El primer acelerador de part¨ªculas estar¨¢ en Sevilla

La Universidad de Sevilla contar¨¢ en menos de un a?o con el primer acelerador de part¨ªculas de Espa?a. El Centro Nacional de Aceleradores, del que ayer se coloc¨® la primera piedra, quedar¨¢ emplazados en el parque tecnol¨®gico de la Cartuja, frente al futuro campus universitario, y estar¨¢ abierto a investigadores y empresas privadas. El coste total del proyecto alcanza los 900 millones de pesetas. La m¨¢quina lleva comprada cuatro a?os.

La compra del acelerador a la compa?¨ªa norteamericana National, Electrostatics Corporation, realizada hace cuatro a?os, ha supuesto un desembolso de 120 millones de pesetas.Por el momento, la m¨¢quina permanece en exposici¨®n en la sede del fabricante en Middleton (Wisconsin, EE UU) a la espera del acondicionamiento de las instalaciones que la acoger¨¢n en Sevilla.

Las utilidades del proyecto son numerosas, seg¨²n el vicerrector de Investigaci¨®n de la Universidad, Jos¨¦ Mar¨ªa Vega: "En medicina, entre otras cosas, puede ayudar a detectar lesiones cerebrales con m¨¢s fiabilidad que la resonancia magn¨¦tica. Adem¨¢s, tiene muchas aplicaciones en microelectr¨®nica y estudios de los materiales, sobre todo en superconductores y miniconductores".

El arte y la cultura tambi¨¦n pueden beneficiarse de las posibilidades del acelerador. La arqueolog¨ªa -dataci¨®n de restos- o las Bellas Artes -restauraci¨®n de obras- se cuentan entre las disciplinas que podr¨¢n aprovechar el complejo. "En Francia lo emplean los restauradores de museo del Louvre", explic¨® Vega.

El aparato que se instalar¨¢ en Sevilla es un acelerador electrost¨¢tico de iones pesados y protones modelo 9SDH-2, de capacidad entre peque?a y mediana, comparado con los conocidos como f¨¢bricas de Taus.

Seg¨²n el vicerrector, entre t¨¦cnicos estudiantes e investigadores, "podr¨¢n trabajar en el acelerador unas cien personas". El edificio que albergar¨¢ el acelerador se levantar¨¢ sobre los terrenos que acogieron el pabell¨®n de Australia durante la Exposici¨®n Universal de Sevilla de 1992.

Anteriormente se baraj¨® como emplazamiento el campus universitario de la avenida de la Reina Mercedes, pero el paulatino traslado previsto de escuelas y facultades a la isla de la Cartuja desaconsej¨® la idea. La superficie a construir en la primera fase es de casi 5.000 metros cuadrados.

Como rayos X

Vega destac¨® que el acelerador de part¨ªculas no representa ning¨²n riesgo para la salud de las personas. "Tiene el mismo peligro que los rayos X", coment¨®. "Apagado no hace nada y cuando est¨¢ en marcha un muro de hormig¨®n de un metro de espesor amortigua los efectos".

El vicerrector anunci¨® que la instalaci¨®n ser¨¢ revisada a conciencia antes de su puesta en funcionamiento por t¨¦cnicos del Consejo de Seguridad Nuclear. Al mill¨®n de d¨®lares que ha costado la m¨¢quina hay que a?adir 200 millones de pesetas por la construcci¨®n de la sala T¨¢ndem, destinada a albergar el acelerador, y que se espera que est¨¦ acabada en un plazo de 10 meses.

La finalizaci¨®n de la segunda fase del edificio supondr¨¢ una inversi¨®n de otros 500 millones y se espera que est¨¦ lista para finales de 1996. El coste total del proyecto ronda los 900 millones, de los que el 70% procede de los fondos FEDER de la UE, mientras que el 30% restante corre a cargo de la Junta de Andaluc¨ªa.

Una comisi¨®n t¨¦cnica nombrada por la Junta, la Universidad de Sevilla y el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas se encargar¨¢ de la supervisi¨®n del proyecto.

La de Sevilla ser¨¢ la primera instalaci¨®n de este tipo que entre en servicio en Espa?a, aunque hay otras dos en proyecto en Madrid y Barcelona. Un grupo de investigadores que trabajar¨¢ en el acelerador sevillano se encuentra actualmente en Lisboa, donde ya funciona uno, desarrollando un proyecto.