Defensa dedica mil millones de pesetas a la incierta construcci¨®n de un cohete espa?ol

Mil millones de pesetas dedica este a?o el Instituto Nacional de T¨¦cnicas Aeroespaciales (INTA), del Ministerio de Defensa, para fabricar un cohete espa?ol, el Capricornio, que se lanzar¨ªa dentro de dos a?os, aseguran sus responsables, desde un centro espacial en Canarias que a¨²n no existe. El proyecto Capricornio, que algunos expertos del sector espacial espa?ol comparan con los ojos del Guadiana y otros consideran el cuento de la lechera del INTA, pretende desarrollar un lanzador para situar cargas civiles de hasta 100 kilos en ¨®rbita de 600 kil¨®metros de altura.

Desde Canarias, por la situaci¨®n geogr¨¢fica de las islas, no se pueden lanzar cohetes hacia las ¨®rbitas m¨¢s utilizadas por los sat¨¦lites, las ecuatoriales.El Capricornio, un programa iniciado hace cinco a?os en el INTA, ha pasado por periodos de congelaci¨®n y de relativa reactivaci¨®n, acompa?ado de negociaciones infructuosas con socios internacionales. Ahora, se dedican mil millones de pesetas con la intenci¨®n de solicitar otros tantos en 1997 y en 1998, para hacer el cohete. Unos 30 ingenieros del INTA se dedican a ello, un equipo francamente reducido, seg¨²n expertos del sector, para un objetivo tecnol¨®gicamente tan complejo y sin una experiencia de partida en propulsi¨®n espacial, como es el caso de Espa?a.

Ni el Capricornio ni el proyecto de la base de Canarias (en la isla de Hierro, aunque no se han adquirido los terrenos ni se ha definido la financiaci¨®n necesaria) han sido sometidos a las siguientes instancias encargadas de coordinar la investigaci¨®n: Comisi¨®n Interministerial de Ciencia y Tecnolog¨ªa; Plan Nacional de Investigaci¨®n Cient¨ªfica y Desarrollo Tecnol¨®gico, Programa Nacional del Espacio y Comisi¨®n de Grandes Instalaciones Cient¨ªficas, seg¨²n ha confirmado la Secretar¨ªa de Estado de Universidades e Investigaci¨®n.

Objetivo tecnol¨®gico

De momento, este a?o, se pretende probar un cohete demostrador, denominado Argo, que consiste en una primera etapa del lanzador adquirida tal cual en Estados Unidos por un importe de 120 millones de pesetas seg¨²n informa Manuel Mulero, subdirector del INTA. El a?o que viene ya se ensayar¨ªan dos etapas juntas, con la segunda desarrollada en Espa?a. Despu¨¦s vendr¨ªa la tercera, tambi¨¦n nacional. El objetivo del proyecto Capricornio no es comercial, explica Mulero, sino "realizar un desarrollo tecnol¨®gico que nunca se ha hecho aqu¨ª y dar a Espa?a un acceso al espacio".De cualquier forma, dice, el INTA no ha hecho un estudio de mercado cuantificando la demanda de lanzamientos de peque?os sat¨¦lites, para misiones de car¨¢cter cient¨ªfico, como los que el Capricornio lanzar¨ªa.

"El futuro del Capricornio est¨¢ en los sat¨¦lites cient¨ªficos", afirma Mulero, argumentando que las universidades y centros de investigaci¨®n tienen que recurrir para sus experimentos espaciales a lanzamientos en grandes cohetes como cargas XXXXXX, con la consiguiente dependencia de fechas y ¨®rbitas.

De todas formas, el INTA no ha hecho un sondeo de mercado. "No se ha cuantificado la demanda", dice el subdirector general.

Por su parte, los pa¨ªses europeos con una larga tradici¨®n ya en lanzadores no acaban de decidirse acerca de la oportunidad de los peque?os cohetes. "Hemos negociado mucho, nos hemos ofrecido a los italianos, los franceses, los ingleses y los alemanes", dice Mulero. "Si llega el caso de hacer un lanzador europeo participar¨ªamos, pero nuestra credibilidad pasa porque sepamos hacer algo nosotros. Cuando demostremos que somos capaces de integrar un cohete y de lanzarlo tendremos mucho m¨¢s peso espec¨ªfico en un programa europeo".

Control desde tierra

No ha sido esta la estrategia espacial espa?ola hasta ahora, orientada fundamentalmente a participar con socios de alta tecnolog¨ªa en proyectos europeos a trav¨¦s de la. ESA e ir aprendiendo.Actualmente varias empresas espa?olas participan, por ejemplo, en el programa europeo Ariane con total respetabilidad por parte de los socios europeos.

Estas empresas no est¨¢n en el plan industrial del Capricornio, para el que se ha formado un consorcio, explica Mulero, integrado por Explosivos Espa?oles, Explosivos Alaveses, Cesa y Ceselsa (empresa del INI que se ocupar¨ªa de sistemas de control desde tierra del cohete).

De cualquier forma, el INTA no puede hacer todo el Capricornio, explica Mulero. Adem¨¢s de la primera etapa, tendr¨¢ que adquirir, por ejemplo, sensores o el ordenador principal encargado del XXXXXX. Eso s¨ª, se pretenden acometer en este proyecto "por primera vez tecnolog¨ªas punta como la preparaci¨®n del propulsante, el mezclado, el colado".