Espanyol y Zaragoza se mutilan a golpes y faltas

El Espanyol y el Zaragoza lo dejaron para la rev¨¢lida. Se negaron mutuamente y acabaron por mutilarse en un partido que acab¨® por hacer de la falta, la provocaci¨®n, el teatro, su ¨²nica raz¨®n de ser. En el trajinar constante de ca¨ªdas, golpes y acciones fingidas acab¨® pagando el Espanyol. La injusta expulsi¨®n de Herrera le dej¨® en inferioridad num¨¦rica durante 51 minutos. A partir de entonces tuvo que recomponer sus l¨ªneas, dar entrada a Pochettino para pertrechar la zona central de su defensa y prescindir de un volante con la capacidad ofensiva de Bogdanovic. En una noche de acciones destempladas y abstractas, en las que todos recibieron como primera consigna forzar el error del rival, se ech¨®, de menos el toque y sentido de Francisco.Los dos equipos minaron el campo. La falta t¨¢ctica sesg¨® de cuajo el menor indicio de jugada telegrafiada. Desde las trincheras se expend¨ªan melones. Las l¨ªneas de medios tuvieron que echar mano del pico y la pala. No hubo quien se hiciera o¨ªr en la guerra sorda. El bal¨®n no ten¨ªa due?o. El Espanyol no era capaz de dar continuidad a su relativo dominio territorial. Urzaiz y Lard¨ªn recibieron pocos balones. Urzaiz acab¨® convertido en un poste siempre pertrechado por Aguado y bajo el radar de C¨¢ceres. El corpulento delantero blanquiazul, adem¨¢s, apenas sac¨® faltas de sus constantes forcejeos. Pero caus¨® algunos problemas a la defensa aragonesa cuando se retras¨® unos metros para constituirse en la pared ,sobre la que se proyectaron sus compa?eros. Pero siempre fueron contadas ocasiones. La mejor, a cargo de Lard¨ªn.
El Zaragoza encontr¨® una mina por la banda derecha de su ataque. Belsu¨¦ se incorpor¨® con insistencia desde atr¨¢s, e Higuera y Rambert se dejaron caer en una zona en la que Torres Mestre, Nando y Arteaga no acabaron de cerrar espacios. La hemorragia hizo vulnerable al Espanyol. Pero Poyet perdi¨® dos buenas oportunidades, tras sendos centros de Higuera (m. 2 y 18), y Rambert e Higuera no acabaron de entenderse en los metros finales. No tuvo m¨¢s recursos el Zaragoza. Daniqued¨® relegado a la ingrata labor de taparle la salida a Brnovic, el hombre del que depende el arranque del Espanyol y que, al propio tiempo, le dota de su clarividencia defensiva.
El encuentro fue decayendo con el transcurrir del tiempo. El Zaragoza se mostr¨® impotente para desbordar al Espanyol pese a jugar con uno m¨¢s. El grupo de Camacho resisiti¨® e incluso igual¨® en opciones de gol al de V¨ªctor Fem¨¢ndez.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
