Pasi¨®n wagneriana

La Asociaci¨®n Filarm¨®nica ha recuperado algo que no hace muchos a?os era, frecuente: un programa orquestal enteramente dedicado a Ricardo Wagner. Por el lleno y el entusiasmo demostrado por los asistentes, tal pr¨¢ctica ha ca¨ªdo en desuso por mero antojo y no porque nadie la rechace. Bien es verdad que hoy se exigen orquestas. de categor¨ªa y directores a tono con ellas, lo que se daba esta vez.Rafael, Fr¨¹hbeck de Burgos re¨²ne actualmente el mando de la ¨®pera de Berl¨ªn, de la Radio Sinf¨®nica de la misma capital, adem¨¢s de la titularidad de la Sinf¨®nica de Viena Conocidos su origen, su temperamento y su trayectoria, no ha de extra?ar que logr¨® de los profesores berlineses versiones wagnerianas tan excelentes.

Dos preludios (actos tercero y primero) separados por el Vals de los aprendices, de los Maestros Cantores de N¨²remberg, nos dieron los perfiles de un determinado Wagner: el que prefer¨ªa.Manuel de Falla por la rotundidad de formas y expresiones y la ausencia y abuso variativo sin Trist¨¢n e Isolda, en su preludio y muerte de la protagonista, su ponen un segundo Wagner en el que los procedimientos: se ci?en estrechamente al tema en tal medida que hacen de esta ¨®pera un modelo de lo que eIautor intentaba como ideal y lograba, como en este caso, con espl¨¦ndida precisi¨®n y extraordinaria hermosura: la fusi¨®n de diversos elementos art¨ªsticos, como son lo representativo, el idioma, la melod¨ªa, el sistema arm¨®nico e instrumental y la instalaci¨®n del sujeto principal en el mismo germen de los pentagramas.

En fin, El ocaso de los dioses, con el Amanecer, el prodigioso Viaje de Sigfrido por el Rin, La muerte de Sigfr¨ªdo, La marcha f¨²nebre y el sereno y sorprendente final. La formaci¨®n, berli?esa da cuanto se le pide, empezando por una calidad id¨®nea del sonido, pero su director no solicita de ella exceso alguno, no intenta a?adir pasi¨®n a la desplegada por Wagner en grado tan impactante. Fr¨¹hbeck sirve con fidelidad un texto y sus significaciones y me parece que tal actitud es recta, honda y de esplendorosos resultados.