Sumitomo se ofrece a absorber Daiwa, forzado a cerrar su actividad en EE UU
El Daiwa Bank, en el torbellino de un fuerte esc¨¢ndalo financiero, ha sido obligado por Estados Unidos a liquidar sus operaciones en este pa¨ªs antes de seis meses. Mientras la fiscal¨ªa de Nueva York le investiga por un supuesto fraude al m¨¢s alto nivel, el Ministerio de Finanzas japon¨¦s le ha prohibido abrir m¨¢s oficinas en el extranjero. Para el noveno banco comercial japon¨¦s, la supervivencia pasa por una fusi¨®n, seg¨²n los analistas. Sumitomo Bank anunci¨® su disposici¨®n a comprar parte de los activos de Daiwa en EE UU y en el extranjero e incluso absorber la entidad.
Las dificultades por las que atraviesa el banco japon¨¦s Daiwa, agudizadas por la orden de cierre de sus operaciones en EE UU, han desatado los rumores de que una fusi¨®n, incluso absorci¨®n, es inminente. El candidato con m¨¢s posibilidades ser¨ªa el Sumitomo Bank, uno de los bancos m¨¢s grandes del mundo, con unos activos de 500.000 millones de d¨®lares (61,5 billones de pesetas). Con la adquisici¨®n de Daiwa se convertir¨ªa en el segundo banco mayor del mundo ligeramente despu¨¦s del Tokio-Mitsubishi, recientemente fusionados.En una rueda de prensa convocada ayer, un alto cargo de esta entidad declar¨® que Sumitomo podr¨ªa contratar a algunos de los 347 empleados de Daiwa en EE UU, comprar parte de sus activos en este pa¨ªs y hacerse cargo de sus clientes en el extranjero. "Hay una alta posibilidad de que la fusi¨®n con Daiwa sea la mejor soluci¨®n para superar los problemas", dijo.
La pesadilla del Daiwa comenz¨® hace 11 a?os, cuando Toshihide Iguchi, uno de los empleados de su filial de Nueva York comenz¨® a operar irregularmente en el mercado de bonos estadounidense, al parecer sin autorizaci¨®n, y perder grandes cantidades de dinero que fueron ocultadas sistem¨¢ticamente. A finales del pasado julio, cuando el agujero alcanz¨® los 1.100 millones de d¨®lares (135.300 millones de pesetas al cambio actual), los tapujos saltaron hechos a?icos. Iguchi desempe?¨® en un principio el papel de chivo expiatorio, ya que seg¨²n fuentes del propio banco, con sede en Osaka, habr¨ªa actuado en solitario, sin permiso de sus superiores.
Sin embargo, Jo White, de la Fiscal¨ªa de Nueva York, asegur¨® en una rueda de prensa que Iguchi no ha sido el "¨²nico responsable del costoso encubrimiento y a Masahiro Tsuda, el director de la oficina, de falsificar documentos, para ocultar p¨¦rdidas. Si es declarado culpable, el banco se ver¨¢ obligado a abonar una multa de 1.300 millones de d¨®lares por los 24 cargos de conspiraci¨®n y fraude.
Medidas muy duras
En Osaka, Toshihiro Kawakami, vicepresidente ejecutivo, afirm¨® que acatar¨¢n sin rechistar la orden de cierre de sus actividades en Estados Unidos. Por su parte, el presidente ejecutivo, Takashi Kaiho, al mando desde hace menos de un mes, tras la dimisi¨®n del anterior presidente Akira Fujita, asegur¨® que "las medidas son muy duras", aunque matiz¨® que "los hechos acaecidos recientemente en el banco ofrecen numerosos aspectos sobre los que manifestamos nuestro profundo pesar".En previsi¨®n de la tormenta que se avecinaba, el Daiwa Bank ya hab¨ªa presentado medidas de reajuste al Ministerio de Finanzas nip¨®n para extremar la vigilancia en sus operaciones de alto riesgo, adem¨¢s de comprometerse a una reducci¨®n del personal de 9.600 a 7.000 empleados en los pr¨®ximos tres a?os.
Estas propuestas no parece que hayan tranquilizado al Ministerio de Finanzas que ha reaccionado, al decir de algunos expertos, con dureza inusitada. Ayer viernes, en plena jornada festiva del archipi¨¦lago, prohibi¨® al banco abrir nuevas sucursales en el extranjero y realizar operaciones de cambio de divisas. Medidas que, seg¨²n algunas fuentes, pretenden demostrar a la opini¨®n p¨²blica internacional que las autoridades monetarias est¨¢n dispuestas a zanjar la crisis de confianza en los bancos nipones.
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