El ordenador ser¨¢ campe¨®n de ajedrez... ?Y qu¨¦?
Pregunta. ?Cree que en el futuro una m¨¢quina se convertir¨¢ en campeona mundial de ajedrez? (Luiz Cunha, Brasil)Respuesta. S?. Los ordenadores son cada vez m¨¢s r¨¢pidos y los programadores hacen un trabajo mejor. El que un ordenador se convierta en campe¨®n de ajedrez es s¨®lo cuesti¨®n de tiempo. Pero ?y qu¨¦?
Para la imaginaci¨®n popular, jugar al ajedrez se ha convertido en un baremo de la inteligencia humana. Pero, de hecho, no sirve para calcular ni de lejos la inteligencia humana. Cuando un ordenador juega al ajedrez expertamente, es una demostraci¨®n de fuerza bruta -la capacidad del ordenador para analizar miles de millones de resultados diferentes de una posible jugada-. Cuando un ordenador logr¨® jugar bien a las tres en raya, nadie dijo: "Dios m¨ªo, qu¨¦ peligroso. ?El ordenador piensa!". Los ordenadores no piensan cuando juegan a las tres en raya, y no piensan cuando juegan al ajedrez.
Gary Kasparov, campe¨®n mundial de ajedrez, bati¨® hace poco a Deep Blue, una combinaci¨®n programa-ordenador de IBM que juega muy bien al ajedrez. Deep Blue puede analizar 50.000 millones de posiciones de ajedrez en tres minutos. "Lo que yo hago presintiendo si una posible jugada es acertada o equivocada, la m¨¢quina lo encuentra haciendo esos miles y miles de millones de c¨¢lculos", comenta Kasparov.
Es fascinante que un humano tenga la capacidad de prever mejor que un ordenador de alta potencia el posible resultado de una jugada de ajedrez. La capacidad del cerebro de Kasparov para igualar pautas me asombra. De hecho, mientras que a algunos les impresiona que un ordenador pueda rivalizar con el mejor jugador' de ajedrez del mundo, a m¨ª me impresiona m¨¢s que un humano pueda rivalizar con el ordenador que mejor juega al ajedrez del mundo.
Deep Blue triunf¨® en la primera partida de la serie, lo cual sorprendi¨® a gran parte del mundo del ajedrez, incluido Kasparov. Pero el humano logr¨® imponerse en el resultado final. "Gan¨¦ el torneo 4 a 2, pero fue tan duro como un campeonato del mundo y, cr¨¦anme, jugu¨¦ muy, muy en serio", dice Kasparov. A pesar de su imponente dominio del ajedrez, Kasparov cometi¨® el error de sobrevalorar la naturaleza de su oponente. Despu¨¦s del torneo, dijo: "Creo que por primera vez en la historia de la humanidad hemos visto, o desde luego yo he visto, algo similar a la inteligencia artificial".
Cre¨¢nme, no hay ninguna inteligencia artificial en Deep Blue. Es s¨®lo un ordenador que ejecuta un programa ingenioso. El error de Kasparov es comprensible. Los humanos tienden a antropomorfizar las m¨¢quinas.
No es raro que la gente que, juega una partida contra un ordenador imagine que el oponente tiene personalidad, voluntad o atisbos de inteligencia real. La versi¨®n electr¨®nica del juego de cartas Hearts despierta una rivalidad casi personal en algunas personas que juegan contra ¨¦l. Una persona puede jugar otra mano de cartas en busca de la "revancha" contra el ordenador.
En un sentido muy real, el reciente torneo de ajedrez se disput¨® entre una persona, Kasparov, y un comit¨¦ opuesto de personas que emplean un medio para llevar a cabo estrategias colectivas. El medio era un ordenador. Deep Blue podr¨ªa haberse impuesto en el reciente torneo si Kasparov no hubiera cambiado su forma de jugar despu¨¦s de la derrota inicial. Que el campe¨®n de ajedrez fuera capaz de identificar el punto d¨¦bil del ordenador y adaptar su estrategia da fe de la inteligencia humana. Lo m¨¢s que el ordenador puede hacer por mejorar es aceptar perfeccionamientos del programa hechos por programadores humanos.
Deep Blue ser¨¢ perfeccionado en los pr¨®ximos meses y a?os, y Kasparov dice que est¨¢ a la espera. De hecho, dijo que el torneo que con m¨¢s ganas espera es el pr¨®ximo que mantendr¨¢ con Deep Blue. Cuando llegue el d¨ªa en que un ordenador sea campe¨®n de ajedrez, el hito no ser¨¢ realmente tan significativo. No deber¨ªa ofender la dignidad humana m¨¢s que la certeza de que una persona con prism¨¢ticos puede ver objetos distantes mejor que una persona sin ellos.
P. ?Qu¨¦ les pasar¨ªa a las redes y sistemas inform¨¢ticos y a Internet si los polos magn¨¦ticos de la tierra se invirtieran, como la historia demuestra que hacen? (Mary Jo Trifini, Settl¨¦, Washington).
R. Nada. Los equipos electr¨®nicos est¨¢n dise?ados para resistir campos magn¨¦ticos miles de veces mayores que la min¨²scula fuerza magn¨¦tica de la tierra. No se sabe por qu¨¦ la polaridad de campo magn¨¦tico de la tierra se ha invertido varias veces, aunque posiblemente tenga que ver con enormes cambios 'geol¨®gicos. Si es as¨ª, un cambio en los pollos magn¨¦ticos podr¨ªa ir acompa?ado de terremotos, inundaciones y lava, y los equipos electr¨®nicos no son inmunes a estas fuerzas.
P. En su libro, Camino al futuro, usted habla de que los negocios se ir¨¢n racionalizando. Esto implicar¨¢ probablemente una p¨¦rdida de puestos de trabajo. ?Qu¨¦ tipo de empleos se perder¨¢n. como consecuencia de la autopista de la informaci¨®n? ?Qu¨¦ tipo de empleos se crear¨¢n? (Scott, Australia).
R. Se perder¨¢n un mont¨®n de puestos burocr¨¢ticos y se crear¨¢n un mont¨®n de puestos de trabajo orientados a Pos servicios en ¨¢reas como la educaci¨®n, la medicina y el ocio. La mayor parte de los empleos que acabar¨¢n perdi¨¦ndose son m¨¢s bien rutinarios, porque un ordenador s¨®lo puede hacer ese tipo de tareas. Como dec¨ªa antes, incluso el que un ordenador juegue al ajedrez implica el c¨¢lculo mec¨¢nico de miles de millones de posibilidades. La mayor parte de los nuevos puestos de trabajo ser¨¢n consecuencia del enriquecimiento de la sociedad gracias al aumento general de la productividad. Una medicina mejor, m¨¢s tiempo libre y una ense?anza mejor son algunas de las ¨¢reas en las que creo que la sociedad concentrar¨¢ su incrementada riqueza.
Bill Gates es presidente de Microsoft
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