Santaella, atrapado por la deontolog¨ªa
El Consejo de la Abogac¨ªa 'empapela' al letrado de Conde y Perote
Unos seis meses tardar¨¢ en resolver el Consejo General de la Abogac¨ªa las dos denuncias contra el letrado Jes¨²s Santaella, por las presiones al Gobierno como abogado del ex presidente de Banesto Mario Conde y del coronel ex alto cargo. del Cesid Juan Alberto Perote. Dada la condici¨®n de miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Madrid que concurr¨ªa en Santaella cuando ocurrieron los hechos denunciados, la actuaci¨®n disciplinaria corresponde al m¨¢ximo ¨®rgano de la abogac¨ªa espa?ola, incluso si en las pr¨®ximas semanas abandona tal cargo.En un debate sobre L¨ªmites ¨¦ticos en el ejercicio de la profesi¨®n de abogado, organizado por el Foro de la Abogac¨ªa Espa?ola moderado por su presidente Bernardo Cremades, Eugeni Gay ofreci¨® garant¨ªas el viernes ¨²Itirno de que "el expediente, orno otros muchos, se tramitar¨¢ con absoluto rigor y absoluta seriedad". El presidente del Consejo General de la Abogac¨ªa ampliaba con esas palabras la nota de prensa difundida poco, antes, que se limitaba a se?alar que se hab¨ªa abierto "un periodo de informaci¨®n previa, con el fin de conocer las circunstancias del caso". Gay reproch¨® a quienes durante el coloquio hablaron de Santaella "sin pronunciar su nombre". El no tuvo inconveniente en decirlo, pero advirti¨®: "Unos querr¨¢n que se le sancione; otros que se le premie. Pero el ¨²nico que se pronunciar¨¢ con seriedad ser¨¢ el consejo que me honro en presidir".
Ha quedado descartado que el caso Santaella, por la v¨ªa de la renuncia del denunciado a presentarse a la reelecci¨®n de su cargo en la junta de gobierno en la renovaci¨®n de final de a?o, regrese al Colegio de Abogados de Madrid. Sin embargo, un alto dirigente de este colegio considera que, dado que la conducta que se reprocha a Santaella no guarda relaci¨®n con su cargo en la junta de gobierno, sino con su actuaci¨®n como abogado, una vez que cese en el cargo terminar¨¢ el motivo para que le expediente el Consejo de la Abogac¨ªa. "Si a Santaella se le acusara de haber distra¨ªdo fondos del colegio aprovech¨¢ndose de su cargo en la junta, s¨®lo podr¨ªa sancionarle el consejo, peto se trata de su actuaci¨®n como abogado y, trat¨¢ndose de un abogado raso, corresponde conocer de ella a su colegio", razon¨® tal alto cargo.
Los abogados, "v¨ªctimas"
Jes¨²s Castrillo, vicedecano del Colegio de Abogados de Madrid, manifest¨® p¨²blicamente que, aunque existen normas deontol¨®gicas -Ram¨®n Pelayo hab¨ªa negado que las hubiera-, "nos encontramos en momentos muy dif¨ªciles y complicados en los que desde las instituciones no se acepta la responsabilidad pol¨ªtica" y "muchas veces somos nosotros mismos las v¨ªctimas, cuando nos deslizamos hacia la heterodoxia". Sin mencionarlo, se refiri¨® al caso Santaella y se pregunt¨® si "la actitud at¨ªpica del abogado era o no correcta". Se mostr¨®. favorable a "no actuar con precipitaci¨®n, aunque nos podamos equivocar por falta de rapidez"; explic¨®, pero prefiero eso a precipitarme contra el defensor de un ser".Le contest¨® uno de los denunciantes de Santaella: Mariano Ben¨ªtez de Lugo, presidente de la Asociaci¨®n de Abogados Dem¨®cratas por Europa (Adade), pr¨®xima al PSOE. Acus¨® a Castrillo de "no ver la viga en el ojo propio" y de defender "una peligrosa impunidad", al tiempo que consider¨® que "el Consejo General de la Abogac¨ªa ha hecho bien tramitando las denuncias". Rafael Iruzubieta record¨® a Castrillo que "entre las instituciones que no funcionan hay una nuestra, el colegio, que ha estado lenta de reflejos en un caso [el de Santaella] que era una ocasi¨®n, con lo que ha a?adido un valor negativo y se ha contaminado en ese desprestigio".
Tambi¨¦n Cristina Pe?a aludi¨® a Santaella y critic¨® que el colegio de abogados no adoptara ninguna decisi¨®n sobre una actuaci¨®n "que repugna a los profesionales del derecho y excede de la noble funci¨®n de la abogac¨ªa". El ex abogado y ex diputado independiente en las listas del PSOE Ventura P¨¦rez Mari?o, actual magistrado de la Audiencia Nacional, se refiri¨® a los abogados como "asesores del poder" que ejercen " una profesi¨®n sin control social". Explic¨® que "del apego al poder han nacido unos abogados demasiado vinculados a sus clientes". El abogado laboralista Jos¨¦ Ignacio Montejo describi¨® a abogados d Madrid y Barcelona como "delincuentes legales, que est¨¢n detr¨¢s de todos los delitos econ¨®micos" y reproch¨® al Consejo de la Abogac¨ªa su silencio.
En su intervenci¨®n final, Gay arremeti¨® contra quienes desconocen o se desinteresan por las normas deontol¨®gicas, cuyo cumplimiento "vamos a exigir", dijo con energ¨ªa. Pero se opuso a quienes linchan al mismo personaje al que dos d¨ªas antes consideraban un santo y neg¨® que "cualquier charlat¨¢n pueda convertirse en juez desde alg¨²n medio de comunicaci¨®n". Asegur¨® que no aceptar¨ªa jam¨¢s "que se juzgue a nadie desde el apasionamiento" y, compartiendo esa misma pasi¨®n, como reconoci¨® despu¨¦s, se mostr¨® muy dolido porque desde un peri¨®dico [alud¨ªa a EL PA?S] se echara en falta que el reciente congreso de la abogac¨ªa no dedicara una ponencia a los abogado marrulleros.
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