Eduardo Galeano presenta 'El f¨²tbol a sol y sombra', mezcla de memorias y leyendas de hombres y pelotas
El primer futbolista no fue un ingl¨¦s con bombachos, sino un abuelo zurdo de Hugo S¨¢nchez que vest¨ªa taparrabos y que aparece en un mural de hace m¨¢s de mil a?os. Los egipcios, los romanos, los griegos -Julio C¨¦sar la tocaba bien con los dos pies- tambi¨¦n jugaron al bal¨®n, pero el precedente m¨¢s evidente de Maradona est¨¢ en el siglo XV, y es un chino gordo vestido con kimono que fue inmortalizado por un grabador golpeando una pelota de apariencia futurista."Parece un bal¨®n Adidas, pero es de cuero relleno de estopa", dice Eduardo Galeano, escritor uruguayo de 55 a?os, que ayer present¨® en Madrid El f¨²tbol a sol y sombra (Siglo XXI), una nueva incursi¨®n en la mezcla balompi¨¦ / literatura: que ofrece adem¨¢s un amplio cat¨¢logo, de an¨¦cdotas, mitos, leyendas, reflexiones y personajes en torno al juego por antonomasia.Magn¨ªfico futbolista en sue?os -"s¨®lo jugaba bien cuando dorm¨ªa"- Galeano ha escrito e ilustrado una obra sin g¨¦nero pero llena de g¨¦neros. Memorias, ensayo pol¨ªtico, historia, relato breve, suspense ... : "En eso, el libro se parece mucho a otros m¨ªos, como Memoria del fuego o El libro de Ios abrazos, en los que tambi¨¦n violaba las fronteras de los g¨¦neros. Todo lo que se cuenta aqu¨ª ha sucedido, pero est¨¢ contado con la intenci¨®n de dar vida a la historia quieta. La pena es que hay cosas que no entraron".
Por ejemplo, la historia de Devanni, delantero argentino que tir¨® fuera un penalti porque no hab¨ªa sido. "Un ej¨¦rcito de gente quiso matarlo: el p¨²blico, sus compa?eros, la hinchada..."
Es que el f¨²tbol, dice Galeano, es un espejo del mundo. "Ofrece 1.001 historias interesantes, en ¨¦l hay gloria, explotaci¨®n, amor, miseria, y, en pleno auge de la religi¨®n de mercado, en ¨¦l se manifiesta el debate entre la libertad y el miedo".
Expresi¨®n m¨¢xima de esa diatriba, la historia de los jugadores del Dinamo de Kiev, fusilados por ganar un partido a los nazis -en ella se bas¨® John Huston para Evasi¨®n o victoria-. "Les dijeron: perder o morir, y ganaron. Es impresionante ese momento en que la voluntad de ser dignos y la irresistible fascinaci¨®n de la pelota se impuso al sentido de la supervivencia".
Juego fascinante, juego vilipendiado: "Hay una tradici¨®n intelectual de desprecio que explica por qu¨¦ el f¨²tbol, siendo una pasi¨®n universal, compartida por millones de personas, no est¨¢ en los libros de historia. Para la derecha, es la demostraci¨®n de que el pueblo piensa con los pies. Para la izquierda, el culpable de que el pueblo, no piense".
Se le reprocha al f¨²tbol que sea un perfecto adormecedor de conciencias -Mussolini, Franco y Videla son los ejemplos m¨¢s claros-, pero Galeano cree que muchas veces ha sido un elemento de contrapoder, y ha servido de bandera para la gente m¨¢s linda: el Barcelona y la selecci¨®n de Euskadi que financiahan y publicitaban a la Rep¨²blica espa?ola, o la selecci¨®n argelina, que form¨® un equipo prohibido en el 58..."
A partir de una bibliograf¨ªa que incluye m¨¢s de un centenar de vol¨²menes y art¨ªculos, Galeano ha rescatado multitud de recuerdos y momentos m¨¢gicos, de los que hacen olvidar que el f¨²tbol profesional "est¨¢ sujeto a las leyes implacables del mercado".
Babelia
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