Samper niega su relaci¨®n con el asesinato de una testigo en el caso del narcotr¨¢fico
El presidente de Colombia, Ernesto Samper, rechaz¨® ayer "con indignaci¨®n" que se pretenda vincular a su Gobierno con el asesinato el pasado jueves en Bogot¨¢ de Elizabeth Montoya, de 46 a?os, considerada pieza capital en el proceso 8.000, la investigaci¨®n judicial sobre la relaci¨®n entre pol¨ªtica y narcotr¨¢fico y en el que est¨¢ implicado el propio Samper por supuesta financiaci¨®n por el cartel de Cal? de su campa?a electoral en 1994. El ex sargento de la polic¨ªa Jes¨²s Sarria, viudo de la testigo asesinada y actualmente en prisi¨®n acusado por narcotr¨¢fico, declar¨® el viernes a los periodistas: "A Elizabeth la pudo matar el Gobierno por las cosas que ella sab¨ªa".Tanto el ministro del Interior, Horacio Serpa, como el presidente del Congreso colombiano, Julio C¨¦sar Guerra, rechazaron "la grave y temeraria" imputaci¨®n de Sarria, y Samper anunci¨® que dar¨¢ todo su apoyo a los organismos policiales y judiciales para que esclarezcan cuanto antes y "hasta sus ¨²ltimas consecuencias" el asesinato de Elizabeth Montoya.
El crimen ocurri¨® el jueves al mediod¨ªa, pero s¨®lo el viernes por la tarde se identific¨® a la v¨ªctima. "Acabamos de ajusticiar a una persona. El cad¨¢ver est¨¢ en...", dijo una voz que llam¨® a varios medios de comunicaci¨®n. Se identific¨® como un miembro del grupo Dignidad por Colombia. La misma voz anunci¨® que muy pronto visitar¨¢n al jefe de la Polic¨ªa Nacional, Jos¨¦ Rosso Serrano, y al fiscal Alfonso Valdivieso.
"Monita retrechera"
Elizabeth se hizo famosa cuando se hicieron p¨²blicas las grabaciones de unas conversaciones que sostuvo con Ernesto Samper en su ¨¦poca de candidato; unas charlas muy familiares en las que el hoy presidente la llama "monita", y le pide que no sea "tan retrechera" (seductora). Fue asesinada en el apartamento de unos santeros cubanos a los que ella visitaba una vez por semana. Pensaba conseguir mediante brujer¨ªa la libertad de su marido. Catorce impactos de bala encontraron los forenses en el cuerpo de Elizabeth. Un comerciante de 44 a?os fue asesinado por los mismos sicarios.
Seg¨²n el ex tesorero de la campa?a de Samper, Santiago Medina, esta mujer consigui¨® aportaciones econ¨®micas de varios narcotraficantes para el candidato. Medina declar¨® a la fiscal¨ªa que el teniente general de la polic¨ªa Germ¨¢n Osorio, actual asistente del presidente y consejero de seguridad durante su campa?a, era el enlace entre Elizabeth y Samper. Desde su escondite en la clandestinidad, esta mujer envi¨® se?ales de que quer¨ªa colaborar con la justicia.
El viudo de Elizabeth Montoya se ha mostrado dispuesto a convertirse en testigo de la DEA (la agencia antinarc¨®ticos de Estados Unidos) a cambio de protecci¨®n para sus hijos.
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