La ampliaci¨®n de O'Donnell pasa de tener cuatro t¨²neles a dos

Transportes construye desde julio de 1994 la prolongaci¨®n de la calle de O'Donnell hasta la M-40, un enlace de 3,5 kil¨®metros que conecta el cuarto cintur¨®n con el tercero, la M-30. La obra acaba de reanudarse (el d¨ªa 20) en una de sus partes, que durante tres meses ha estado paralizada por un replanteo. La variaci¨®n del proyecto afecta al tramo subterr¨¢neo que discurre bajo el pinar de La Elipa: el Ministerio de Obras P¨²blicas proyect¨® all¨ª cuatro t¨²neles, que ahora han sido reducidos a dos a propuesta de la empresa concesionaria, Fomento de Construcciones y Contratas.

Esta modificaci¨®n ha tenido dos efectos, uno malo y otro medio bueno. El primero es el retraso de la conclusi¨®n de la autov¨ªa desde la fecha prevista (febrero de 1996) a octubre del pr¨®ximo a?o. El segundo efecto es la reducci¨®n del coste de construcci¨®n de los t¨²neles en 100 millones de pesetas. Y es beneficioso aparentemente, ya que no ha repercutido sobre el coste total de esta autov¨ªa, 2.486 millones. Esos 100 millones sobrantes en el tramo de 356 metros que transcurre bajo el pinar de La Elipa han tenido que ser invertidos en otra parte de la autov¨ªa, explica Jos¨¦ Lezcano, director de Construcci¨®n del Ministerio de Transportes. Lo que se ha en carecido y absorbe el ahorro es el llamado trazado principal (el que bordea el cementerio de la Almudena y llega hasta la avenida de Daroca), que descansa sobre unos terrenos m¨¢s movedizos de lo que el Ministerio de Transportes calcul¨® en un principio.El lecho sobre el que reposa esta parte de la calzada era un vertedero menos compacto de lo que se pens¨® al hacer el proyecto, as¨ª que ha sido necesario removerlo (como si fuese una moqueta) y cubrirlo con otra alfombra m¨¢s compacta.

Precisamente, la inestabilidad del terreno hizo pensar a los t¨¦cnicos del ministerio en la necesidad de construir cuatro t¨²neles -dos por sentido de circulaci¨®n- en la parte de la carretera que atraviesa el pinar de La Elipa. Pero la constructora sugiri¨® que era posible, sin reducir la seguridad del subterr¨¢neo, la soluci¨®n de dos t¨²neles. Transportes analiz¨® el estudio geol¨®gico de la constructora y comprob¨® que era posible la alternativa, m¨¢s barata.

La modificaci¨®n de la obra ha supuesto tres meses de par¨®n en el inicio de los t¨²neles. El d¨ªa 20 se comenz¨® a trabajar en ellos. Los t¨²neles suponen una d¨¦cima parte de la longitud total de la ampliaci¨®n -tres kil¨®metros y medio. Pero su coste, mil millones, supone el 40% del total

El puente para salvar la avenida del Doctor Garc¨ªa Tapia se encuentra tambi¨¦n pr¨¢cticamente hecho. S¨®lo falta echar el asfalto.

Esta obra es la ¨²ltima del primer plan de accesos a Madrid, firmado hace seis a?os por el ministerio, la comunidad y el Ayuntamiento. Roberto Alberola, jefe de la demarcaci¨®n regional del MOPTMA, explica que una de sus principales funciones ser¨¢ aproximar el este de Madrid al aeropuerto de Barajas, a trav¨¦s de la M-40. Tambi¨¦n dar¨¢ servicio a barios nuevos (el ensanche del Este, m¨¢s conocido como Las Rosas) y Valdebernardo. Resulta que adem¨¢s tendr¨¢ otro uso futuro: en su conexi¨®n con el cuarto cintur¨®n enlazar¨¢ con otra autov¨ªa ahora inexistente, la entrada alternativa que desde Arganda distribuir¨¢ el tr¨¢fico de la carretera de Valencia. Dicha autov¨ªa (llamada radial III) est¨¢ prevista en el segundo plan de carreteras (1994-2001), firmado por el Gobierno regional socialista y el ministerio en junio de 1994.

La intensidad media diaria de veh¨ªculos que soportar¨¢ la ampliaci¨®n de O'Donnell hasta la M-40 es dif¨ªcil de calcular, precisamente porque a¨²n no existe la radial de la carretera de Valencia, explica Roberto Alberola, as¨ª que en los primeros a?os no ser¨¢ utilizada a plena capacidad.

Cuando se proyect¨® la infraestructura, el Ministerio de Obras P¨²blicas calcul¨® que pasa r¨ªan 100.000 veh¨ªculos diarios, que Alberola reduce, para cuando est¨¦ lista, en octubre de 1996, a unos 40.000. El enlace con la M-40 fue construido a la vez que el tramo Este de la circunvalaci¨®n, en 1991. Su estructura es igual que la de los enlaces de la M-40 en su tramo oeste, aunque se hizo de mayor tama?o precisamente pensando en la futura radial de la autov¨ªa de Valencia. La estructura ya construida espera ahora su conexi¨®n con la autov¨ªa de Valencia en Arganda.