"Taranc¨®n hubiese estado aqu¨ª"
La Iglesia cat¨®lica y el Ej¨¦rcito dos de los pilares del franquismo, enquistaron en su entorno, a partir de 1976 y durante los primeros a?os de la transici¨®n, algunas de las manifestaciones m¨¢s extremistas de intolerancia contra la libertad. Manuel Guti¨¦rrez Mellado al frente del Ej¨¦rcito y el cardenal Vicente Enrique y Taranc¨®n a la cabeza de la Conferencia Episcopal espa?ola concitaron la mayor parte de la iras de quienes se opon¨ªan al proceso de democratizaci¨®n.Ayer, junto al ex vicario general castrense Emilio Benavent ofici¨® el funeral por Guti¨¦rrez Mellado el jesuita Jos¨¦ Mar¨ªa Mart¨ªn Patino, estrecho colaborador de Taranc¨®n. Mart¨ªn Patino declar¨® que hab¨ªa querido concelebrar la misa funeral por amistad con Guti¨¦rrez Mellado del que dijo que era un hombre de profundas vivencias religiosas, y por hacer patente la memoria hist¨®rica del cardenal ya fallecido: "Fue muy amigo de Guti¨¦rrez Mellado y, si viviese Taranc¨®n hubiese estado aqu¨ª hoy. Sin duda".
El cardenal tuvo que soportar, ya en 1973, gritos de "T¨¢ranc¨®n al pared¨®n" durante el entierro del presidente del Gobierno Luis Carrero Blanco, asesinado por ETA. Tambi¨¦n Guti¨¦rrez Mellado actu¨® con energ¨ªa contra significados progolpistas en alg¨²n entierro de v¨ªctimas del terrorismo. Ayer, en el suyo, s¨®lo se escucharon ovaciones de respeto y admiraci¨®n.
El obispo Benavent no olvid¨® esta faceta, quiz¨¢ la m¨¢s amarga de la dedicaci¨®n pol¨ªtica de Guti¨¦rrez Mellado, y dijo que e muchas ocasiones "no fue entendido por aquellos a los que estimaba m¨¢s", en referencia expresa a sus compa?eros de armas.
Los centenares de asistentes que abarrotaron las dependencias del Cuartel General del Ej¨¦rcito bajaron a la entrada principal, tras concluir el funeral, y siguieron con visible emoci¨®n lo honores militares que se le rindieron.
La viuda, los cuatro hijos de Guti¨¦rrez Mellado y otros familiares acompa?aron en varios veh¨ªculos al furg¨®n funerario. Se mantuvieron con entereza y extrema discrecci¨®n. Un nieto muy joven, apretaba en sus manos la gorra de teniente general que permaneci¨® durante el funeral sobre la bandera espa?ola que cubr¨ªa el f¨¦retro.
Homenaje en Catalu?a
En Barcelona, el Parlament catal¨¢n, reunido para la sesi¨®n de investidura de Jordi Pujol rindi¨® homenaje al militar fallecido. Joan Raventos, presiden te de la C¨¢mara auton¨®mica ley¨® un texto de homenaje a su figura en el que lo calific¨® de hombre capital en la transici¨®n pol¨ªtica espa?ola y en la transformaci¨®n de las Fuerza Armadas".El propio Pujol inici¨® su discurso con un agradecimiento Guti¨¦rrez Mellado por la "comprensi¨®n" que mostr¨® en su momento hacia la autonom¨ªa catalana, "lo que hace veinte a?os ten¨ªa m¨¢s m¨¦rito que ahora".
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