El Tribunal de La Haya inicia el proceso contra el l¨ªder de los croatas de Bosnia

ENVIADO ESPECIALEl Tribunal de La Haya para la antigua Yugoslavia ha iniciado los procedimientos contra el l¨ªder de los croatas de Bosnia, Milan Martic, encausado por cr¨ªmenes contra la humanidad. El Tribunal, que preside el juez surafricano Richard Goldstone, comenz¨® ayer a escuchar testimonios contra Martic, jefe de los secesionistas serbios de la Krajina, que en mayo pasado orden¨® el bombardeo de Zagreb con bombas de fragmentaci¨®n y es una de las piezas de caza mayor en el punto de mira de los jueces internacionales.

Por otro lado, el Consejo de Seguridad de la ONU anunci¨® tambi¨¦n ayer la suspensi¨®n de las sanciones econ¨®micas contra los serbios de Bosnia que reg¨ªan desde 1994, una vez satisfechas las disposiciones militares contempladas en los acuerdos de Dayton. La ONU adopt¨® igual medida con las rep¨²blicas de Serbia y Montenegro el pasado noviembre.

Con la apertura del proceso a Martic, el alto tribunal pretende ejercer nuevas presiones sobre el r¨¦gimen del presidente serbio, Slobodan Milosevic, para que entregue al l¨ªder croata, escondido ahora en la ciudad serbobosnia de Banja Luka.

El tribunal de la ONU no puede juzgar en ausencia, pero los procedimientos iniciados convertir¨¢n a Martic en un fugitivo internacional. El dirigente m¨¢ximo de los radicales serbios de la Krajina, que huy¨® a territorio serbobosnio a ra¨ªz de la ofensiva croata que culmin¨® con la reconquista del territorio en agosto pasado, es un aliado incondicional de Radovan Karadzic y el ala m¨¢s extremista del r¨¦gimen de Pale. Ayer mismo, Martic dijo desde su refugio que la corte de La Haya carece de cualquier legitimidad para encausarle.

Algunos de los testigos que relatar¨¢n lo ocurrido en Zagreb en mayo pasado, donde los cohetes de los rebeldes serbocroatas mataron a una decena de personas, han pedido comparecer con el rostro cubierto. Los cargos contra Martic se apoyan en el car¨¢cter de las armas que orden¨® emplear: bombas racimo dise?adas para producir bajas indiscriminadas en la poblaci¨®n y la ausencia de objetivos militares en el centro de la capital croata.

Pese a que tiene ya pocos amigos pol¨ªticos e incluso ha sobrevivido recientemente a un atentado en Banja Luka, no hay muchas probabilidades en el futuro inmediato de que Milan Martic comparezca en La Haya. Su extradici¨®n por los jefes serbobosnios parece impensable, toda vez que ellos mismos, con Radovan Karadzic y el general Ratko MIadic a la cabeza, son a su vez reclamados como genocidas.

Es crucial, sin embargo, la actitud del presidente serbio, Slobodan Milosevic, quien como los dem¨¢s l¨ªderes nacionalistas de la antigua Yugoslavia ha prometido cooperar con el tribunal internacional.