Un nido xen¨®fobo
La regi¨®n del B¨¢ltico alem¨¢n corre el riesgo de convertirse en un aut¨¦ntico nido de v¨ªboras, donde florece el racismo y la xenofobia. La ciudad hanse¨¢tica de L¨¹beck lleva sobre s¨ª el triste bald¨®n de haber sido escenario ya de dos atentados contra la sinagoga, la primera incendiada en Alemania desde que, el 9 de noviembre de 1938 en la noche de los cristales rotos, las hordas nazis incendiasen los templos, comercios y asesinasen a casi 100 jud¨ªos.En la noche del 25 de marzo de 1994, cuatro j¨®venes incendiaron la sinagoga de L¨¹beck. El a?o pasado fueron condenados por ese hecho a penas entre dos y cuatro a?os y medio de c¨¢rcel. El 7 de mayo- del a?o pasado, un d¨ªa despu¨¦s del 50? aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial, de nuevo se lanzaron bombas incendiarias contra la sinagoga.
A tan s¨®lo 20 kil¨®metros de L¨¹beck, en la ciudad de M?lln, murieron. en la noche del 23 de noviembre de 1992 dos ni?os turcos y una mujer, como consecuencia de un incendio provocado. Uno de los incendiarios fue condenado a cadena perpetua y su c¨®mplice menor de edad, a 10 a?os. A finales de agosto d¨¦ ese a?o en la misma regi¨®n del B¨¢ltico, tres meses antes del incendio de M?lln, en Rostock, en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, el Estado donde viven los presuntos autores del incendio de ayer, grupos de ultraderechistas y neonazis se dedicaron durante varios d¨ªas a incendiar residencias de asilados y libraron batallas campales con la polic¨ªa.
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