Tres minutos delirantes

El pasado jueves, en un encuentro con los j¨®venes de su partido, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar se puso naturaca y declar¨® que ¨¦l "no vende motos averiadas". En cheli, averiada o no, vender una moto ahora viene a ser Io mismo que vender un burro en la Espa?a de siempre. O sea, ir de farol. El viernes, d¨ªa 12, a las 20.57, en Las noticias del gui?ol aparec¨ªa Aznar a galope de una Harley Davinson, muy favorecido con chupa de cuero tachonada de metal, dispuesto a atravesar el camino a La Moncloa como los de Easy Rider, la Ruta 66. La parodia fue casi instant¨¢nea.Todos los expertos en imagen, incluidos los suyos, est¨¢n de acuerdo en que Aznar tiene poco carisma en pantalla y que es una olla sin sal. Pero el gui?ol Aznar es todo un espect¨¢culo, un tipo entra?able, ciudadano redundante, tozudo e inocent¨®n, tan despistado que el mi¨¦rcoles ley¨® la nota de Ana Botella para las compras en el super creyendo que eran puntos del programa electoral. De seguir con estos reflejos, la campa?a que se avecina va a ser en buena parte la de los gui?oles de Lo m¨¢s Plus. Chirac acab¨® adoptando la manzana como s¨ªmbolo porque as¨ª era como aparec¨ªa en Les guignols de L'Info, la popular creaci¨®n de Canal Plus Francia que ha inspirado este espacio.

El gran defecto de Las noticias del gui?ol es que duran la d¨¦cima parte de un informativo real. Son tres minutos cat¨¢rquicos, hilarantes por momentos, saben a poco, aunque el Hilario Pino que presenta a continuaci¨®n las noticias (ticias) verdaderas (eras) parece mantener la misma actitud.

A diferencia de la caricatura gr¨¢fica, los gui?oles televisivos, si est¨¢n conseguidos, acent¨²an esa sensaci¨®n de que hay un espacio muy divertido entre la ficci¨®n y lo real. Y en la medida en que act¨²an, los personajes p¨²blicos son fantasmas de s¨ª mismos. Las noticias del gui?ol logran fijar en la pantalla su aura espectral y por eso son tan cre¨ªbles, m¨¢s humanos a veces en l¨¢tex que en carne y hueso.

Desde su inicio, por el programa han ido desfilando los fantasmas filtrados de personajes internacionales como Bill Clinton, Bor¨ªs Yeltsin, el Papa o Woody Allen, pero la industriosa capacidad espa?ola para producir vicisitudes ha reforzado el protagonismo del cartel aut¨®ctono, con Gonz¨¢lez, Aznar y Anguita como m¨¢ximas estrellas. Alfonso Guerra, Narc¨ªs Serra, Xabier Arzalluz, Jordi Pujol y Javier Solana son otros de los habituales, aunque quienes han entrado ¨²ltimamente por la puerta grande de este entrem¨¦s cat¨®dico son las m¨¢ximas figuras de nuestra posmodemidad, o sea, Carmen Sevilla y Jes¨²s Puente.

El teniente Colombo, y no hace falta explicar por qu¨¦, se ha incorporado con naturalidad al ruedo ib¨¦rico de los gui?oles hasta el punto de oficiar, nada m¨¢s conocerse la convocatoria, como maestro de ceremonias en la apertura de campa?a electoral, una jocosa primicia emitida la v¨ªspera de Reyes. Los guionistas, y ¨¦se es uno de los aciertos, trabajan como reporteros de la parodia, olfateando el lado desternillante de la actualidad. Unido a la complejidad t¨¦cnica de dar vida a los mu?ecos, es esta pesca al d¨ªa la que limita la duraci¨®n del programa.

La campa?a de candidatos de l¨¢tex abierta en Las noticias del gui?ol ha arrancado a lo Sancho Panza, con mucha breviatura. Felipe, por consiguiente, es una Locuci¨®n Conjuntiva llativa. Aznar, v¨¢yase usted, es una Moto de Pleonasmos con Imperativo Tachonado. Anguita es la Biblia en Verso. Y ?lvarez Cascos, el verdadero eslab¨®n perdido en la formaci¨®n de los hom¨ªnidos. Veremos lo que dan de s¨ª los originales. Por de pronto, la campa?a se ha puesto de lo m¨¢s Plus.