Historia de una monja siempre en primera fila

Helen Prejean, la monja que ha inspirado Pena de muerte (su t¨ªtulo original es Dead Man Walking, Hombre muerto andando, una expresi¨®n que se usa en las c¨¢rceles norteamericanas para definir a los condenados a muerte), de Tim Robbins, es un personaje real. Se trata de una escritora muy apreciada y muy religiosa que se ocupa, entre otras cosas, de organizar programas sociales. Nacida en Baton Rouge, pertenece a la orden de las Hermanas de San Jos¨¦ de Modaillo y siempre ha vivido y trabajado en Luisiana. Presidenta del Comit¨¦ Nacional para la Abolici¨®n de la Pena de Muerte, Prejean -interpretada en la pel¨ªcula por la compa?era de Robbins, la actriz Susan Sarandon- ha dado en los ¨²ltimos a?os muchas conferencias y escrito numerosos art¨ªculos dedicados a la tem¨¢tica de la pena capital. Un problema que estuvo de m¨¢xima actualidad precisamente el a?o pasado, cuando en Estados Unidos se ejecut¨® el mayor n¨²mero de sentencias desde 1976: 56 ciudadanos estadounidenses fueron ajusticiados en 1995.Para sensibilizar a la opini¨®n p¨²blica sobre est¨¢ candente cuesti¨®n, sor Helen ha participado en diversos programas de ABC (World News Tonight, 60 minutes), BBC (World Service Radio) y en el especial de la NBC. En 1982, la religiosa se convirti¨® en consejera espiritual de Patrick Sommer, el asesino de dos mujeres j¨®venes condenado a la silla el¨¦ctrica y recluido en Angola, la prisi¨®n estatal de Luisiana. Pena de muerte es el resultado, justamente, de aquella terrible experiencia, un conmovedor viaje espiritual por el sistema de la pena capital vigente en Estados Unidos. De hecho, la idea de la pel¨ªcula naci¨® hace dos a?os, cuando Susan Sarandon ley¨® el libro autobiogr¨¢fico de Prejean sobre sus encuentros con los prisioneros de la c¨¢rcel de Angola. Robbins, al que Sarandon pas¨® el libro, se qued¨® igual de impresionado. "Siempre he sido contrario a la pena de muerte, pero no hab¨ªa pensado en hacer una pel¨ªcula hasta que le¨ª el libro de sor Helen", dijo Robbins en el estreno norteamericano de Pena de muerte. "Es una historia al mismo tiempo accesible y universal. El mayor reto a la hora de contarla era el de no exaltar al condenado y respetar la dignidad de las familias de las v¨ªctimas, cuya voz rara vez se escucha". Una pel¨ªcula que habla de la violencia y de las consecuencias de la violencia -pero tambi¨¦n "de madres, de amor incondicional, de redenci¨®n y, por qu¨¦ no, de la necesidad de venganza, y que se interroga sobre si es justo que el Estado se encargue de ella, a?ade Robbins- y que ha gustado a la autora del libro. "La pel¨ªcula capta completamente no s¨®lo el esp¨ªritu de mi trabajo", ha declarado sor Helen, "sino tambi¨¦n la esencia del debate sobre la pena de inuerte". De hecho, no es una casualidad que las encuestas realizadas a la salida del cine en Estados Unidos revelaran que el 80% de los ciudadanos norteamericanos es contrario hoy a la pena de muerte.