del Mundial. Su potencia queda mermada, sin embargo, a un 88%, m¨¢s o menos, debido a la rarefacci¨®n del ox¨ªgeno, el mal de la altitud. Mejor no pod¨ªa estar. Tanto que movi¨® el 62/14 con la misma facilidad con que lo hab¨ªa hecho con el 61. Su velocidad, entonces, vol¨® de verdad: sobrepas¨® en tres kil¨®metros los 57 por hora, tiempo sideral. Ah¨ª se acabaron las pruebas. Tambi¨¦n los ¨²ltimos retoques a la Espada.Durante la ma?ana de ayer baj¨® la punta del sill¨ªn, ensanch¨® y retras¨® el manillar y cerr¨® el apoyo de los brazos. Encontr¨® la m¨¢xima comodidad posible dentro de un sufrimiento incrementado por las irregularidades de la pista, que provocan a las velocidades de Ind¨²r¨¢in un molesto traqueteo en el manillar. El ¨²ltimo retoque ser¨¢ cambiar la rueda delantera de radios por una lenticular. Eso, si el domingo, como est¨¢ previsto, no sopla el viento. Si sopla, realizar¨¢ un nuevo intento el lunes, tambi¨¦n a las seis de la ma?ana. Si persistieran las condiciones negativas, Indur¨¢in tomar¨ªa el lunes el primer avi¨®n a Madrid (12.30 horas) y se olvidar¨ªa de su aventura colombiana.