Pol¨¦mica sobre las semillas

Ha sido contestada por algunos bi¨®logos la iniciativa patrocinada por EL PA?S, Adena y Walt Disney el pasado 8 de octubre a trav¨¦s de la cual se distribuyeron tres millones de semillas de diversos tipos de ¨¢rboles con la finalidad de sensibilizar la conciencia de los ciudadanos, especialmente de los m¨¢s peque?os, a favor de la defensa de la naturaleza.La mayor parte de los bi¨®logos que se han dirigido a este departamento del Defensor del Lector se han quejado de la presunta equivocada selecci¨®n de las semillas, pero al mismo tiempo han felicitado al diario por la iniciativa en s¨ª misma. As¨ª lo hizo Jordi Peix en su carta publicada en la edici¨®n de Catalu?a el d¨ªa mismo de la campa?a de las semillas, en la que afirmaba: "Les felicito por esta intenci¨®n manifiesta de sensibilizaci¨®n hacia nuestro medio natural", escrib¨ªa. 'Y a continuaci¨®n criticaba el que, por ejemplo en Catalu?a, se hubiera repartido la semilla del fresno de flor que, a su juicio, "no es lo m¨¢s adecuado para hacer siembras masivas en Catalu?a".

De un largo informe pedido por este departamento al bi¨®logo e investigador cient¨ªfico de la Unidad Estructural de Biodiversidad y Conservaci¨®n, del Real Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid, Gin¨¦s L¨®pez Gonz¨¢lez, queda claro que, incluso desde el punto de vista estrictamente cient¨ªfico, no existe acuerdo entre los especialistas sobre el tema.

Sin embargo, el bi¨®logo Josep M. Montserrat, director si no me equivoco del Jard¨ªn Bot¨¢nico de Barcelona, ha sido muy tajante en sus cr¨ªticas. En una carta enviada al Defensor del Lector llega a. afirmar que lo mejor que podr¨ªan haber hecho los lectores deber¨ªa haber sido "tirar simplemente las semillas". El director del bot¨¢nico catal¨¢n escribe: "Del art¨ªculo de presentaci¨®n de la campa?a sorprende la ignorancia de Adena o de sus asesores cient¨ªficos, as¨ª como la migenuidad de EL PA¨ªS y sus colaboradores al no solicitar una evaluaci¨®n alternativa antes de lanzarse a una campa?a de tal magnitud". Y a?ade: "Tanta ligereza y frivolidad no consigue disimular lo que, tras una buena intenci¨®n, parece la finalidad ¨²ltima de la campa?a: aumentar las ventas del peri¨®dico o la promoci¨®n de un v¨ªdeo". Y concluye: "En fin, que incluso la prensa que pretende ser la m¨¢s seria y objetiva, acaba sacando partido de los que procuran alarmar antes que educar". Y piensa el bi¨®logo catal¨¢n que operaciones semejantes "facilitan s¨®lo la prosperidad de los ecologistas m¨¢s dogm¨¢ticos".

La queja de fondo de Montserrat es que, a su parecer, las cinco semillas escogidas para cada una de las zonas de Espa?a eran semillas de ¨¢rboles que no deben, plantarse en esas zonas. Y, por tanto, in¨²tiles y contraproducentes. El Defensor del Lector ha consultado las quejas de Montscrrat con los responsables de WWF / Adena, una organizaci¨®n de solvencia en esta materia de defensa de la naturaleza y que cuenta con expertos en el asunto, con quien se hab¨ªa contado para lanzar la campa?a de la entrega de semillas.

Pablo Xandri, director de Proyectos Forestales y de Cooperaci¨®n Internacional de WWF / Aden¨¢, reconoce que mejor hubiese sido haber diversificado m¨¢s las senillas en vez de limitarlas a s¨®lo cinco tipos, pero defiende sin embargo la decisi¨®n tomada: "Debo precisar que nuestra asociaci¨®n seleccion¨® las especies, de acuerdo a la representatividad y singularidad de las mismas en cada zona", afirma. Y a?ade: "Ninguna especie puede habitar en todas sus ¨¢reas de distribuci¨®n, pero las especies escogidas pueden habitar perfectamente en algunos enclaves de las zonas. seleccionadas. En todas las especies se estudiaron sus requerimientos ecol¨®gicos con expertos, aunque fue determinante para desechar algunas, como las que recomienda el bi¨®logo Montserrat, la no existencia de cantidad suficiente en el stock del Servicio Central de Semillas de Icona (donde se adquirieron) y la fecha en que se recogieron ¨¦stas, para que su viabilidad fuera la m¨¢xima posible".

A?ade el experto de Adena que, sin. duda, "lo ¨®ptimo en dicha campa?a hubiera sido la elecci¨®n de una especie por1ocalidad", pero que "las restricciones presupuestarias y la propia distribuci¨®n del diario limitaron a una oferta de cinco especies aut¨®ctonas, lo m¨¢s representativas posibles dentro del territorio nacional y de acuerdo a las premisas anteriores". Y concluye diciendo: "No es la funci¨®n de nuestra asociaci¨®n la repoblaci¨®n forestal de Espa?a, sin duda cometido del Estado. ( ... ) Pero lo cierto es que la campa?a responde esencialmente a un concepto de concienciaci¨®n ciudadana sobre sus masas forestales, d¨¢ndoles la oportunidad de que planten su propia semilla".

Y ¨¦sa fue, sin duda, la idea madre de la campa?a de este diario: fomentar entre los lectores, y sobre todo entre los m¨¢s j¨®venes, la conciencia de amor y defensa de la naturaleza haciendo crecer en su propio jard¨ªn. o en una maceta de su balc¨®n un ¨¢rbol con su esmero y su esfuerzo. Nadie pod¨ªa pensar que esos millones de semillas iban a acabar repoblando los bosques espa?oles.

Lo explica muy bien Mar¨ªa Teresa de Teller¨ªa, la directora del Real Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid, donde se present¨® la campa?a. Tras haber le¨ªdo las cr¨ªticas de su colega, el director del bot¨¢nico de Barcelona, Mar¨ªa Teresa ha escrito al Defensor del Lector en estos t¨¦rminos: "Se ha tratado de un proyecto que pretend¨ªa inculcar, a los m¨¢s peque?os, de un modo l¨²dico y divertido, el amor a los ¨¢rboles y, en . consecuencia, el respeto a los bosques". Y a?ade: "Sin querer entrar en la pol¨¦mica que, sobre lo adecuado de las especies elegidas, se ha establecido, s¨ª me gustar¨ªa terciar en favor del esp¨ªritu que anima la campa?a. En mi opini¨®n, su verdadero ¨¦xito estar¨¢, no en repoblar nuestro territorio con las semillas repartidas -cosa que ser¨ªa ingenuo pensar-, sino en fomentar una cultura de respeto a los ¨¢rboles que puede hacer de los hoy ni?os, adultos responsables con la conservaci¨®n del medio ambiente".