Israel y Siria prometen di¨¢logo en Barcelona, pero se resisten a sentarse a negociar
No fue posible dar un paso m¨¢s hacia la paz. La diplomacia egipcia y espa?ola se desvivieron ayer para tratar de dar un impulso a la paz en Oriente Pr¨®ximo logrando un di¨¢logo, aunque fuese indirecto, entre Israel y Siria, en la Conferencia Euromediterr¨¢nea que inaugur¨® ayer en Barcelona. Sus esfuerzos fueron vanos. Es m¨¢s, las tradicionales discrepancias entre el Estado jud¨ªo y algunos de sus vecinos ¨¢rabes imped¨ªa anoche un acuerdo sobre la declaraci¨®n final. que deber¨¢ ser aprobada hoy por los ministros de Asuntos Exteriores (le la Uni¨®n Europea (UE) y de sus 12 socios del Mare Nostrum.
Ehud Barak, el nuevo ministro israel¨ª de Exteriores, dirigi¨® su mirada hacia su hom¨®logo sirio, Faruk al Shara, y le dijo en tono solemne: "Hemos sido rivales en el campo de batalla y vertido la sangre de nuestros valientes soldados, los mejores hijos de Siria y de Israel". "Hagamos ahora lapaz". Esta era la primera ocasi¨®n desde 1991 en que miembros de los gobiernos israel¨ª y sirio se sentaban en la misma mesa."Tenemos que superar los recuerdos, derribar los muros de la sospecha y aprender a respetar el punto de vista del otro, sus intereses y su sensibilidad", prosigui¨® Barak ante un Al Shara impasible. "Nuestro desaf¨ªo consiste en comprender las necesidades mutuas de seguridad Y establecer una estructura viable que tome en cuenta a ambos. Ante todo, tenemos que proporcionar a nuestros pueblos una paz estable, normalizar nuestras relaciones y fomentar el desarrollo econ¨®mico", agreg¨®.
Las palabras de Barak hab¨ªan sido precedidas, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, por una serie de gestiones, protagonizadas por el jefe de la diplomacia egipcia, Amr Musa, que se entrevist¨® por separado con sus colegas sirio e israel¨ª. Pretend¨ªan lograr un acercamiento, por peque?o que fuese, entre los dos enemigos. El titular espa?ol de Exteriores, Javier Solana, dio a entender que podr¨ªa producirse una entrevista entre Al Shara y Barak.
No hubo entrevista
No hubo tal cita. "Al Shara no lo quiere", afirm¨® el portavoz del Ministerio de Exteriores israel¨ª. "En la actual etapa de la negociaci¨®n nada justifica tal encuentro", aseguraba, por su parte, el jefe de la diplomacia libanesa, Fares Boueiz, un fiel aliado de Siria. Damasco se niega a celebrar encuentros de alto nivel con su adversario mientras no se con sigan avances sustanciales en la negociaci¨®n de paz.La ¨²nica esperanza de acercamiento que a¨²n quedaba era Ia respuesta que Al Shara pod¨ªa dar en su discurso al llamamiento de Barak. "Siria", recalc¨® Al Shara, "est¨¢ dispuesta a comprometerse a una paz total a cambio de una retirada total del Gol¨¢n" hasta la frontera del 4 de junio de 1967. Exigi¨® que, tras un repliegue militar, los mecanismos de seguridad sean id¨¦nticos para ambos pa¨ªses y vaticin¨¦: "Entonces podr¨¢ haber un acuerdo de paz en meses".
Al Shara expres¨® despu¨¦s su rechazo al terrorismo, pero insisti¨® en distinguir este fen¨®meno del "derecho leg¨ªtimo a resistir a una ocupaci¨®n extranjera" como la que ejerce Israel sobre el Gol¨¢n o el sur de L¨ªbano donde, seg¨²n Boueiz, el Estado jud¨ªo "lanza ataques y agresiones todos los d¨ªas". La condena, con o sin matices, del terrorismo, era el principal escollo que dificultaba un acuerdo sobre la declaraci¨®n final. El ministro sirio no hizo pues ning¨²n gesto hacia sus adversarios, pero no acus¨® a ning¨²n israel¨ª de ser un terrorista como lo hizo hace cuatro a?os con el entonces primer ministro, Isaac Shamir, en la Conferencia de Paz de Madrid.
Comparado con Al Shara, Yasir Arafat, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, fue una paloma. Se limit¨® a recordar su revindicaci¨®n sobre Jerusal¨¦n, evoc¨® la figura del asesinado primer ministro israel¨ª, Isaac Rabin, y pidi¨® hasta la saciedad ayuda para su autonom¨ªa.
Antes de la apertura oficial de la conferencia, el rey Juan Carlos ofreci¨® a todos los participantes un almuerzo en el palacio de Pedralbes. El monarca espa?ol se?al¨® que las relaciones deben basarse en la "tolerancia y la solidaridad" y abog¨® en un discurso por "restituir al Mediterr¨¢neo su unidad" para desarrollar todos sus potenciales econ¨®micos y culturales. Los ¨¢rabes pusieron adem¨¢s de relieve en sus discursos otra reivindicaci¨®n, que Libia sea invitada a asistir a la pr¨®xima cita euromediterr¨¢nea, y un temor, que el coste de liberalizaci¨®n econ¨®mica que van emprender para instaurar una zona de libre comercio sea compensado por un esfuerzo europeo que colme algo la brecha entre la prosperidad de la ribera norte y el subdesarrollo de la orilla sur.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.